11 de Abril – Una comisión para borrar la evidencia de la acción represiva. Por Luciana Bertoia

El plan de la Armada para deshacerse de las pruebas de las desapariciones
En octubre de 1982, más de un año antes del regreso de la democracia, un grupo de represores de la ESMA recibió la tarea de borrar toda la evidencia de los crímenes mientras las denuncias de víctimas y organismos de derechos humanos adquirían cada vez más relevancia. La información surge de una investigación del Ministerio de Defensa a la que accedió Página/12.
Más de un año antes de que terminara la dictadura, la Armada puso en marcha una comisión para borrar los rastros de sus crímenes. Fue una iniciativa de oficiales que habían actuado dentro de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), el principal campo de concentración de la Marina. Denunciado al retorno de la democracia por el sobreviviente Víctor Basterra, un trabajo de reconstrucción minuciosa del Equipo de Relevamiento y Análisis Documental de la Dirección Nacional de Derechos Humanos del Ministerio de Defensa, al que accedió Página/12, revela cómo funcionó la Comisión Permanente de Estudios de Situaciones Especiales (Copese) entre 1982 y 1984 para evitar que se investigaran los crímenes aberrantes en los que habían participado los caballeros del mar.
La documentación también le da un rol relevante a Pedro Carlos Florido, un operador de la Marina en los tribunales y exempleado del gobierno de Mauricio Macri, a quien la justicia no lo alcanzó.>
Fuente: Pagina12
https://www.pagina12.com.ar/539049-el-plan-de-la-armada-para-deshacerse-de-las-pruebas-de-las-d