Comunicado de al-Fatah sobre los "Acuerdos
de Ginebra"
'Retorno, primero;
paz para dos naciones en un solo Estado, después'
CSCAweb,
12 de enero de 2004
BADIL, 7 de diciembre de 2003
Traducción: Beatriz Morales, CSCAweb
"Sacrificar
el Estado palestino para lograr el Derecho al Retorno [de los
refugiados] sirve a la estrategia palestina en su conjunto, mientras
que sacrificar el Derecho al Retorno para lograr un pseudo Estado
con una soberanía limitada es sacrificar los derechos
del pueblo, sus sueños y aspiraciones"
"En el nombre de Dios.
En el nombre de nuestro pueblo que lucha por la libertad, por
nuestro pueblo en Palestina y en el exilio.
Cada cierto tiempo aparecen
iniciativas y propuestas para resolver el conflicto árabe-israelí.
Ya sean israelíes o israelo-palestinas, regionales o internacionales,
estas propuestas están basadas en la premisa de que se
puede resolver el problema de los refugiados palestinos en el
marco de un futuro Estado palestino.
El hecho de que el actual régimen
palestino [1] haya abierto la puerta a semejantes iniciativas
sin tener una visión clara y acorde con las aspiraciones
de nuestro pueblo constituye un peligro de gran alcance. El actual
régimen ha alentado y participado en estas iniciativas
justificando su posición afirmando que están tratando
de lograr, con Israel y la comunidad internacional, un importante
avance.
Totalmente ajeno al daño
que está haciendo a la unidad del pueblo palestino, este
régimen incluye a quienes inician y dirigen estas iniciativas
frente a quienes las rechazan. Esta situación está
empujando al pueblo palestino a un conflicto interno que podría
llevar a una guerra civil únicamente para mantener los
intereses de la élite palestina actualmente en el poder.
Esta élite, movida solo por sus propios intereses, amenaza
la unidad y la determinación del pueblo palestino así
como el Derecho al Retorno de los refugiados palestinos, que
es el centro del problema palestino.
Consenso
nacional
Comprometidos con una posición
palestina unificada y acorde con el consenso nacional, afirmamos
lo siguiente:
Primero: Considerando que el Derecho al Retorno
es el fundamento del consenso palestino, el centro de la lucha
palestina, la justificación de la actual revolución
y el sueño de dos tercios del pueblo palestino, nos oponemos
tajantemente a todas las iniciativas, acuerdos y arreglos, ya
sean formales o informales -incluyendo, entre otros, los de Beilin-Abu
Mazen [2], Nasseibeh-Ayalon [3] y los de Ginebra
[4]- que pongan en peligro este derecho sagrado. Consideramos
que tales iniciativas y acuerdos son una línea peligrosa
que transforma el consenso nacional en un regateo en las negociaciones.
Segundo: No hacemos responsables únicamente
a quienes participan en semejantes iniciativas. También
culpamos al régimen palestino que juega con la suerte
de nuestro pueblo y contribuye al daño hecho a sus aspiraciones.
En los últimos tres meses este régimen ha estado
más ocupado en insignificantes conflictos internos acerca
de la formación del gobierno que en las preocupaciones
de nuestro pueblo y en los problemas cruciales.
El régimen, tras situar
a los individuos más corruptos en puestos de responsabilidad
en ministerios y en organizaciones civiles y de seguridad, ha
seguido perjudicando y jugando con la unidad de nuestro pueblo
y con el consenso nacional -el principal de todos, el Derecho
al Retorno- de una manera que no tiene precedentes, con el fin
de mantener la soberanía palestina sobre cualquier metro
cuadrado [del territorio palestino].
Tercero: Recordamos a aquellos que juegan con
el futuro de nuestro pueblo que un Estado palestino independiente
en los territorios ocupados en 1967 no forma parte del consenso
estratégico, sino que es sólo un programa transitorio
adoptado por la OLP en el encuentro del Consejo Nacional Palestino
de 1974. El Derecho al Retorno es el elemento clave de la Carta
Nacional Palestina y la razón principal del inicio de
la Revolución palestina. Si hubiera necesidad de adoptar
medidas tácticas, sería el Estado palestino lo
que debería ser utilizado como baza negociadora para lograr
el Derecho al Retorno. El Estado palestino ya no es una prioridad
en el interés popular del pueblo palestino. Se ha convertido
en un interés de la seguridad israelí que al tiempo
sirve a algunos individuos del actual régimen palestino
que consideran el Estado palestino como un medio para incrementar
sus propios beneficios ilegítimos. Por consiguiente, sacrificar
el Estado palestino para lograr el [Derecho al] Retorno] sirve
a la estrategia palestina en su conjunto, mientras que sacrificar
el Derecho al Retorno para lograr un pseudo Estado con una soberanía
limitada es sacrificar los derechos del pueblo, sus sueños
y aspiraciones.
Cuarto: Creemos que podemos lograr una paz
global y justa, una paz en la que ambos pueblos tengan cabida
en esta tierra en un Estado laico y democrático; una paz
que reconozca los derechos y deberes tanto de palestinos como
de israelíes; una paz que elimine las fronteras, los muros
y los controles; una paz que no se basa en el desplazamiento
y en la separación de ciudades sino una que se basa en
el retorno de los refugiados palestinos; una paz en la que cada
uno es un vencedor y no alguien que tenga que ceder; y una paz
en la que ambas partes triunfen y ninguna de ellas pierda.
