ESTADOS UNIDOS Y LA UNIÓN EUROPEA ARMARON A LOS TERRORISTAS EN IRAK Y SIRIA Y CREARON EL ESTADO ISLÁMICO
Jueves 11 de diciembre de 2014 por CEPRID
CEPRID
La injerencia de Estados Unidos y la Unión Europea en Medio Oriente para destruir a Irak y derrocar al gobierno constitucional de Bashar al- Asad de Siria, el apoyo económico y militar que incluyó la entrega de armas nucleares a Israel, fueron determinantes para el surgimiento de ISIS-EIIL que, inicialmente eran grupos terroristas armados, financiados y entrenados por la CIA y otras agencias de inteligencia de la UE, constituyen ahora un ejército que siembra el terror en nombre del Estado Islámico que pretende organizar un califato al estilo medieval pero con armas dotas de tecnología de punta entregadas por el imperio y sus aliados europeos.
Ante el avance del ejército del EIL, entre asustados y asombrados, Estados Unidos y sus aliados de la UE, con bombardeos indiscriminados de por medio, pretenden destruir a su propia creación, pues demasiado tarde entendieron que dieron origen a un monstruo difícil de matar. Hay analistas y especialistas en Medio Oriente que afirman que ni en treinta años podrán derrotar a ISIS-EIL y que más bien podría convertirse en el II Vietnam para el imperio y sus secuaces.
El Estado Islámico de Irak (EIL) se convirtió en Estado Islámico en Iraq y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés) cuando, con apoyo y patrocinio de Estados Unidos y sus cómplices europeos inició y extendió sus acciones terroristas en Siria, para derrocar al Presidente Bashar al-Asad. Los muertos sirios se cuentan por millares como obra de esos terroristas fanáticos, dogmáticos y en extremo fundamentalistas.
El objetivo inmediato de esos terroristas que cuentan ahora con un ejército superior a los 18.000 soldados con refuerzos provenientes del Reino Unido, de otros países de Europa y Estados Unidos, es la autoproclamación del califato mundial que pide que se le llame Estado Islámico y se le reconozca a nivel internacional..
Precisamente para negar la existencia de un Estado Islámico, Washington y otros países y expertos se refieren a los yihadistas como ISIS y no como Estado Islámico.
“El grupo yighadista ISIS que está extendiendo su terror por Siria e Irak modificó su nombre a mediados del mes de julio, tras autoproclamar su califato. Dejó de llamarse Estado Islámico en Iraq y el Levante para autodenominarse Estado Islámico. ¿Qué significa su nombre? ¿Tiene connotaciones distintas el uso de uno u otro?
La historia del grupo se remonta a 2002 cuando el jordano Abu Musab al Zarqawi, bajo el nombre de Tawhid wa al-Jihad, quien juró lealtad a Osama bin Laden, por lo que un año después se convirtió en la rama en Irak de Al Qaeda. Con la muerte de Abu Musab al Zarqawi en 2006, Al Qaeda creó al Estado Islámico de Irak, que fusionó a las milicias en Irak y Siria, creando el actual Estado Islámico y de Levante. En ese momento adoptó el nombre de EIL
En 2013, con ese nombre y todavía como una marca de Al Qaeda, extiende sus tentáculos por Siria. EIL se convierte en otro de los grupos rebeldes que lucha contra el régimen de Bashar al Assad con el apoyo del Frente Al Nusra, la rama de Al Qaeda en Siria. Su líder, el enemigo número uno de EEUU, Abu Bakr al Baghdadi ordena que el grupo terrorista empiece a denominarse Estado Islámico en Iraq y el Levante (ISIL por su siglas en inglés).
El presidente Barack Obama, explicó el pasado 10 de septiembre, su estrategia para terminar con el grupo terrorista. En todo momento se refiere a los yihadistas con este acrónimo y no como Estado Islámico, nombre con el que la organización quiere denominarse.
La corresponsal de CNN para Asuntos Globales, Elise Labott, asegura que “Washington no quiere reconocer sus planes para un califato”. Idea con la que coincide Haizam Amirah Fernández, experto en Mediterráneo y Mundo Árabe, del Real Instituto Cano. “No utilizo el nombre de Estado Islámico porque no es un estado y la mayoría de los musulmanes no los consideran islámicos”, asegura en declaraciones a www.lainformacion.com
Por su parte, John Daniszewski, vicepresidente y director editorial senior de noticias internacionales para The Associated Press, indica que la inclusión del Levante en su nombre “es la traducción más exacta del nombre del grupo y refleja sus aspiraciones de gobernar sobre una amplia franja del Medio Oriente”.
