LOS INTERESES DEL CLUB BILDERBERG PARA INVADIR CON MERCENARIOS A LIBIA
Lunes 14 de noviembre de 2011 por CEPRID
Sirio Quintero
CEPRID
INTRODUCCIÓN
La invasión mercenaria a la Jamahiriya Libia marca una nueva etapa de la agenda del Club Bilderberg. El único oponente histórico al cual el Club Bilderberg no ha logrado someter es la organización colectiva basada en la comuna familiar. Una visión hegemónica desde la antropología política, devela las razones por las cuales la cultura, tradición y modelo político de Libia debía, según la visión de ellos, ser destruido a toda costa por los mercenarios e instituciones al servicio de poder imperial.
La teoría política contemporánea de crítica profunda, incluso la marxista, ha olvidado destacar este vital tópico sobre la organización estatal basada en la comuna familiar. Precisamente en esto, el Gran Jefe estuvo “como faro de luz” para los hermanos africanos y lo señala él en su último testamento.
Las comunas, sean éstas de raíz familiar, tribal o territorialidad colectiva, constituyen un objetivo bélico del imperialismo y como tal, las comunas siempre han sido un tópico presente en los planes políticos de los intelectuales del Club Bilderberg, tales como Bertrand Russell, Zbigniew Brzezinski, Henry Kissinger, Samuel Huntington.
El presente análisis debe ser visto como un aporte para desenmascarar una temática aun no develada al público, pero que en diferentes escenarios de estrategia político-militar y de seguridad ya ha sido expuesta. La consolidación de una capacidad de respuesta cierta, urge incorporar definitivamente la organización popular a esta lucha, democratizando y haciendo participativo el conocimiento, en un escenario de guerra de cuarta generación, sabiendo que existe una fase de guerra de quinta generación orientada a eliminar, con agentes “detonantes biológicos”, a líderes mundiales emblemáticos sin dejar rastros perceptibles.
1.-LA FAMILIA: TRANCA EN EL PASO DEL ESTADO SOBERANO AL NUEVO ORDEN MUNDIAL - Russell
Sería un examen incompleto sobre ataque al pueblo libio el poner a la riqueza petrolera como principal motivo del genocidio de la OTAN y sus mercenarios en la Jamahiriya. Los Bilderberger ambicionan, planifican y combaten maquiavélicamente a largo plazo por metas más allá de lo material inmediato, contra obstáculos de mayor importancia y enemigos más ‘peligrosos’. Sí, realmente lo más temido por los núcleos hegemónicos ante la Jamahiriya Libia ha sido la consolidación familiar y su reflejo en la organización política estatal de admirable referencia para toda el África y los demás Pueblos de Sur, línea en la cual intenta consolidarse la Revolución Bolivariana Latinoamericana con epicentro en Venezuela.
En Libia se está utilizando la guerra bacteriológica, dando fin a la fase de la globalización y abriendo el paso al establecimiento del gobierno mundial; a ello se suma la utilización de la bomba FAE (Fuel-Air Explosive), ‘explosivos de aire y combustible’, apodada ‘bomba atómica del pobre’, una nueva arma genocida, la cual, además de su poder explosivo superior al TNT, es un aerosol que aspira todo el oxígeno en la zona de impacto en un radio de 2km², y fue lanzada contra la población de Bani Walid, habiendo exterminado en la noche del dieciocho de octubre a más de mil doscientos habitantes (http://www.libiahabla.org/?p=1969), paralelo fue asesinado el anciano pacífico y reconciliador Jefe supremo de la Tribu de Warfalla en Bani Walid, una de la tribus más grandes de Libia y decidida defensora del patriota suelo de la Jamahiriya. En tierra libia se está aplicando, así, uno de los doce disparadores de conflictos, para desestabilización de Estados soberanos y para consolidar una nueva estructura de poder mundial, anunciados por Daniel Estulin y Adrián Salbuchi.
Los desalojos de la etnia de romaníes irlandeses –travellers- en Gran Bretaña, en el condado de Essex, a unos 40km de Londres (Violentos desalojos contra comunidad gitana en Reino Unido: http://www.granma.cubaweb.cu/2011/10/20/interna/artic01.html ) constituye el intento de borrar todo vestigio de organización comunal capaz de superarse en condiciones autogestionarias e independiente del control político por parte de un Estado capitalista represivo, saqueador y anulador de la producción familiar, de sus bienes acumulados y de las ofertas de servicios comunitarios compensatorios. Estados opresores pasan por encima de la propiedad privada comunal pues se resisten a dejar crecer iniciativas de autogestión comunal que conducirían a la independencia de los pueblos contra los mecanismos de esclavitud moderna: hipoteca de la propia fuerza de trabajo para adquirir viviendas, créditos impagables, trabajo sub-pagado con eliminación progresiva de los beneficios de jubilación y mecanismos de elección de candidatos no postulados desde la bases populares, sino representantes de los grupos hegemónicos locales y respondiendo a intereses de los núcleos de poder mundial.
