27 de Mayo – Napalpí: quedan jueces en la Argentina. Por E. Raúl Zaffaroni

Introducción
La justicia federal del Chaco consideró que la Masacre de Napalpí constituye “un crimen de lesa humanidad cometido en el marco del genocidio de los pueblos indígenas”. Este veredicto, que formará parte de una sentencia histórica, nos permite echar un vistazo sobre la base de la estructura de nuestra magistratura y sorprendernos con su destello de luz entre tanta oscuridad.
Por E. Raúl Zaffaroni* (para La Tecl@ Eñe)
Desde hace siete años la justicia federal de Buenos Aires concentra en dos jueces de primera instancia la casi totalidad de las causas contra funcionarios del gobierno de Cristina Kirchner. En la Casación, dos jueces concentran también todos los planteos de incompetencia en esos procesos y absorben la de otros en causas que involucran a funcionarios del gobierno de Macri. Todo esto se jalona con sorteos en que el azar provee coincidencias increíbles. Pero los dos afortunados jueces de la máxima instancia penal federal también visitaron quince veces a Macri, por “vieja amistad” y para “jugar al paddle” y, por otra casualidad, algunas de sus visitas coinciden con resoluciones por las que éste los felicitó públicamente y también criticó a la jueza que votó en disidencia. Estos son algunos, entre otros hechos..>
Fuente: La Tecla Eñe
https://lateclaenerevista.com/napalpi-quedan-jueces-en-la-argentina-por-e-raul-zaffaroni/

27 de Mayo – Les Nietes toman la posta. Por Dolores Curia

Cómo surgió la organización de nietos y nitas de desaparecidos
Jóvenes de todo el país empezaron a reunirse en un espacio que suma la militancia por los derechos humanos, los feminismos y las disidencias sexuales, y la lucha contra la violencia institucional
¿Qué dicen las nuevas voces de la memoria? ¿Cómo miran el mundo les nietes de los desaparecidos? Un mundo que nombran en inclusivo, al que quieren transformar en sus propios términos: “con alegría”, aunque eso a veces signifique no ser “tan manija como los abuelos” y, en comparación, se sientan “militantes flancito». Desde agosto del año pasado muches se reúnen en Nietes, una organización que empezó en las redes, tomó forma con algunos encuentros el verano pasado y que, pandemia mediante, continúa vía Zoom, desde La Plata a todo el territorio. >En Nietes hablan de “tomar la posta” y de compartir una “responsabilidad histórica”.
Fuente: Pagina 12
https://www.pagina12.com.ar/424320-les-nietes-toman-la-posta
RelacionadoPara H.I.J.O.S., escrachar significa sacar a la luz algo que permanece oculto.
Por Roque Casciero. La revolución del sabemos lo que hicieron
La irrupción de H.I.J.O.S. en la escena pública y el significado profundo del escrache
En la Argentina post De la Rúa hay un nuevo léxico, en el que sobresalen palabras como corralito o cacerolazo. Pero una que ya se usaba desde antes cobra cada vez más fuerza: escrache. Cualquier político o economista al que se descubre en algún lugar público es un potencial escrachado, en manifestaciones tan espontáneas como mediáticas. Sin embargo, el escrache nació de otra forma. Fue el modo que la asociación H.I.J.O.S. encontró para denunciar la impunidad de los genocidas de la última dictadura militar (y a sus cómplices del poder económico), beneficiados por el indulto de Menem y las leyes de Obediencia Debida y Punto Final. >
Fuente: Pagina 12
https://www.pagina12.com.ar/424350-la-revolucion-del-sabemos-lo-que-hicieron

27 de Mayo – Sobre el periodismo, un texto de Oscar Wilde

Antiguamente existía la tortura. Ahora tienen la prensa. Ciertamente esto constituye un adelanto. Pero todavía el medio  es  malo,  equivocado  y  desmoralizador. Alguien –¿fue Burke?– llamó al periodismo el cuarto poder. Eso sin duda era cierto en ese momento. Pero en el presente es el único poder. Se ha comido a los otros tres. Los Señores Temporales no dicen nada, los Señores Espirituales no tienen nada que decir; y la Casa de los Comunes no tiene nada que decir y lo dice. Estamos dominados por el periodismo.>
Fuente: Mal Salvaje
https://malsalvaje.com/2022/04/25/sobre-el-periodismo-un-texto-de-oscar-wilde/