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«La invasión invisible del campo, publicación de»etc Group"

El impacto de las tecnologías nanoscópicas en la alimentación y la agricultura

Miércoles 6 de abril de 2005

Resumen

Asunto:

La nanotecnología, la manipulación de la materia en la escala de los átomos y las moléculas (un nanómetro [nm] es la millonésima parte de un milímetro), converge rápidamente con la biotecnología y las tecnologías de la información para cambiar radicalmente los sistemas de alimentación y agricultura. En los próximos veinte años, los impactos de la convergencia nano escalar en el quehacer de los agricultores y la producción de alimentos excederán los de la mecanización del agro o los de la Revolución Verde. Las tecnologías convergentes podrían revigorizar las golpeadas industrias agro químicas y agro biotecnológicas, avivando un debate muy intenso -esta vez en torno a alimentos «atómicamente modificados». Ningún gobierno ha desarrollado un régimen regulatorio que afronte los aspectos relativos a la nano escala o los impactos sociales de lo pequeño invisible. Ya están disponibles comercialmente unos cuantos productos que contienen aditivos nano escalares, invisibles, sin etiquetar y sin regulación alguna. También existen en el mercado algunos plaguicidas formulados a nivel nanométrico que ya fueron liberados al ambiente.

Impacto:

Del suelo a la cena, la nanotecnología no sólo cambiará la forma de operar de cada paso de la cadena alimentaria, sino quién estará involucrado. Está en juego el mercado de alimentos al menudeo cuyo monto mundial es de 3 billones de dólares, un mercado de exportaciones agrícolas valuado en 544 mil millones de dólares, y la forma de vida de unos 2 600 millones de personas dedicadas a la agricultura, por no hablar del bienestar del resto de nosotros, que dependemos de los agricultores para el pan nuestro de cada día. [1] La nanotecnología tiene profundas implicaciones para los agricultores (los pescadores y los pastores) y para la soberanía alimentaria a nivel mundial. La agricultura puede resultar ahora un campo de prueba para tecnologías que podrían adaptarse para servir en la vigilancia, el control social y la guerra biológica.

Políticas:

El debate en torno a los alimentos genéticamente modificados no pudo responder a las preocupaciones por la salud y el ambiente que generan, y evadió flagrantemente la discusión de los aspectos relativos a la propiedad y el control. Cómo saldrá afectada la sociedad y quién se beneficia con esto son los puntos cruciales. Dado que la nanotecnología implica toda la materia, las patentes relativas a lo nanométrico pueden tener impactos profundos en todo el sistema alimentario y en todos los sectores de la economía. La biología sintética y los materiales nanométricos transformarán de manera dramática la demanda de insumos agrícolas requeridos por los procesadores. Los productos nanométricos llegaron al mercado -y muchos más están en camino- en ausencia de regulaciones o debate social alguno. La fusión de la nanotecnología con la biotecnología tiene consecuencias desconocidas para la salud, la biodiversidad y el ambiente. Los gobiernos y los formadores de opinión van ocho o diez años atrás de la necesidad social de información, debate público y diseño de políticas.

Recomendaciones:

Al permitir que los productos de la nanotecnología lleguen al mercado sin que haya habido un debate público y una supervisión regulatoria, los gobiernos, las agroempresas y las instituciones científicas ya pusieron en peligro los beneficios potenciales de las tecnologías nanoscópicas.
Primero, y sobre todo, la sociedad -incluidos los agricultores, las organizaciones de la sociedad civil y los movimientos sociales- deben emprender un amplio debate en torno a la nanotecnología y sus múltiples implicaciones económicas, ambientales y de salud. En aras del principio precautorio, todos los alimentos, las bebidas (incluidos los suplementos nutricionales), los forrajes y piensos que incorporen nano partículas manufacturadas, deberán retirarse de los anaqueles, y se debe prohibir que se comercialicen nuevos productos hasta el momento en que existan y operen los protocolos de laboratorio y los regímenes regulatorios que tomen en cuenta las características especiales de estos materiales, y se demuestre que son inofensivos.

De igual manera, debe prohibirse que se liberen al ambiente las formulaciones nanométricas de insumos agrícolas tales como fertilizantes y tratamientos para suelos hasta que un nuevo marco regulatorio diseñado específicamente para examinar estos productos determine su seguridad.
Los gobiernos deben declarar también una moratoria a la experimentación en laboratorio con materiales procedentes de la «biología sintética» -y su liberación al ambiente- hasta que la sociedad pueda comprometerse a un análisis profundo de sus alcances ambientales, socio económicos y de salud. Cualquier esfuerzo que los gobiernos o la industria emprendan por confinar las discusiones a reuniones de expertos o por debatir únicamente en torno a los aspectos de seguridad o salud de las tecnologías nanoscópicas, será un error. Deben ponerse a discusión los más amplios aspectos sociales y éticos también.

A nivel intergubernamental, los actuales comités y comisiones de agricultura, pesquería, forestería y recursos genéticos de la Organización de Alimentación y Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) deberían supervisar y debatir las nuevas tecnologías, con propuestas y retroalimentación de organizaciones de campesinos y pequeños productores. El comité de problemas relativos a los bienes de consumo de FAO (Committee on Commodity Problems) debería, de inmediato, comenzar a examinar las implicaciones socio económicas que entrañan para los agricultores, la seguridad alimentaria y los gobiernos nacionales. El comité de seguridad alimentaria mundial de FAO/Naciones Unidas (Committee on World Food Security) debería discutir las implicaciones de un posible agro terrorismo y la soberanía alimentaria. Adicionalmente, el Convenio de Diversidad Biológica de Naciones Unidas debe revisar el impacto potencial de la nano biotecnología, especialmente en la bio seguridad. Otras agencias de Naciones Unidas, como la conferencia de Naciones Unidas en comercio y desarrollo (United Nations Conference on Trade and Development, UNCTAD, por sus siglas en inglés) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) deben unirse con la FAO para examinar el impacto de la nanotecnología sobre la propiedad y el control del abasto mundial de alimentos, los bienes de consumo y el trabajo. La comunidad internacional debe establecer un cuerpo dedicado a rastrear, evaluar y supervisar las nuevas tecnologías y sus productos mediante una convención internacional para la evaluación de nuevas tecnologías (ICENT, por sus siglas en inglés).

[1] IGD calcula que el mercado mundial de alimentos al menudeo es del orden de los 2.8 billones de dólares. Las estadísticas de la población total implicada en la agricultura y de las exportaciones agrícolas provienen de Jerry Buckland, Ploughing Up the Farm, Zed Books, 2004, p. 18 y p. 100


Fuente: etcGROUP:
http://www.etcgroup.org/article.asp?newsid=495