El ataque a la Jamahiriya Libia, un Estado de comunas obedece a un plan de gobierno mundial, el cual pasa también por someter a China (http://resistencialibia.info/?p=551). En este contexto cobra aun más relevancia el modelo de organización de comités del Estado libio. Gaddafi rememoró, en su último testamento conocido, que los “comités populares dirigen nuestro país”. Estos comités populares constituyen una expresión del “concepto de la democracia real”, un legado que Gaddafi logró sembrar en su pueblo y que explica su admirable resistencia ante los bombardeos y mercenarios genocidas del poder imperial invasor, cuyos objetivos ocultos eran ciertamente dejar sin infraestructura a las organizaciones comunitarias tribales.
Dichos comités se han basado en la cohesión familiar fundamentada en el respeto a la sabiduría del jefe tribal. Además de ser celosos portadores de la cultura y la tradición ancestrales de la Jamahiriya Libia, esos comités se ocupaban de la intermediación para promover la convivencia pacífica y la protección de la familia mediante la solución de necesidades de vivienda, de salud, de educación, de alimentación y de acogencia a hermanos vecinos desvalidos. Precisamente fortalezas como éstas, manifiestas en la organización política de la Jamahiriya Libia, han sido el tipo de blanco a demoler considerado en las ideas germinales que nutrieron al Club Bilderberg, como brazo político, para la pretendida creación del nuevo orden mundial. Bertrand Russell fue el mentor intelectual de esas élites.
El principal contenido ideológico-imperialista de B. Russell, queda expuesto en sus tres libros The scientific outlook (TSO, 1931); Education and the Social Order (ESO, 1932) y The impact of science on Society (ISS, 1952). Ellas constituyeron las conferencias que Russell ofreció originalmente en las sociedades elitistas en el Ruskin College de Oxford y en la Royal Society of Medicine de Londres, desde donde se planificó la alianza entre países de población blanca para aplicar una política de genocidio mundial contra la ‘población de color’ causando una ‘muerte negra’. Al respecto afirmaba Russell: “Yo no considero que el control de la natalidad es la única vía en la cual la población puede ser contenida del incremento. Existen otras, las cuales, uno debe suponer, oponentes del control de la natalidad preferirían. Guerras, tal como apuntaba hace un momento, han estado siendo al respecto decepcionantes, sin embargo, la guerra bacteriológica puede probarse más efectiva. Si una muerte negra pudiese ser diseminada, a lo largo de todo el mundo, una vez en cada generación, los sobrevivientes podrían procrear libremente sin hacer al mundo demasiado lleno. En esto no habría nada que debiese ofender la conciencia del devoto o contener las ambiciones de los nacionalistas. El estado de cosas podría ser en algo displacentero, pero ¿qué hay con eso? [¿cuál es el problema en eso? N.dT]. Realmente los pueblos de inteligencia alta son indiferentes a la felicidad, especialmente a la de otros pueblos” [el resaltado es en este caso y los siguientes nuestro] (ISS, 1952: 127-128).
Las elucubraciones realizadas por ‘Sir’ Bertrand Russell, “Premio Nobel de literatura”(1950), sobre los preparativos a largo plazo para la imposición del modelo de nuevo orden mundial, aunque poco conocidas, se bifurcan en tres áreas: (1) La identificación de la familia como el enemigo más grande de los Estados que pretenden imponer el orden mundial, (2) los métodos de destrucción familiar y (3) el uso de la educación para diseminar ideologías pseudo-científicas, como el tecnocratismo y el constructivismo, los cuales deberían conducir a instaurar el pensamiento débil, especialmente desplazando erróneamente metodologías de las ciencias naturales como las matemáticas hacia las ciencias humanas como la pedagogía y las ciencias de la educación.
Para los promotores de la instauración de un gobierno planetario a partir de la creación de un nuevo orden mundial no existen diferencias políticas o religiosas fundamentales. Sólo existen tendencias políticas deseables o corrientes políticas inconvenientes, ambas catalogadas según sirvan o atenten contra la preservación del privilegiado estatus de vida y dominación que han alcanzado los países por tradición colonialistas y sus nuevos aliados.
