Domingo, 29 de septiembre
12:00 h, Antón Martín-Sol
Manifestación
unitaria
en Madrid
(Iniciativa
internacional contra la guerra)
Paremos la guerra contra Iraq
antes de que empiece
Contra el apoyo del Estado español a la guerra
Bases fuera
Rueda de
prensa
Miércoles,
25 de septiembre de 2002 a las 12:00 h
Club Internacional de la Prensa (Montesquinza 41, 1ºD)
Manifiesto
de la convocatoria
Paremos la guerra contra
Iraq antes de que empiece
Tras la intervención en Afganistán, el próximo
escenario de la denominada "guerra global contra el terrorismo"
de la Administración Bush será Iraq. Inmediatamente
después de los sucesos del 11 de septiembre de 2001, EEUU
puso en marcha los preparativos militares y mediáticos
para desencadenar contra Iraq una guerra de grandes dimensiones
que conduzca finalmente a la invasión y ocupación
del país y al cambio de su régimen político.
Si bien el objetivo de imponer militarmente un cambio de régimen
en Iraq fue ya formulado explícitamente por la anterior
Administración Clinton, el presidente Bush ha encontrado
en los sucesos del 11 de septiembre de 2001 la justificación
para proceder al asalto final de Iraq. Tras haber intentado sin
éxito implicar a Iraq en los atentados de Washington y
Nueva York, y después en los envíos de cartas con
ántrax, la Administración Bush considera ahora
que no es necesario hallar una conexión entre estos sucesos
e Iraq para justificar el ataque contra este país. En
la actualidad, la Administración Bush afirma incluso que
ni tan siquiera un eventual retorno a Iraq de los inspectores
de desarme de Naciones Unidas sería determinante para
evitar la intervención, al tiempo que sabotea toda iniciativa
negociadora en este tema, como ha quedado nuevamente de manifiesto
tras la aceptación incondicional por parte de Iraq del
retorno de los inspectores.
El objetivo de esta nueva guerra en Oriente Medio, de inimaginables
consecuencias y para la que ya se ha iniciado la cuenta atrás,
no es instaurar la democracia en Iraq ni proteger a sus minorías,
como tampoco lo es preservar la seguridad regional o internacional.
EEUU y Gran Bretaña no han podido aportar evidencia alguna
de que Iraq esté fabricando o disponga de armas de destrucción
masiva, el principal argumento de la Casa Blanca para justificar
este asalto final contra Iraq. La amenaza de esta nueva guerra
y la desinformación ocultan que Iraq es hoy un país
devastado por más de una década de sanciones económicas
y agresiones militares continuadas: según datos de Naciones
Unidas, en estos 12 años más de un millón
de personas -de ellas, 800.000 menores de 5 años- han
muerto a causa del embargo. Como reiteran expertos, funcionarios
de Naciones Unidas e incluso miembros de anteriores Administraciones
estadounidense y gobiernos británicos, Iraq no es una
amenaza y ha cumplido sustancialmente las obligaciones que le
fueron impuestas tras la Guerra del Golfo.
El objetivo de esta nueva guerra es someter definitivamente
a Iraq tras 12 años de sanciones genocidas y, con ello,
afianzar el control completo -político, económico
y militar- del conjunto de la región, zona de dependencia
energética de EEUU y sus aliados occidentales: tras Arabia
Saudí, Iraq alberga las segundas reservas petrolíferas
del planeta. No es casual que la previsión de una nueva
guerra contra Iraq esté siendo precedida de la brutal
escalada militar del gobierno Sharon contra el pueblo palestino,
igualmente justificada como "lucha contra el terrorismo".
Lo que se prefigura tras los sucesos en Palestina y la amenaza
de ocupación de Iraq es la devolución manu militari
del conjunto de la región árabe al más viejo
orden colonial, cimentado en la supremacía estratégica
de Israel y el sostenimiento en el poder de regímenes
árabes encargados de gestionar el mercado petrolífero
internacional y reprimir a sus pueblos.
