En la reunión del pasado 20 de mayo, el Consejo de Medio Ambiente, Urbanismo y Ordenación del Territorio de Castilla y León informó favorablemente la Revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Valladolid avalada por la Consejería correspondiente de la Junta de Castilla y León. El representante de las “organizaciones no gubernamentales de carácter ambiental” presentó un Voto Particular que refrendaba el trabajo crítico realizado por Asamblea Ciclista, Asociación Cultural Ciudad Sostenible, Asociación Vallisoletana de Afectados por Antenas de Telecomunicaciones, el sindicato CGT, FACUA Consumidores en Acción, Federación de Asociaciones Vecinales “Antonio Machado” y Ecologistas en Acción.
El sentido del voto particular tiene que ver con diversos extremos del Plan que no consideramos adecuados, buena parte de ellos relacionados con el suelo urbanizable previsto y sus ubicaciones concretas. El suelo planeado para la construcción de viviendas es uno de los pilares fundamentales de cualquier Plan General. En esta época se trata de consolidar la ciudad existente y de acotar los posibles desarrollos de suelo urbanizable ya que la sostenibilidad del modelo, la evolución demográfica de la ciudad en los últimos años (en 2018 ya se ha consolidado un número de habitantes por debajo de los 300.000), la formación de nuevos hogares, y la gran cantidad de viviendas vacías, son factores que apuntan claramente en la dirección señalada.
Las previsiones recogidas en la Memoria Vinculante indican que, con las viviendas que pueden edificarse en el Suelo Urbano (8.881 viviendas) y en el Suelo Urbano No Consolidado (15.691), se podrían atender las necesidades del periodo de referencia del Plan -12 años-. No tiene ningún sentido una previsión de construcción de más de 45.000 viviendas. La alternativa propuesta es la de una reducción de los nuevos suelos urbanizables previstos en el planeamiento más acorde con los requerimientos legales vigentes. Principalmente de aquéllos situados en el espacio comprendido entre las dos rondas de circunvalación de la zona este algunos afectados por zonas inundables del Esgueva, y que, si se desarrollan, plantearán nuevas necesidades de desplazamientos, que, tal y como recoge el Anexo de Movilidad, se satisfarán, en buena medida, con desplazamientos en vehículos privados. Nos parece que se pierde una gran oportunidad para reorientar el modelo de nuestra ciudad hacia uno más sostenible, alejándonos de la senda de la Nueva Agenda Urbana Europea y de las estrategias de la agenda urbana española.
Parece igualmente necesario, desde la legalidad vigente, eliminar particularmente los suelos urbanizables que están afectados por zonas inundables. Una parte importante de ellos formaban parte del área homogénea AH-4 “Arroyo Velilla” y son actualmente suelo rústico ya que desde el pasado 19 de octubre catorce áreas homogéneas (todas las que existían en el anterior planeamiento menos la AH-5 - Talleres de Renfe) han sido automáticamente clasificadas como suelo rústico común en aplicación del punto b) de la disposición transitoria tercera de la Ley 7/2014, de 12 de septiembre, de medidas sobre rehabilitación, regeneración y renovación urbana, y sobre sostenibilidad, coordinación y simplificación en materia de urbanismo. Esta situación -previa a la aprobación del Plan- otorgaba una gran oportunidad para la reducción sustancial del suelo urbanizables.
Igualmente, la política de vivienda prevista en el Plan no está a la altura de las posibilidades y necesidades que tiene la ciudad, especialmente en el interés por lograr el uso de la gran cantidad de viviendas vacías existentes y en la satisfacción las necesidades de vivienda en alquiler a precios razonables.
En el voto particular también se hizo mención a que «En el Estudio Ambiental Estratégico se ha incluido un apartado X, denominado Evaluación de Impacto en Salud que no es satisfactorio ya que no se ha hecho realmente una evaluación completa del impacto en la salud de la proliferación de las infraestructuras de radiocomunicación. Entendemos que, dada la gravedad del problema de las inmisiones electromagnéticas provenientes de infraestructuras de telecomunicaciones en los edificios, se debe realizar una evaluación muy completa sobre este tema, que además deberá hacerse no solo con carácter previo a la aprobación de la revisión del planeamiento, sino también a lo largo de la ejecución del mismo.»
- Asamblea Ciclista de Valladolid
- Asociación Cultural Ciudad Sostenible
- Asociación Vallisoletana de Afectados por las Antenas de Telecomunicaciones
- CGT Valladolid
- Ecologistas en Acción de Valladolid
- FACUA Asociación de Consumidores y Usuarios en Acción de Castilla y León
- Federación de Asociaciones Vecinales de Valladolid