10 de Noviembre – El Episcopado creará un fondo solidario para reemplazar los aportes del Estado.

La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) creará un fondo solidario para ir reemplazando en forma gradual los aportes del Estado nacional para asignaciones a los obispados, becas para los seminaristas y parroquias de frontera.
En declaraciones a Radio María Argentina, el presbítero Máximo Jurcinovic, responsable de prensa de la CEA, dio detalles de esta decisión que adoptó el plenario episcopal durante su asamblea de esta semana en la casa de ejercicios El Cenáculo La Montonera de Pilar.
“Esto ya había sido trabajado por la Comisión Permanente de la CEA en agosto pasado. La idea es crear un fondo solidario, mientras continuará el diálogo con el gobierno nacional por el reemplazo gradual de los aportes, a través de la Secretaría de Culto y la Jefatura de Gabinete”, precisó. >
Fuente: AICA
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En la imagen: Enrique Ángel Angelelli, de Fray Carlos de Dios Murias, del presbítero Gabriel Roger Longueville y del laico Wenceslao Pedernera.
«Pascua Riojana, alegría de la Iglesia»
Con el título “Pascua Riojana, alegría de la Iglesia”, los obispos argentinos reunidos en la 116° Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Argentina compartieron a través de un mensaje “la gran alegría de la próxima beatificación del obispo Enrique Ángel Angelelli, de Fray Carlos de Dios Murias, del presbítero Gabriel Roger Longueville y del laico Wenceslao Pedernera. Será el 27 de abril de 2019”.
>>>En su carta destacan la figura de monseñor Angelelli, obispo de La Rioja entre 1968 y 1976, quien “sabía que su muerte era inminente y estaba dispuesto a dar la vida”. Al mismo tiempo, señalan los obispos, sostenía que lo vivía “con una gran paz interior y esperanza cristiana”. Recuerdan además que “no ocultaba su temor pero se aferraba a la fortaleza que Dios le regalaba. De ese modo se sentía unido a la entrega de Cristo hasta el fin”.
“Como buen pastor, cuando se disponía a dar la vida, experimentaba que su pueblo sufría y de algún modo moría en él y con él. El papa Francisco quiso valorar especialmente esos casos en que se verificó ‘un ofrecimiento de la propia vida por los demás, sostenido hasta la muerte’, porque ‘esa ofrenda expresa una imitación ejemplar de Cristo, y es digna de la admiración de los fieles’”, aclaran. >>>
Fuente: AICA