EEUU pretende imponernos la lógica de que esta nueva
guerra es inevitable. Pero nada puede justificarla, ni nada puede
legitimarla, tampoco una votación en el Consejo de Seguridad,
un organismo al que EEUU ha manipulado a su antojo durante esta
década desbaratando con acciones militares unilaterales
toda iniciativa de solución negociada de la cuestión
iraquí. Pese a ello, a sabiendas de que la Administración
Bush miente y de que la guerra solo sirve a los intereses hegemónicos
de EEUU, aprovechando mezquinamente en beneficio propio la doctrina
antiterrorista surgida tras el 11 de septiembre, el gobierno
español ya ha anunciado que apoyará en cualquier
caso la intervención militar contra Iraq. El presidente
Aznar cederá a EEUU el uso de las bases conjuntas en suelo
español, que le son imprescindibles para perpetrar este
nuevo crimen contra el pueblo iraquí. Siendo como somos
mayoría quienes en el Estado español nos oponemos
a la guerra, el reto que nos compromete de manera urgente es
pararla esta vez antes de que empiece. La movilización
es el primer paso.
Resumen
de acuerdos de la reunión celebrada el 13 de septiembre
de 2002, convocada por la 'Asamblea de Colectivos contra la Europa
del Capital y la Guerra', para debatir la propuesta de manifestación
contra la guerra sobre Iraq
Asistentes: Asamblea de Colectivos
contra la Europa del Capital y la Guerra, Federación de
Pensionistas y Jubilados de CCOO, Plataforma Anti-Incineradora
de Rivas-Vaciamadrid, CSCA, Izquierda Castellana, MPDL, RCADE,
Liberación, CGT, CGT-Telecinco, IU, CAES
Convocatoria: Se
comparte la iniciativa de convocar el próximo 28 de septiembre
una manifestación lo más unitaria posible, como
primera respuesta a la amenaza de agresión militar del
capitalismo global que se concreta a corto plazo sobre Iraq,
bajo los siguientes lemas: Paremos la guerra contra Iraq antes de que
empiece; Contra el apoyo del Estado español a la guerra;
Bases fuera. Se acuerda
difundir esta iniciativa tanto a través del manifiesto
y del cartel como por todos los
medios posibles, incluyendo las redes de contrainformación
del Movimiento Antiglobalización. También habrá
una posible colaboración de intelectuales pertenecientes
a una iniciativa en curso contra el imperialismo y la guerra.
La firma de la convocatoria está abierta a cuantas organizaciones,
colectivos, plataformas y redes deseen suscribirla y, una vez
cerrado el plazo de adhesión (ver más abajo), su
firma será insertada en el cartel
de convocatoria.
Manifiesto: Se aprueba del manifiesto
propuesto por CSCA (publicado en esta misma página).
Financiación:
se acuerda el siguiente
sistema: organizaciones pequeñas: 12 euros; medianas:
30 euros; grandes: 60 euros.
Adhesiones:
Los colectivos que
no participan en la asamblea contra la "Europa del capital
y la guerra" y que no han participado en esta reunión,
pueden adherirse a la campaña dirigiéndose a la
dirección de correo electrónico: csca@nodo50.org
o llamando por teléfono al 915317599 (CSCA),
indicando su firma, el número
de carteles que se solicitan y su compromiso y forma de satisfacer
la cuota establecida.
Plazo límite
de adhesiones: miércoles
18 de septiembre de 2002 a las 14:00 horas.
Comisión
de trabajo: El viernes
20 de septiembre a las 17:30 h se reunirá la comisión
de trabajo, que resolverá los problemas pendientes de
la campaña, en los locales sindicales de RENFE de Madrid:
Av. Ciudad de Barcelona 10, 2º Sótano. En esa misma
fecha estará disponible la propaganda (salvo fuerza mayor).
Madrid, 13 de septiembre de
2002
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