12 de Febrero – Crónica de un viaje a Lewislandia (Primera parte)

La 7ma Marcha al Lago escondido reunió a más de 400 manifestantes de todo el país que, durante 6 días, marcharon en la puerta del Tacuifí en Bariloche y El Bolsón, mientras la columna Juana Azurduy integrada por 63 compañeros, después de una larga travesía por la montaña, intentaría llegar al Lago Escondido y acampar frente a la casa de Joe Lewis.
De Kennedy al Bolsón
Todo viaje militante comienza con la salida de un micro desde algún lugar del conurbano, y por esos conjuros del destino partimos de la plaza J.F. Kennedy en el partido de San Martin, aunque eso no cambió la mística militante que se respiraba. Diversas organizaciones confluyeron en el micro, desde compas de la izquierda nacional hasta agrupaciones del peronismo y gremiales como la CTA. Yo fui invitado por el grupo GPS (Grupo por Soberanía) integrado por ex combatientes de Malvinas.
El viaje fue ameno y con buen aire acondicionado. Después de 18 horas de camino, dejamos La Pampa y empezamos el recorrido por los lagos de Río Negro. Al comienzo, el paisaje era más desolado y desértico y luego se fue transformando en un vergel. Lagos rodeados de majestuosas montañas nos dejaban boquiabiertos. Era la primera vez que yo viajaba a la Patagonia, y mientras observaba todo maravillado, mi amigo Hernán Rial de GPS me decía “¿Viste lo que es esto? Todo es así de lindo y no termina más, por eso se quieren quedar con la tierra”. Llegamos el domingo por la tarde a un paraje cerca del Bolsón y nos acomodamos, como pudimos, en una pintoresca casa octogonal de madera a la vera de la mítica ruta 40. >
Fuente: Agencia APU
https://www.agenciapacourondo.com.ar/opinion/cronica-de-un-viaje-lewislandia-primera-parte