El nuevo gobierno mundial estaría en manos de la oligarquía, quien accedería a los más avanzados conocimientos tecnológicos para consolidar y preservar su poder a costa de las masas ignorantes ciegas y acientíficas (TSO, 1931:142; 235).
La educación seria el instrumento predilecto para amoldar el pensamiento social (ESO, 1932:14; 154), mientras que la familia seria el blanco a ser destruido puesto que es la única instancia capaz de frenar los cambios sociales que la clase tecnocrática quisiese inducir y ella es una fuerza opuesta al Estado desde que éste existe (ESO, 1932: 48).
2.- LA DESTRUCCIÓN DE LA FAMILIA COMO OBJETIVO POLÍTICO DE LA OLIGARQUÍA MUNDIAL
Para los oligarcas promotores del nuevo orden mundial no existe ni catolicismo ni comunismo, tampoco ni liberalismo ni socialismo, como enemigos políticos: “La sociedad científica será simplemente la oligárquica, tanto en el comunismo o socialismo” (TSO, 1931:233), además en el capitalismo, así como donde exista cualquier forma de democracia (Idem).
Para la oligarquía mundial representada en el Club Bilderberg, su único enemigo lo constituyen las raíces culturales, afectivas y morales que son sembradas por la familia y que pueden frenar su proyecto de difusión de la tecnocracia amoral como modelo de vida, de valores y de liderazgo en la sociedad. En consecuencia habrá que destruir la familia: “El sentimiento de parentesco tiene una poderosa influencia en el comportamiento, no sólo en la mujer, sino en el hombre. Nosotros no tenemos data disponible para juzgar que les sucedería si sus sentimientos fueran removidos, pero sí podemos conjeturar con seguridad que ambos podrían ser cambiados enormemente. Es probable que la mujer sintiese pocos deseos de niños en esas circunstancias (…) Es probable que la relación del hombre y la mujer se desarrollase de modo trivial y que la afectividad conyugal llegase a ser algo raro. Probablemente el hombre llegaría a ser menos inclinado al trabajo duro (…) Es dudoso, sin embargo, en un mundo donde la familia no existiese, que el hombre ordinario se dedicase por sí mismo a eventos que ocurriesen después de su muerte (…) A pesar de todo, hay una gran cuestión que debe ser dicha en vista a la otra cara del asunto. Todas las emociones posesivas son peligrosas, y no menos aquellas de los padres hacia sus hijos” (ESO, 1932: 50).
Los promotores de la creación de un gobierno mundial hallaban dos grandes obstáculos para la concretar una ‘solución lógica’ (genocidio mediante una ‘muerte negra’ y hambrunas) al problema de regular desde una autoridad mundial la ‘sobrepoblación’ que impedía el avance en su plan hegemónico: “Hay suficiente disposición para crear una fuerte autoridad internacional, pero ésta será imposible si tiene (…) medidas impopulares. Existen, de hecho, dos dificultades opuestas. Si en el presente los alimentos fuesen racionados, las naciones de Occidente podrían sufrir algo que ellos verían como hambruna. Pero, por otra parte, las naciones pobres son aquellas, cuya población se incrementa más rápido, podrían sufrir más por un reajuste, con lo que permanecerían igual. Tal como las cosas están, todo el mundo se opondría a la lógica solución” (ISS 1952: 137). En vista de esta evidente dificultad, el mentor de los planes hegemónicos Bertrand Russell, propuso una forma sutil y oculta de solución basada en cambiar la vida familiar (TSO 1931: 11).
La introducción de cambios en la vida familiar se basó en utilizar la salud como componente geo-político clave en la implantación del orden mundial hegemónico. Retrotrayéndonos a la actualidad, una aplicación brutal que estas ideas la vemos en la invasión de la OTAN en Libia, destruyendo el sistema consolidado de salud de la Jamahiriya, una larga labor bajo el liderazgo de Gaddafi: “Durante 40 años, o aún mas, no recuerdo, hice todo lo que pude para darle al pueblo casas, hospitales, escuelas, y cuando tenían hambre alimentos.” (Testamento de Gaddafi).
3.- ATAQUE BIO-QUÍMICO-PSICOLÓGICO PARA DESMEMBRAR LA FAMILIA Y AISLAR AL INDIVIDUO
La implantación de un “gobierno científico elitista”, desde la perspectiva oligárquica, deberá fortalecer la salud en los descendientes de las familias de formación científica y, para no perder la lealtad popular, debería crear las condiciones en las familias inferiores para debilitar la sed de libertad y de esperanza.
