Las instalaciones de CETRANSA recibieron 84.723 toneladas de residuos industriales en el 2003

Durante el año 2003 llegaron a las instalaciones que la empresa Cetransa gestiona en la localidad de Santovenia de Pisuerga 84.723 toneladas de residuos industriales, una cifra que supone el 25% más que los residuos gestionados en el 2002.

Unas 38.000 toneladas (45%) pasaron por la planta de tratamiento físico-químico, para minimizar los niveles de peligrosidad y reducir su volumen.

Unas 37.000 toneladas (44%) fueron depositadas en el vertedero de seguridad, y unas 9.000 (11%), fueron sometidas a procesos de revalorización y reutilización en el ciclo industrial, según los datos de la memoria de actividades medioambientales del ejercicio pasado.

El 89%de los residuos gestionados por Cetransa fueron tratados en sus propias instalaciones -las únicas de este tipo con que cuenta Castilla y León, y que fueron declaradas de Singular Interés para la región por la Junta en julio del 2002- y el 11% restante fue transferido a centros de recuperación de otras comunidades autónomas y países de la Unión Europea, como Holanda y el Reino Unido.

Los responsables de Cetransa subrayan que, de todos los residuos que pasan por sus instalaciones, menos de la mitad van a parar al vertedero.

Mejora la gestión

Su director gerente, Aitor Jáuregui, señala que «aunque ha aumentado el total de toneladas recibidas, se ha reducido el número de vertidos tratados en el depósito de seguridad casi en 3.000 toneladas, lo que quiere decir que la industria regional está mejorando significativamente su gestión medioambiental y genera menos residuos Industriales. Esto es una gran noticia para todos».

«En los próximos años -añade Jáuregui- esta tendencia será más pronunciada, y todos veremos una reducción sustancial en el volumen de residuos que genera la industria».

La tasa media anual de residuos se incrementa en torno a un 25%. Cada sesenta minutos recibe aproximadamente diez toneladas para su correcta gestión medioambiental.

Los residuos gestionados proceden del sector del automóvil (25%), construcción (25%), industria metalurgia (11%), industria química (5%), y otros sectores (25%).

Cetransa presta servicio a más de 9.000 empresas y administraciones públicas de Castilla y León, y en sus instalaciones se gestionan los recursos sobrantes del ciclo industrial del 90% de las grandes y medianas industrias de la comunidad.

Desde que en 1993 entraron en funcionamiento estas instalaciones -un laboratorio de análisis y Caracterización, un centro de transferencia, una planta físico-química, un depósito de seguridad, y una planta de tratamiento de aceites usados-, han recibido 381.913 toneladas de residuos, de las que 76.383 (20%) fueron recuperadas o reutilizadas, y el resto sometidas a tratamiento físico-químico.

«Estas instalaciones -subraya Jáuregui- están equipadas con los más avanzados procesos tecnológicos y, como gestor autorizado de residuos industriales, es controlada regularmente por la Junta de Castilla y León».

«Por su parte, Cetransa y los productores de residuos -añade- están obligados a declarar la cantidad de residuos que reciben y que generan respectivamente a la Consejería de Medio Ambiente».

El vertedero tiene una capacidad de almacenamiento de unos 880.000 metros cúbicos de residuos finales, es decir, aquellos que ya han sido tratados y acondicionados, y tiene unos veinte años más de vida útil.

La empresa asegura que la impermeabilización del vertedero «está finalizada»

«El vertedero de Santovenia de Pisuerga es totalmente seguro y la impermeabilización es absoluta», según Aitor Jáuregui director gerente de Cetransa.

Jáuregui señala que las obras de una pantalla subterránea de impermeabilización del vaso del vertedero que recomendó instalar el Cedex (Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas, un organismo autónomo adscrito a los Ministerios de Fomento y de Medio Ambiente) para evitar cualquier filtración aguas abajo del Vertedero, «finalizaron en enero de este año».

Esta pantalla, de profundidad variable y que alcanza los quince metros en el punto central, construida en cemento-bentonita, ha costado cerca de sesenta mil euros.

Asimismo, aprovechando estas obras, la balsa de lixiviados ha sido sustituida por unos tanques especiales para su almacenamiento.

Máxima seguridad

En conjunto, todas las obras de mejora recomendadas por el Cedex en el año 2002 «para garantizar la seguridad del vertedero al cien por cien incluso en las hipótesis más desfavorables» y que han sido ejecutadas en su totalidad,
han supuesto una inversión de unos 2,1 millones de euros, según Cetransa.