La diferencia entre ISIL e ISIS hace referencia a la traducción árabe del nombre. Según señala la CNN, ISIS es una traducción al inglés de las siglas en árabe para: al Dawla al Islamiya fi al Iraq wa al Sham, o el Estado Islámico en Iraq y al Sham. Dado que los planes de la organización son fundar un califato, que se extienda desde Turquía por toda Siria hasta Egipto y que incluya los territorios palestinos, Jordania y Líbano. De ahí que para muchos expertos, esta sea la opción más correcta.
El pasado mes de julio el Estado Islámico proclamó el califato en los territorios de Siria e Irak bajo su control. A partir de ese momento, pidió ser reconocido con ese nombre. Aunque sea el nombre más usado en los medios y en las declaraciones políticas, cada vez son más los críticos y las voces que se niegan a llamarlos así para no reconocer el éxito de su califato. Haizam Amirah asegura que “si lo presentamos así, cualquier ataque contra el estado islámico puede ser presentado como una guerra contra el Islam y eso a ellos les da más oxígeno.”
Sea como sea, se les llama como se les llame, más allá de su nombre, el grupo yihadista se conoce como sus prácticas medievales que incluyen crucifixiones, decapitaciones y ejecuciones públicas con las que ha llamado la atención del mundo entero.
USA-ESTADO ISLÁMICO
Noam Chomsky, reconocido escritor y filósofo de Estados Unidos, criticó la política estadounidense en Oriente Medio, relacionó el surgimiento del Estado Islámico (EI) con la intervención de ese país en Iraq.
En una entrevista concedida a Truthout sostuvo que “La aparición del EI y la difusión general del yihadismo radical es una consecuencia bastante natural del martilleo de Washington sobre la frágil sociedad de Iraq“. “Creo que Estados Unidos es uno de los creadores fundamentales del EIIL. (…) Sus intervenciones destructivas en el Medio Oriente y la guerra en Irak fueron las causas básicas del nacimiento del EIIL”, declaró Chomsky.
En otra parte de sus declaraciones y en alusión al alto el fuego acordado el pasado mes de agosto entre el régimen de Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), denunció el incumplimiento del régimen usurpador, mientras la parte palestina, según el lingüista norteamericano, “lo cumple”.
Teniendo en cuenta el apoyo militar, económico, diplomático e ideológico de Washington al régimen de Tel Aviv, acusó a las autoridades israelíes de llevar adelante sus políticas expansionistas en los territorios ocupados palestinos “dejando a los palestinos en cantones desmembrados”.
En referencia a la reciente agresión israelí contra el pueblo palestino de la Franja de Gaza durante la cual murieron más de 2160 personas, criticó el suministro armamentístico de EE.UU. al régimen de Israel. “En un momento dado, las armas israelíes parecían estar agotándose, y los EE.UU. suministraron amablemente a (el régimen de) Israel armas más avanzadas, lo que le permitió seguir la embestida”, deploró.
CREADOR CLAVE
Chomsky asegura estar de acuerdo con las recientes declaraciones del escritor y exagente de la CIA, Graham Fuller, que acusó a EE.UU. de ser uno de los “creadores clave” del grupo terrorista, como resultado de la guerra contra Iraq emprendida en 2003.
“La situación es un desastre para EE.UU., pero es un resultado natural de su invasión“, dijo Chomsky.
“Una de las graves consecuencias de la agresión de Estados Unidos y Reino Unido fue la de inflamar los conflictos sectarios que ahora están destrozando Iraq en pedazos, y que se han extendido por toda la región con consecuencias terribles”, agrega en académico.
Chomsky advierte que el fanatismo religioso no se propaga sólo en los países de Oriente Medio, sino también en EE.UU., fenómeno del que responsabiliza en parte al Partido Republicano.
“No hay muchos países en el mundo donde la gran mayoría de la población crea que la mano de Dios guía la evolución, y donde casi la mitad de ellos piense que el mundo fue creado hace unos pocos miles de años”, dijo.
“Y a medida que el Partido Republicano se ha vuelto tan extremo sirviendo a los ricos y al poder de las corporaciones, que no puede apelar a la opinión pública para que apoye sus políticas reales, se ha visto obligado a recurrir a estos sectores como una base de votantes, dándoles una influencia sustancial sobre la política”, denunció Chomsky Por su parte, León Panetta que fuera Jefe del Pentágono y de la CIA aseguró que la guerra contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) será compleja y podría durar 30 años debido a las decisiones tomadas por el presidente Barack Obama.
