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Revista de prensa

Valladolid reutiliza, recicla o transforma en energía la mayoría de los neumáticos fuera de uso

Jueves 5 de junio de 2003

Las medidas de control impuestas por el Gobierno regional sitúan a Castilla y León a la cabeza nacional en la correcta gestión de estos residuos. Medio Ambiente controla el destino de cinco de cada seis neumáticos retirados por su desgaste de los vehículos.

Cinco de cada seis neumáticos que quedan fuera de uso al año se recuperan, bien para su recauchutado, para su reciclaje o para transformarse en energía. La gestión de este tipo de residuos, a mitad de camino entre lo industrial y lo peligroso, sitúa a Castilla y León a la cabeza de España en cuanto al cumplimiento de la Directiva Europea. La Consejería de Medio Ambiente asegura que aún existe un pequeño margen para recoger más desechos de este tipo y aprovecharlos, aunque en 2002 se rozó el tope con la recuperación de unas 25.000 toneladas en toda la comunidad autónoma.

Valladolid, junto a León y Burgos, es la provincia de la región que más neumáticos usados genera al año. Aunque no existen datos provinciales, la cantidad de residuos producidos no conlleva un desaprovechamiento de las materias primas, tanto del acero como de la goma y las fibras textiles. Alrededor del 80% se gestiona según dicta la normativa.

El éxito tiene dos protagonistas. Por un lado, el aumento de los controles ejercidos por la Junta de Castilla y León. Una de sus últimas actuaciones tuvo lugar en marzo de este año, cuando se prohibió la entrada de neumáticos fuera de uso al vertedero de la provincia. De este modo, se fomenta su recuperación y se evita el almacenamiento de estos desechos, que no dejan de ser un foco de contaminación con el paso de los años. Hasta ahora, el periodo de ’stock’ se ha situado en un máximo de dos años.

Mayor conciencia

Según la empresa Albar, uno de los gestores autorizados de recogida y recuperación, la medida no ha incidido, de momento, en un incremento del apilamiento incontrolado y la aparición de nuevos puntos de vertido. Por otro lado, la propia gestora afirma que existe una mayor sensibilización por parte de las industrias de cara a recuperar estos residuos.

Actualmente, se puede afirmar que la práctica totalidad de talleres y centros comerciales, principales puntos de recogida de neumáticos, colabora en su adecuada gestión. En este sentido, se ha avanzado más lento que en la recuperación de aceites usados, afirma el jefe del servicio de Protección Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente, Jaime Fernández Orcajo. Mientras que en el caso de los lubricantes es gratis, lo que ha favorecido su posterior reutilización, con los neumáticos aún se paga por rueda cincuenta céntimos, de ahí que al usuario este trámite incremente aproximadamente un euro el cambio de neumáticos.

Uno de los problemas observados por la empresa en su labor de transporte se sitúa en los puntos limpios, donde, a pesar de figurar información sobre gestores de neumáticos, no representan un depósito significativo.

30.000 toneladas

La falta de un censo provincial sobre recogida de neumáticos usados hace que las estimaciones se hagan sobre el territorio regional. En este sentido, el servicio de Calidad Ambiental calcula que, en Castilla y León, se generan al año cerca de 30.000 toneladas de neumáticos, de los que cerca de un tercio son recauchutables y, por lo tanto, se reutilizan. El resto son residuos. Aproximadamente, la mitad se recicla; mientras que un pequeño porcentaje se valoriza, lo que supone su tratamiento y transformación en energía, dado su alto potencial calorífico.

Según los datos recopilados por la Consejería de Medio Ambiente, cerca del 5% de los neumáticos generados a lo largo de 2002, se gestionaron mal, por lo que fueron abandonados y almacenados en vertederos incontrolados o no se recuperaron para su tratamiento y reciclaje.

Primero, reutilizar

El Real Decreto sobre vehículos al final de su vida útil fuera de uso garantiza la gestión ambiental de los elementos y componentes extraídos del automóvil. Así, se cumplen los objetivos, por este orden, de reutilización, reciclaje y valorización establecidos por la Unión Europea. Es decir, que cualquier neumático que pueda ser reempleado, se recauchuta. En caso de no ser posible esta opción, pasa a ser residuo y a tratarse para su reciclaje. Por último, si no se regenera, se transforma en energía. Esta posibilidad se topa con la oposición de los ecologistas, que ven un peligro para la población y el medio ambiente la incineración.

El reciclaje acapara la mayor parte de las recuperaciones, sobre todo cuando se habla de neumáticos procedentes de turismos. En su caso, entre el 10% y el 15% se recauchuta, mientras que se recicla más de la mitad de los generados al año. Con los camiones, estos porcentajes dan la vuelta y siete de cada diez ruedas se reutilizan.

En cuanto a los sistemas de tratamiento, el más rentable y paso previo de la recuperación, es la trituración mecánica. Otros métodos son la incineración, con la ventaja de producir energía en la combustión, y la termólisis, que logra la recuperación total de los componentes del neumático.

Mercado floreciente

Fernández Orcajo califica de «floreciente» este mercado. Los gestores «se dan de tortas» por conseguir neumáticos. Buena parte de culpa la tienen los múltiples usos que se han descubierto, como la construcción de carreteras, así como en la fabricación de cubiertas, tejados y aislantes. También se emplea como componente de pistas deportivas o en bandas de retención y protección.

El almacenamiento histórico, como lo definen los especialistas, es el caballo de batalla, ya que permanece casi invariable desde hace años. La Junta estima que existen cerca de 15.000 toneladas en la región.

Teinco descarta instalar en La Mudarra el proyecto de su planta incineradora C. B./VALLADOLID

Demasiadas negativas, culminadas con el rechazo del Pleno del Ayuntamiento de La Mudarra, han hecho desistir definitivamente a la empresa vallisoletana Teinco de instalar en esta localidad una planta piloto para incinerar neumáticos.

Eduardo Pérez Lebreño, gestor de Teinco, señala que la presión ejercida por los grupos ecologistas ha sido fundamental, ya que «les han comido la cabeza» para que el proyecto no se llevase a cabo en La Mudarra.

Ecologistas en Acción denunció que el problema que planteaba la experiencia piloto pretendida por Teinco era la emisión al aire de contaminantes tóxicos y cancerígenos. Pérez alude que este es el argumento esgrimido siempre por los ecologistas, que impiden el desarrollo de iniciativas rentables, que generan riqueza y empleo.

En diciembre del pasado año empresa y alcalde habían alcanzado un acuerdo para construir la incineradora de neumáticos en terreno municipal. Hace doce días, el Pleno del Consistorio rechazó la propuesta. Sin embargo, la promotora tenía esperanzas de que, tras las elecciones, se produjera un cambio de rumbo para retomar las negociaciones. Ahora, estudian nuevas localizaciones, aunque no ven claro que salga adelante el proyecto, del que, por otro lado, la Junta no sabe nada.

La incineradora emplearía un proceso de doble combustión. Una primera produciría energía en forma de calor, mientras que en la segunda se recuperaría el vapor de agua para generar energía eléctrica. Pérez asegura que las emisiones contaminantes estarían por debajo de las máximas permitidas y que los filtros adecuarían la planta a la norma europea.

CÉSAR BLANCO/VALLADOLID