Para las familias oligárquicas se aplicará “tratamiento eugenésico, químico y termal del embrión, y deberá ser usada dieta desde los primeros años en vista al logro de la más alta capacidad que exista” (TSO 1931: 253). El anhelo por mejorar la raza oligárquica consistía en lograr que “por una bien dispuesta selección de químicos que sean inyectados en el útero, sea posible cambiar a un niño en un matemático, un poeta, un biólogo o un político” (ISS 1952: 176). Aquí ya se visualizan elementos de la depuración racial intrauterina como práctica oculta en sus propias poblaciones. Siendo así, ¿qué se puede esperar para el resto del mundo ‘inferior’?. La población restante, acientífica e ignorante, “por medio de inyecciones y drogas y químicos (…), sería inducida a soportar de cualquier manera lo que sus maestros científicos puedan decidir que es para ellos bueno” (TSO 1931: 268; Cfr: http://www.aporrea.org/tecno/a120740.html).
Haciendo uso de la ciencia habrá que aplicar una trilogía para desmembrar la familia: “La dieta, las inyecciones y las imposiciones punitivas deberían combinarse desde muy jóvenes para producir la clase de carácter y la clase de creencias que las autoridades consideren deseables. Así, cualquier tipo de crítica seria sobre el sistema de poder, se convertirá, psicológicamente, en imposible” (ISS 1952: 66).
(i) La dieta deberá inducir a los cambios en la estructura biológica natural del individuo, por medio de transformaciones genéticas o la incorporación de químicos y fragmentos virales en los alimentos para que liberen toxinas y produzcan adicciones, teniendo por objetivo debilitar el funcionamiento mental y físico del organismo humano: “Los hombres adquirirán poder para alterarse a sí mismos y usarán inevitablemente este poder” (TSO 1931: 169).
(ii) Las inyecciones servirían para la inoculación de agentes infecciosos que aletargan la población y disminuyen la vida biológica. La idea de impactar la sociedad por medio de agentes virales bacterianos vía vacunación, plantas e insectos estaba tan adelantada ya en la década de los cincuenta, que otro ‘lord’ británico, dedicó una publicación a tal temática. Se trata del virólogo ‘Sir’ Frederick Charles Bawden con su ensayo “The impact of viruses on society” (IVS 1956: 65-101). Este coagente del plan hegemónico, en su intrincado discurso, alude a la relación entre las vacunas y la aparición de alergias (Y estamos citando algo dicho en los años cincuenta!). Como en estas esferas del poder nada es casual, es menester mencionar sus interrogantes acerca de la relación entre los virus y el desenlace cancerígeno: “¿Pueden las células contener en su propia constitución las potencialidades para llegar a ser cancerígenas cuando sean expuestas a un estímulo apropiado? ¿O acaso tienen que contraer algunas partículas extrínsecas que permanezcan latentes y inofensivas hasta que la célula obtenga el estímulo correcto?” (IVS 1956: 101).
Excursus I: La respuesta a dichas interrogantes ya estaba siendo avizorada para esa época (Véase detalles en: http://www.aporrealos.com/forum/viewtopic.php?t=25538). Por una parte, la respuesta a la primera interrogante, consiste en haber desentrañado el mecanismo de replicación de las células embrionarias, cuya alteración sirvió para la inducción del cáncer, al igual que en la actualidad sucede con las células madres (por ello el interés de recolectar información genética de mandatarios y líderes específicos e introducirle agentes sintéticos “detonantes biológicos” adaptados a su genética individual. Casos para reflexionar: Fernando Lugo –Paraguay-, Cristina Fernández –Argentina-, Lula Da Silva y antes su llave José Alencar Gomes da Silva –Brasil-, Hugo Chávez –Venezuela. Cfr. http://networkedblogs.com/jUFEi o http://www.abrebrecha.com/articulos.php?id=147638). Por otra parte, la respuesta a la segunda interrogante radica en la introducción de partículas o fragmentos de agentes infecciosos o virus bacterianos los cuales serán activados por agentes sintéticos y por fuerzas electro—magnéticas específicas que simulan las fuerzas electrostáticas propias de las células huéspedes (Fin del excursus).
(iii) Las imposiciones, sea como expresión de conductas autoritarias y moralistas de los padres, sea como conjunto de reglas o sanciones jurídicas que permean el hogar, destruirían el ambiente afectivo de niño, de modo que éste desarrollase actitudes de rechazo a su propio núcleo familiar, buscase suplir su carencia emotiva y afectiva en nichos de grupos externos de otros niños o adolescentes, quienes recibirán las pautas de conducta desde los medios de difusión masiva, obteniendo como resultado la desintegración familiar.