En declaraciones a ’USA Today’. dijo: "Pienso que estamos ante un tipo de guerra que podría durar 30 años y que podría plantear amenazas para Libia, Nigeria, Somalia y Yemen”
En concreto, Panetta sostiene que Obama fracasó al no presionar lo suficiente al Gobierno iraquí para que autorizara la permanencia de un contingente de soldados estadounidenses en el país después de la retirada de las tropas en 2011, estimando que eso creó un "vacío" en la seguridad.
El periodista Murad Sezer en Reuters sostuvo que los ataques aéreos liderados por EE.UU. en Siria no han logrado interrumpir el avance del Estado Islámico en Kobani, poniendo en duda la eficacia de la estrategia occidental empleada para acabar con el movimiento yihadista.
Prácticamente después de que el Pentágono haya extendido su campaña aérea desde Irak hacia Siria para combatir a los activistas del Estado Islámico, los milicianos kurdos afirman que estos bombardeos han tenido un impacto mínimo a la hora de hacer retroceder posiciones a dicho movimiento yihadista, informó ’The Guardian’.
"No basta con realizar ataques aéreos de forma aislada para derrotar al Estado Islámico en Kobani", afirma Idris Nassan, portavoz de los combatientes kurdos. "Están asediando la ciudad en tres frentes y los aviones de combate simplemente no pueden hacer blanco en cada uno de los activistas del Estado Islámico sobre el terreno".
Asimismo, Nassan advirtió que el Estado Islámico había adaptado sus propias tácticas militares para evadir dichos ataques aéreos, dispersándose y escondiéndose al divisar aviones de combate. En la práctica, los milicianos kurdos son los que han defendido a la ciudad de Kobani, Se ha denunciado que los yihadistas del EIL han capturado, torturado, violado y asesinado a milicianas kurdas que defienden su ciudad.
“En este sentido, el reconocimiento de que los bombardeos aéreos no son suficientes para cambiar el rumbo de la situación desestabiliza a los miembros de la coalición liderada por EE.UU., incluido el Gobierno del Reino Unido, que también apoya la idea de que la guerra aérea es la mejor opción en la lucha contra el Estado Islámico.
Pese a las voces que insisten en que la estrategia actual no es la adecuada para vencer a los yihadistas, Nick Clegg, el viceprimer ministro británico, afirma que no cree que "la solución resida en la incrementación de las fuerzas armadas terrestres como si de se tratara de una lucha convencional ’Estado contra Estado".
Por su parte, el primer ministro David Cameron no se quiere pronunciar acerca de los bombardeos aéreos en Siria hasta que los liberaldemócratas y laboristas se pongan de acuerdo.
Sin duda, la situación en Irak, Siria, los Estados árabes que forman parte de la coalición y Turquía es sumamente compleja tanto por los intereses geopolíticos y económicos de las grandes potencias, la corrupción de muchos Estados Árabes que se han prestado al juego del imperio y sus adláteres, como por los sentimientos religiosos fanatizados de los combatientes yihadistas.
Hay analistas que critican ácidamente a Estados Unidos al afirmar que no podrán derrotar al Estado Islámico si hasta ahora no han sido capaces de vencer a Al Qaeda que es otra criatura creada por el imperio y su CIA. El Estado Islámico es una criatura más monstruosa y más radical y se preguntan ¿Se trata acaso de preservar la unidad de Iraq? Ignacio Ramonet en un análisis efectuado en Le Monde diplomatique y luego difundido por Cubadebate sostenía: Pero entonces, ¿por qué empezar la ofensiva actual armando masivamente a los peshmergas kurdos que anuncian públicamente su intención de separarse y de proclamar la independencia del Kurdistán iraquí? O quizás se trate, como se pretendió en 2003, de establecer una democracia auténtica en Iraq. Pero entonces, ¿por qué se toleró, hasta hace muy poco, que Nuri Al Maliki, primer ministro iraquí de 2008 a 2014, condujese una política escandalosamente discriminatoria a favor de los chiíes y contra los suníes, empujando a estos a los brazos del EI?
