Martes 1ro de octubre de 2019
Agencia Atlas Público
La policía nigeriana ha detenido a dos miembros de una red de trata de recién nacidos. Engañadas, las llevaban hasta sus instalaciones desde todas partes del país. Adolescentes de zonas rurales que pensaban que iban a la ciudad para desempeñar tareas domésticas, pero una vez allí se encontraban en una auténtica fábrica de bebés. A las que no iban embarazadas las obligaban a hacerlo, para después vender a los recién nacidos. "Me pusieron una medicina y el parto empezó, cuando estaba embarazada de siete meses", explica una joven. Tardó tres días en dar a luz. El bebé murió. Otra chica cuenta que la amenazaron: o entregaba a su hijo o habría contraido una deuda que jamás podría pagar. En la operación han sido liberadas 19 mujeres y cuatro niños. La más mayor de las víctimas tiene 28 años, pero la mayoría ronda los 15. La policía ha detenido a dos personas y busca a una tercera. Vendían a los niños por unos 1.500 euros, a las niñas por poco más de la mitad.