21 de Febrero – El odio suele volver como un bumeran. Por Araceli Bellotta.

Por tercera vez el ex vicepresidente Amado Boudou volvió al penal de Ezeiza después de que la Sala IV de Casación revocara su excarcelación por pedido expreso de la Casa Rosada, a través de la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Oficina Anticorrupción (OA), organismos no autorizados para intervenir en esta instancia, y sin que lo solicitaran los fiscales que son los indicados. La sentencia por el caso Ciccone de cinco años y diez meses no está firme y no existe ningún riesgo de fuga ni de obstaculización de una investigación que ya está cerrada. La historia demuestra que el odio desparramado desde el poder suele volver como un búmeran, tal como lo experimentó Cornelio Saavedra, el presidente de la Primera Junta, quien desató la persecución judicial contra sus adversarios.
Porque esta costumbre de “encarcelar por las dudas” nos retrotrae a la época de la colonia. Entonces regían los Juicios de Residencia, un procedimiento del derecho castellano e indiano que consistía en que al término del desempeño de los funcionarios públicos debían someterse a la revisión de sus actuaciones. >
Fuente: El Presente de la Historia