10 de Noviembre – Susana García Iglesias, murió el pasado sábado en Madrid. Por Martín Fernández

La hija de desaparecidos de Antas de Ulla que no sabía odiarSusana García Iglesias
Susana García Iglesias. archivo Martín Fernández
En 1976, militares la buscaron, asaltaron su casa y asesinaron a sus padres.
Vivió toda su vida con la carga de saber que asesinaran a sus padres por las ideas y la actividad política y social de ella. Y aún así logró sobreponerse. Lo hizo de un modo admirable, impensable: ni cerró su pensamiento ni llenó de odio su corazón. Murió el pasado sábado en Madrid. Era hija de emigrantes de Dorra (Antas de Ulla), consejera cultural de la Embajada Argentina, amante de Cangas y Vilasindre, de Galicia y Ribadeo. Dedicó su vida a los demás y a lograr que los asesinos de la Dictadura Argentina fuesen juzgados, que sus crímenes no quedaran impunes. Y lo logró. Muchos no olvidaremos nunca a Susana García Iglesias, mujer extraordinaria, entrañable ser humano.Susana García Iglesias con sus compañeros de la Embajada de Argentina
Susana García Iglesias con sus compañeros de la Embajada de Argentina. Archivo Martín Fernández.
Sus padres, Dolores del Pilar Iglesias Caputo y Ramón García Ulloa vivían en Caballito (Buenos Aires). No eran ni montoneros, ni peronistas, ni radicales, ni de izquierdas, ni de derechas. No les gustaba la política. Eran gallegos emigrantes, gente honesta y trabajadora que, con su constante esfuerzo, educaron a sus tres hijas -Susana, abogada laboralista; Mirta, psicóloga; y Silvia, estudiante- y tenían lo necesario para vivir en un hogar digno.
En marzo de 1976, el general Videla y sus conmilitones dieron un golpe de Estado. Ramón y Dolores, conscientes del peligro que corrían sus hijas, las convencieron para que marcharan a España. Compañeras de barrio habían sido detenidas y allí estarían seguras. Todo parecía bajo control. Pero la noche del 6 de octubre de 1976, un grupo de milicos, que buscaba a Susana, asaltó su casa, no la encontró y secuestró a sus padres. Al día siguiente, volvieron. Pero esta vez traían las llaves. Saquearon la casa, la desvalijaron: fotos, ropa, enseres, coches de la familia. Luego, obligaron a Ramón a firmar cheques y vaciaron sus ahorros. Y al poco de haberlos raptado, los asesinaron en la ESMA (Escuela Mecánica de la Armada) por «colaborar con la subversión y tener familiares comprometidos».>
La Voz de Galicia- A Mariña
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/amarina/2021/11/07/susana-garcia-hija-desaparecidos-antas-ulla-sabia-odiar/0003_202111X7C4991.htm