Quinto: Para mantener la unidad de nuestro
pueblo, para construir instituciones palestinas democráticas
y para facilitar el derecho de cada uno a participar y contribuir
en la construcción de la sociedad civil y la formación
de la política, exigimos unas elecciones que sean democráticas
y transparentes a todos lo niveles, empezando por el Comité
Central de al-Fatah y siguiendo por los ayuntamientos, el Consejo
Legislativo Palestino, la Presidencia y el Consejo Nacional Palestino.
El propósito de estas elecciones es reorganizar el Parlamento
palestino y protegerlo de la actual corrupción administrativa,
financiera y política, así como detener el proceso
de colapso y división.
Primero,
el retorno
Basado en los conceptos arriba
mencionados y sin vacilación, empezaremos una campaña
popular en Palestina y en el exilio bajo el lema Retorno,
primero; paz para dos naciones en un [solo] Estado,
después.
Con esta consigna seremos fieles
a los sueños y ambiciones de nuestro pueblo. Seremos fieles
a la sangre de nuestros mártires. Adoptaremos un enfoque
más realista para lograr una paz global y justa, que no
imponga a nadie dolorosos acuerdos. Una solución al conflicto
que ignora los intereses de dos tercios del pueblo palestino
sólo puede ser considerada como un alto el fuego entre
dos partes.
Unificados y juntos hasta conseguir
el retorno, la liberación y la paz
Al-Fatah, Movimiento de
Liberación de Palestina
Palestina, 1 de diciembre de 2003

Notas de
CSCAweb:
1. Referencia
a la Autoridad Palestina.
2. El "Documento Beilin-Abu Mazen" fue el resultado
de las negociaciones secretas mantenidas durante 1993 y 1995
entre Yosi Beilin (entonces viceministro de Asuntos Exteriores
en el gobierno laborista de Israel) y Abu Mazen, entonces
secretario del Comité Ejecutivo de la OLP y posteriormente
nombrado primer Ministro palestino por Yaser Arafat el 29 de
abril de 2003 hasta su dimisión en octubre de 2003. Tales
negociaciones secretas -enmarcadas en la definición del
Estatuto Final tal y como lo preveía el marco del proceso
de Oslo- prefiguraban un acuerdo que legitimaba la ocupación
israelí de los Territorios Ocupados en 1967. El documento
extractado puede verse en "Documento Beilin-Abu Mazen. Marco
para la finalización de un acuerdo entre Israel y la OLP"
en Nación Árabe, núm.43, Año
XIV, 2001, p. 141. Igualmente, en la misma obra, véase:
Barrañeda, I. y Álvarez Osorio, I.: "Negociando
el acuerdo final: el Documento Beilin-Abu Mazen".
El contenido de este documento no supera lo establecido en otro
dado a conocer el 25 de enero de 1997 y conocido como "Documento
Beilin-Eitan" cuyos autores fueron el propio Yosi Beilin
junto a Michael Eitan (ex diputado del Likud) y en el que se
actualizaba el consenso histórico del sionismo entre las
dos fuerzas políticas mayoritarias de Israel. Este "Acuerdo
Nacional para las negociaciones sobre el Estatuto Final con los
palestinos", se enmarcaba en el enfoque tradicional sionista
de garantizar la seguridad estratégica de Israel
como Estado judío y, por tanto, de no reconocer el Derecho
al Retorno de los refugiados palestinos, garantizado por la resolución
194 de NNUU (1948), ni los derechos nacionales palestinos. El
documento puede verse en: "Documento Beilín-Eitan:
Acuerdo Nacional para las Negociaciones sobre el Estatuto Final
con los Palestinos', y el estatuto final de la entidad palestina"
en Nación Árabe, núm. 31/32, Primavera,
1997. Véase igualmente en CSCAweb: Azmi
Bishara: Olvidad el acuerdo final. A la espera de un nuevo equilibrio
de fuerzas
3. Ami Ayalon, ex director del Shin Bet, los servicios
de inteligencia interior de Israel, y Sari Nuseibbeh, intelectual
palestino residente en Jerusalén, antiguo rector de la
universidad palestina de al-Quds y posteriormente nombrado presidente
de la Casa Oriental de Jerusalén por la AP, firmaron el
27 de julio de 2003 una denominada "Declaración de
Principios" de 6 puntos que pretendía sentar las
bases para un acuerdo palestino-israelí. El efecto de
tal declaración fue masivamente contestado por los palestinos
del interior de los Territorios Ocupados y del exterior, muy
particularmente, por los refugiados, pues el documento renunciaba
al Derecho al Retorno al proponer que los refugiados palestinos
solo podrían regresar al "Estado palestino"
y "los judíos" [de todo el mundo] al Estado
de Israel. Previamente, Nuseibbeh había sido duramente
criticado en medios políticos, organizativos y populares
no oficiales palestinos y árabes cuando en octubre de
2001 anunció ante los medios de comunicación israelíes
e internacionales "una nueva línea de flexibilidad
por parte palestina" en los temas esenciales relativos al
conflicto palestino-israelí. Véase en CSCAweb:
Defender
los derechos nacionales palestinos y su legitimidad internacional:
Declaración pública de instituciones populares,
organizaciones y sindicatos palestinos. La Declaración de Principios
Aylon-Nuseibbeh puede verse en inglés en http://domino.un.org.
4. Véase en CSCAweb enlaces relacionados en la columna
izquierda sobre los 'Acuerdos de Ginebra' y Zouhair Andraws:
El problema que tenemos los palestinos con la izquierda sionista
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