Por otra parte, dice: “la gran coalición constituida en torno a Estados Unidos para atacar al EI y que supera los cuarenta países, aparece como demasiado heterogénea y hasta contradictoria. Uno de sus pilares, por ejemplo, Arabia Saudí es una de las peores dictaduras del mundo, con miles de presos políticos en sus mazmorras, con pena de muerte para los homosexuales, discriminaciones aberrantes contra las mujeres, con una concepción del Islam (el wahhabismo) de lo más retrógrada e integrista que existe, y sobre todo un país que ha financiado durante años al Estado Islámico antes de descubrir, como el Dr. Frankenstein, que su engendro se le había ido de las manos. O Qatar, otra espantosa dictadura, que financia a los Hermanos Musulmanes por todo el mundo islámico…, ¿No hay una contradicción en querer hacer la guerra a los terroristas del EI aliándose con países que financian abiertamente otro terrorismo islámico?
Se modifica la estrategia global
Es obvio que la decisión del presidente Obama de comenzar una nueva guerra en Oriente Próximo modifica además la estrategia global de Estados Unidos en materia de conflictos y de prioridades geopolíticas. Washington había decidido iniciar un amplio movimiento de un nuevo despliegue hacia Asia, donde se halla su contrincante principal para el siglo XXI, China, y donde está hoy (y mañana más) el centro económico del mundo. Según los grandes “tanques de pensamiento” estadounidenses, Europa ya no necesita (a pesar de la situación en el este de Ucrania) de una presencia militar importante norteamericana. Y aunque los enredos de Oriente Próximo van a seguir siendo inextricables, ya no ponen en peligro la seguridad estratégica de Estados Unidos puesto que, gracias al petróleo y al gas de esquisto descubiertos en territorio estadounidense, la dependencia de los hidrocarburos de Oriente Medio ha dejado de ser significativa”. La doble moral del imperio en el Oriente Medio ha sido demostrada en un reportaje difundido por Reuters cuando manifiesta: “Mientras el Estado Islámico consolida sus posiciones en la ciudad de Kobani, una fuente en el Departamento de Estado de EE.UU. revela cómo los estadounidenses mantenían diálogo con la élite política kurda en Siria y alentaban a sus oponentes.
El portal de la revista ’Foreign Policy’ informa que hace años Washington mantenía conversaciones indirectas con el Partido kurdo de la Unión Democrática Siria (PYD), aunque lo ha negado siempre. Como se ha revelado, EE.UU. dialogaba con la fuerza política kurda y casi a la vez trataba de capacitar a sus rivales, es decir, la milicia kurda del Consejo Nacional Kurdo (KNC, por sus siglas en inglés) y reconciliarlos con la oposición armada del Ejército Libre Sirio al Gobierno de Bashar al Assad. Aunque Washington había rechazado las peticiones del PYD de celebrar encuentros formales, EE.UU. iniciaría conversaciones indirectas con el grupo en 2012, según reconoció a ’Foreign Policy’ el exembajador de EE.UU. en Siria Robert Ford.
Según dos fuentes kurdas conocedoras de las reuniones, las conversaciones podrían incluso haber estado celebrándose desde que Ford abandonara Siria en 2011. Los encuentros se llevaron a cabo a través de la Embajada estadounidense en París, de acuerdo con las citadas fuentes. Tanto Ford como los kurdos se negaron a identificar al intermediario en estos encuentros.
Aproximadamente al mismo tiempo, Washington trató de capacitar la coalición rebelde del Consejo Nacional Kurdo, que también coopera con la oposición siria apoyada por Occidente. En mayo de 2012, una delegación del KNC liderada por su entonces presidente, Abdul Hakim Bashar, visitó Washington y se reunió con Ford, con el secretario adjunto para Asuntos de Oriente Próximo, Jeffrey Feltman, y el enviado de EE.UU. a la oposición siria, Frederic Hof.
La prioridad para los estadounidenses era introducir el KNC en la oposición siria en el exilio, entonces dirigida por el Consejo Nacional Sirio (CNS). Ford y Hof instaron al KNC a "concentrarse en superar las diferencias del grupo con el CNS y a centrarse en la eliminación [de Assad] como el objetivo más urgente", según un documento del Departamento de Estado elaborado tras una de las reuniones y obtenido por ’Foreign Policy’.
Por otra parte, Vladimir Astapkovich , en RIA Novosti informaba que el Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov opinaba que: "Es evidente que ni el Estado Islámico, ni el Frente Al Nusra ni Al Qaeda podrían hacer lo que hacen sin apoyo del exterior". Agregaba que Rusia y sus socios en el Consejo de Seguridad de la ONU busca el modo de cortar los canales de financiación de grupos terroristas como el Estado Islámico [EI], Al Qaeda y el Frente Al Nusra".