4.- EDUCACIÓN PARA LA DESTRUCCIÓN DEL LIBRE ALBEDRÍO
Dentro de la planificación del modo como se crearían las condiciones para establecer una autoridad planetaria, la educación, la salud y la propaganda desempeñaban un rol fundamental: “El propósito de la educación debe ser destruir el libre albedrío. De esta manera, después de que los jóvenes abandonen la escuela deberán ser incapaces a lo largo de sus vidas de pensar o actuar al contrario de lo que sus maestros hubieran querido, es decir, autónomamente” (ISS 1952: 66).
La educación estaría acompañada de medidas en el campo de la salud: “Nuevas formas de embriagarse aconteciendo sin dolor de cabeza pueden ser descubiertas, y nuevas formas de intoxicación pueden ser inventadas de manera tan deliciosa que por su voluntad los hombres están dispuestos a pasar sus horas ayunando en la miseria. Todas esas son posibilidades en un mundo gobernado por el conocimiento sin amor, y el poder sin encanto” (ISS 1952: 268).
Excursus II: Formas deliciosas de intoxicación se notan en el aspartame y el ciclamato presentes en los dulces. Estudios recientes han establecido que la ingesta de bebidas gaseosas, además de convertirse en elementos etílicos dentro del organismo, incrementan la violencia física y las conductas agresivas en los jóvenes (Solnick SJ, Hemenway D "The ’Twinkie Defense:’ The relationship between carbonated non-diet softdrinks and violence perpetration among Boston high school students" Injury Prev 2011; DOI: 10.1136/injuryprev-2011-040117). Dentro de los ‘inventos deliciosos’ se halla uno que utiliza el contacto sexual para hacer eficaz un arma bacteriológica cancerígena que selectivamente ataca a grupos étnicos, realizada con los avances de la biología sintética: VPH y HIV, invento reconocido por la American Association for the Advancement of Science cuando concluía que el “Special Virus” (HIV) es “un nuevo agente patógeno producido vía manipulación de genes humanos” (Graves, 2001: 91). En este contexto de fabricación de agentes sintéticos con capacidad biológica para afectar ciertos grupos étnicos, cobran relevancia las palabras del Presidente racista Sudafricano, P.W. Botha, en plena época de lucha de la población contra el apartheid, cuando el 15 de agosto de 1985 declaró: “Nuestra unidad de combate está ahora entrenando especiales chicas blancas en el uso de elementos sintéticos de envenenamiento lento. Lo nuestro no consiste ahora en una guerra donde podamos usar la bomba atómica para destruir a los negros, sino que debemos usar nuestra inteligencia para afectarlos. El encuentro de persona a persona puede ser muy efectivo. Tal como los registros lo muestran, el hombre negro de desvive por ir a la cama con la mujer blanca; aquí está nuestra única oportunidad… Nosotros hemos recibido un nuevo contingente de prostitutas de Europa y América” (Idem). Otra evidencia de igual peso, sobre el carácter de arma étnica del virus causante del SIDA, también la constituye las afirmaciones acerca de la creación de vacunas contra el HIV, cuya efectividad se ha mostrado en los grupos no-blancos (Walsh, Nancy (2003). AIDS vaccine may reduce rate of infection: greater efficacy in nonwhites. Clinical Psychiatry News, August, 2003). Lógicamente, ello permite constatar que este virus está diseñado para “grupos étnicos de color”, por lo cual ahí se mostraría mayormente la eficacia hallada.(Fin del excursus)
La educación será usada como propaganda en pro del nuevo orden mundial: “Aparte de la cohesión nacional con el Estado, lo cual es todo aquello que la educación estatal intenta lograr en el presente, la cohesión internacional, y en el sentido según el cual toda la raza humana es una unidad co-operativa, es inmensamente necesaria si nuestra civilización científica quiere sobrevivir. Yo pienso que esta supervivencia será una exigencia, como condición mínima, para el establecimiento del Estado Mundial y la subsiguiente institución de un sistema mundial de educación, diseñado para producir lealtad al Estado Mundial” (ESO, 1932: 14). “La educación universal ha incrementado inmensamente las oportunidades de propaganda. No sólo es la educación en sí misma y en todos lados propagandista, sino que el poder de leer hace a toda la población susceptible a la influencia de los medios de difusión masiva” (ESO, 1932: 154). Esta idea será desarrollada por otro ideólogo del Club Bilderberg, Zbigniew Brzezinski (Esto será objeto de la siguiente entrega).