La Policía porteña ataca a vendedores ambulantes senegaleses. Bajo pretexto de liberar el espacio público los uniformados dan rienda suelta a su idiosincrasia. Golpean a mansalva, rompen mercaderías o la “confiscan” de prepo. Arrestan, injurian mezclando puteadas “genéricas” con frases discriminatorias y xenófobas. Barrabravas armados por el Estado y bancados por el Gobierno.>
Fuente: Pagina 12