Ignacio Ramonet informaba: “El 11 de septiembre pasado –fecha más que simbólica– el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se dirigió a la nación para anunciar su nueva estrategia militar contra el Estado Islámico (EI) que, según él, representa una “amenaza para todo Oriente Medio”. Obama precisó que las fuerzas estadounidenses atacarían al EI “esté donde esté”, incluso en Siria. Esta nueva estrategia pasa por el lanzamiento de ataques aéreos “sistemáticos” contra los yihadistas y el aumento del número de especialistas militares estadounidenses enviados a Iraq para apoyar a las tropas iraquíes en cuestiones de adiestramiento militar, inteligencia y equipamiento.
Obama añadió que el ejército estadounidense no participaría en ofensivas terrestres contra el EI, y que Washington no tiene intención de luchar contra los yihadistas “a solas”. “La fuerza estadounidense –aclaró– puede marcar una diferencia decisiva, pero no podemos hacer por los iraquíes lo que ellos tienen que hacer por sí mismos, como tampoco podemos ocupar el puesto de los aliados árabes para garantizar la seguridad de su región”.
Barack Obama, que fue elegido en 2008 como crítico a la invasión de Iraq de 2003 ordenada por su predecesor George W. Bush, aseguró que no estaba enviando de nuevo tropas al terreno. Y, en un ejemplo típico de denegación freudiana (die verneinung), declaró: “Como comandante en jefe, no permitiré que Estados Unidos se vea envuelto en otra guerra en Iraq”. O sea, que ha comenzado la tercera guerra de Iraq.
La primera, más conocida como “Guerra del Golfo” (1990-1991), fue liderada por el presidente de Estados Unidos George H. Bush a la cabeza de una coalición de treinta y cuatro países que se opusieron, bajo autorización de la ONU, a la invasión de Kuwait por las fuerzas iraquíes de Sadam Husein. Terminó con la derrota de Iraq y la evacuación de Kuwait.
La segunda (2003-2010) fue desencadenada por el presidente George W. Bush (hijo del precedente) en la atmósfera de paranoia que siguió a los atentados del 11 de septiembre de 2001 y bajo el falso pretexto de que Sadam Husein poseía “armas de destrucción masiva”. La ONU no autorizó esa guerra. Las fuerzas iraquíes fueron derrotadas en pocas semanas pero nunca se consiguió la paz; Iraq se sumergió en un caos de violencia del que aún no ha salido.
Como las dos precedentes, y tras casi veinticinco años de enfrentamientos, esta nueva guerra no conseguirá su objetivo. Primero porque nunca se ha ganado una guerra únicamente con bombardeos aéreos, y segundo porque, sencillamente, los objetivos de esta guerra no están nada claros, sostenía Ramonet.
Lo cierto es que Estados Unidos y Europa armaron al Estado Islámico con el apoyo de la OTAN. La Red Voltaitre sostenía: Países del este de Europa armaron al grupo yihadista Emirato Islámico en Irak y el Levante (EIIL o Daesh, en árabe)bajo la aprobación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Así reveló el diario estadounidense The World Tribune, citando a una fuente diplomática anónima.
La fuente añadió que el EIIL (hoy conocido como Estado Islámico) pidió «misiles antitanques, RPG, equipos de telecomunicaciones y chalecos antibalas a países europeos como Bulgaria, Croacia, Rumania y Ucrania».
«Los servicios de inteligencia de la OTAN facilitaron la entrega de ese armamento afirmando que era una ayuda humanitaria a Siria», aseguró la fuente, para después subrayar que Turquía desempeñó un papel crucial en equipar a Daesh. El diplomático aseguró que el EIIL comenzó a pedir armas y equipos militares desde el principio de 2013. En este sentido, Croacia ha proporcionado lanzacohetes y vehículos blindados, mientras que Rumania tanques, Ucrania ha brindado armamento para la infantería y Bulgaria la munición, enfatizó.
Cabe señalar que las fuerzas iraquíes revelaron que los elementos del Emirato Islámico utilizan armamento israelí en sus ofensivas dentro del territorio iraquí.
