Una menor es obligada entre lloros a ir con su padre, acusado de abusar de ella

Varios informes confirman agresiones y abusos a esta niña de 8 años por parte de su padre, pero los tribunales mantienen el régimen de visitas. La madre, cansada de que no se tengan en cuenta sus peticiones, pide justicia para su hija.

Imagen de archivo. / EFE

madrid 26/02/2019 Público

Una mujer decidió zanjar la relación con el que durante siete años fue su pareja. Tras un largo proceso judicial, la resolución de las denuncias presentadas por la mujer se saldó con una condena por malos tratos a su expareja. Sin embargo, lo que parecía un punto y final se ha convertido en unos continuos puntos suspensivos. Ahora la víctima es la hija que ambos tienen en común.

Todo empezó el pasado mes de julio cuando la madre acude a recoger a su hija a la vivienda de su expareja, donde la pequeña había pasado 15 días. La niña, tal y como informa La Cadena Ser, le dice a su madre que necesita "hacer pipí" pero que no quiere ir al baño "porque le escuece". "Pensé que habría cogido una infección de orina. Bajamos al centro de salud y allí le cuenta a la doctora que su padre le mete los dedos en la vagina hasta un hueso que tenemos cuando la baña con jabón", explica la madre. "La doctora, horrorizada, nos remitió a Urgencias del hospital infantil. El forense nos dice que en ese momento no lleva nada, pero no significa que no lo haya llevado. Si la niña lo refiere es que lo ha tenido", sentencia.​

La versión de la pequeña siempre es la misma

"En ese momento se rescindieron las visitas, pero al poco tiempo se volvieron a conceder a pesar de las pruebas". "A la psicóloga del IAM le dijo muy claramente lo que le hacía su padre, que le tenía muchísimo miedo y que no quería ir con él. A la policía, cada vez que toca, la niña refiere todos los malos tratos que le propina su padre. La niña en el juzgado también lo ha dicho. Hay un vídeo en el que el padre se la está intentando llevar a la fuerza del colegio. La lleva como un saco. Y de ese vídeo y de esa agresión hay lesiones que fueron vistas por un forense", explica la madre, que asegura que la versión de la pequeña siempre es la misma. La pequeña se niega a ir con su padre entre lloros y crisis de ansiedad, pero para la justicia no parece haber pruebas suficientes para evitar la visita de su padre

"A la niña la ha asustado y le ha dicho: ¿cómo puedes decir que te he violado? Eres tan mala como tu madre. Tienes que dejar de decir eso porque a mí me van a meter en la cárcel". "Eso me lo ha contado la niña, que repite que no miente. Y la niña, se lo preguntes cuando se lo preguntes, no cambia la versión. Es muy pequeña para inventarse algo tan enorme", afirma.

Como relata Radio Zaragoza, La pequeña se niega a ir con su padre entre lloros, pataletas y crisis de ansiedad, pero para la justicia no parece haber pruebas suficientes para evitar la visita de su padre, condenado por violencia de género. Ni siquiera son suficientes los informes de los profesionales o las declaraciones ante la policía, denuncia la madre a Radio Zaragoza.

La última vez que un médico forense examino a la niña fue en el año 2016, desde entonces, dice la madre, nada ha ido a mejor. Ahora, pide justicia para su hija: Que no obliguen a los niños a ir con los maltratadores, porque cuando un hombre es un maltratador nunca será un buen padre", sentencia la madre. "Yo pido que se vean las pruebas, que se vean los vídeos, que escuchen bien a los testigos, que no se generalicen los casos, que se humanicen. somos personas con hijos que están sufriendo sobremanera. Y no lo ven".