Los yihadistas del Estado Islámico, que gozan del apoyo de países occidentales y regionales, perpetran diversos actos criminales tanto en Siria como en Irak, incluidas ejecuciones sumarias y secuestros masivos. Tica Font y Pere Ortega, activistas e investigadores por la paz - Miembros del Centre Delàs d’Estudis per la Pau sostienen: A mediados de agosto, en una reunión extraordinaria y de urgencia, los ministros de asuntos exteriores de la UE acordaron respaldar la entrega de armas a los peshmerga del gobierno autónomo kurdo. El acuerdo no fue unánime, algunos ministros mostraban reticencias a dicho acuerdo y otros como Reino Unido, Francia, Italia y en menor medida Alemania exigían un acuerdo y toma de posición “fuerte”. Por ello, los envíos de armamento europeos no serán centralizados por Bruselas ni requerirán un acuerdo común; cada país decidirá si suministra material militar o no a los combatientes del gobierno autónomo kurdo y deberá contar con el consentimiento del gobierno iraquí.
De momento Estados Unidos ha anunciado que la CIA será la encargada de mandar directamente armas a los peshmerga, Francia ha anunciado que ha mandado armas y Alemania acaba de anunciar que lo hará y ha pedido a los países del antiguo Pacto de Varsovia que manden municiones a los kurdos, ya que el armamento que poseen tiene origen soviético. El presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, afirmó que Irán había sido el primer país que les ha entregado armas.
Peshmerga significa “aquellos que hacen frente a la muerte” y hace referencia a los combatientes Kurdos de Irán e Irak, no a los miembros del PKK en Turquía. Los pershmerga iraquíes están compuestos por las unidades armadas del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) y la Unión Patriótica del Kurdistán, según diversas fuentes, el número de peshmergas oscila entre 100.000 y 190.000 efectivos armados. En la década de los 80 y 90 los peshmerga eran una guerrilla que reivindicaba un estado kurdo y era fuertemente combatida por Saddam Hussein por sus aspiraciones territoriales e independentistas; los perhmerga combatieron contra el ejército iraquí durante la Guerra del Golfo y la invasión occidental del 2003.
Los peshmergas no forman parte del ejército iraquí y por tanto son brigadas armadas fuera del control del gobierno del país, el cual no sufraga sus salarios ni las armas, que deben estar sufragadas con las ventas de petróleo bajo control kurdo. El hecho de que en Irak exista el ejército y otras fuerzas armadas fuera del control del Estado, representa por una parte una fuente de tensión interna relevante y por otra modernizar y armar brigadas podría modificar el equilibrio de fuerzas en la región; al mismo tiempo que es necesario evaluar las repercusiones que en un futuro puede tener, un grupo armado kurdo, sobre la reivindicación histórica de los kurdos de Irak, Irán, Siria y Turquía de tener un territorio y un Estado propio.
El motivo que se aduce para armar y formar militarmente estas brigadas, es combatir al Estado Islámico (EI), pero también hay que evaluar el impacto futuro de esta decisión, la de armar y formar militarmente a unos grupos cuyo proyecto político es el de construir un nuevo Estado, el Estado Kurdo.
En términos de legalidad, como ya se ha mencionado el destinatario de las armas no es el Estado de Irak ni sus fuerzas armadas, sino unos cuerpos regionales no controlados por el gobierno del país y por tanto no conforme a la legalidad. Por otra parte, la legislación española en el artículo 8 a) expresa que se denegarán exportaciones cuando existan indicios racionales de que las armas puedan ser empleadas en acciones que perturben la paz, la estabilidad o la seguridad en el ámbito mundial o regional o puedan exacerbar las tensiones.
En definitiva, y como siempre, los intereses políticos inmediatos se anteponen al bien común y se facilitan armas a actores no legales. En estos momentos, combatir a EI, aliándose para ello con enemigos históricos o recientes sin llevar a cabo evaluaciones sobre el impacto a largo plazo que las mismas puedan acarrear, puede ser nefasto. Recordemos que en Afganistán se apoyó a los talibanes mientras éstos luchaban contra la ex URSS, en Irak se dio apoyo a Saddam Hussein mientras era enemigo de Irán. A Bashar al Assad se le ha demonizado y combatido y ahora compartimos la lucha contra EI. En un periodo reciente hemos visto a aliados que se convierten en enemigos y enemigos que se convierten en amigos; mientras la población civil sufre las consecuencias de este juego de alianzas y reparto de poderes. Mientras tanto, las víctimas inocentes se cuentan por miles y el mundo asiste a otra guerra imperial decretada por Estados Unidos y sus amigos europeos.
Correo electrónico: tribunalpazecuador@yahoo.com
CEPRID
Artículos de esta autora o autor
es Territorios (Gal) Internacional ?