Valencia: Se entrega tras matar a su novia de una cuchillada en el corazón

25 Febrero 2011

Dos crímenes machistas en Valencia y Reus en un solo día

Valencia: El asesino confeso, de 73 años, compró un cupón de la ONCE tras asesinar a su pareja, de 32 años

TERESA DOMÍNGUEZ VALENCIA

Fte. Levante.emv

Una mujer boliviana de 32 años se convirtió ayer en la primera víctima mortal de la violencia machista en la Comunitat Valenciana después de que su compañero sentimental la matara de una cuchillada en el corazón en el piso donde vivían, en el barrio valenciano de Tendetes. La mujer jamás le había denunciado, por lo que no había orden de protección ni alerta alguna de que estuviese siendo víctima de una situación de maltrato. No fue el único crimen machista del día: en Reus, una española de 44 años moría de la misma manera a manos, presuntamente, de su novio, de 34.

El crimen de Valencia fue descubierto pasadas las diez y cuarto de la mañana de ayer, cuando el asesino confeso, Luis D. B., paró un coche patrulla del Cuerpo Nacional de Policía cerca de la avenida de Burjassot y le comunicó que había matado a su compañera sentimental. Antes, había comprado un cupón de la ONCE, como hacía habitualmente, que los agentes le intervinieron tras detenerlo.

Al parecer, según los vecinos, el primero a quien habría confesado el homicidio habría sido precisamente al vendedor de la ONCE en el momento en que le pagaba el importe del billete de lotería, que ahora figura entre las pruebas recogidas por la policía y unidas al atestado que le será entregado hoy al juez número uno de Violencia sobre la Mujer de Valencia.

Los vecinos escucharon fuertes golpes y una discusión elevada de tono entre la una y media y las dos de la madrugada de ayer. La pareja residía en la vivienda que ocupa la puerta 31, en el sexto piso del número 6 de la calle Gregorio Gea.

Varios vecinos del rellano y de los pisos superiores escucharon «hablar alto», pero ninguno oyó gritos. Eso sí, los más próximos al piso que compartía la pareja se despertaron «primero por la discusión, que ocurrió en la cocina, y luego por los golpes en la pared del salón y en el pasillo». Fue precisamente en el largo corredor de la vivienda donde los agentes del coche patrulla encontrarían el cuerpo sin vida de la víctima cuando entraron en la casa en compañía del asesino confeso. Según los resultados preliminares de la autopsia, murió de una única cuchillada que le alcanzó el corazón.

Anoche no había trascendido si la agresión ocurrió de madrugada y el asesino confeso durmió en la casa pese a la presencia del cadáver, o si bien la atacó por la mañana. «Desde luego, la luz de la cocina estuvo toda la noche encendida», describe una vecina de la finca.

Los policías esposaron al presunto asesino y avisaron a emergencias médicas, pero el médico del SAMU que acudió al lugar ya sólo pudo certificar la muerte. En los minutos siguientes, el piso fue tomado por agentes del grupo de Homicidios y de la Brigada de Policía Científica, que se entrevistaron con los vecinos y recogieron todos los vestigios en la escena del crimen, respectivamente. Entre otros elementos de prueba, los investigadores se llevaron el cuchillo de cocina supuestamente utilizado en la agresión mortal.

Aunque la mujer no había presentado denuncia por maltrato, los vecinos afirman que las discusiones entre ellos «eran frecuentes, pero dentro de casa. En la calle, jamás». Luis D. B., que lleva en España más de treinta años y desempeñó, entre otros oficios, el de camarero, alquiló la vivienda donde ocurrió el crimen hace unos ocho años. Desde entonces, siempre ha vivido solo, aunque solía subarrendar habitaciones a otras personas, preferentemente inmigrantes.

La víctima entró a vivir en la casa hace un par de años, aunque no está claro si ya eran pareja o ésta se formó en los meses siguientes. La mujer, cuya identidad no había trascendido anoche, se fue «hace medio año y todo ese tiempo ha estado ausente de la vivienda», explica una vecina. Sin embargo, regresó «hace un par de semanas» y, al parecer, retomó la relación con Luis, un hombre a quienes sus vecinos califican de «seco, antipático y arisco».

La mujer, según algunas fuentes, trabajaba en el servicio doméstico, aunque una vecina matizó que «solía pasar mucho tiempo en casa, con él, por lo que no parecía que tuviese un trabajo».

Un maltratador con una orden de alejamiento mata a su mujer en Reus La violencia machista se cobró ayer dos vidas. Además de la mujer asesinada en Valencia, otro crimen tiñó de negro las calles de Reus. La víctima, Montse M., de 44 años, murió a manos de su marido en el domicilio familiar. Fue su hija, de apenas cinco años, quien encontró el cadáver y alertó del asesinato tras acudir al colegio muerta de miedo buscando ayuda. Los Mossos d´Esquadra buscaban al cierre de esta edición al compañero sentimental de Montse M. como presunto autor del crimen, según apuntaron fuentes cercanas al caso. Según estas fuentes, fue la propia hija de la pareja, de cinco años de edad, la que avisó de la muerte de su madre, quien recibió una puñalada en la espalda. La pequeña fue corriendo al colegio, el cual queda bastante distante de su domicilio, para alertar de lo ocurrido tras hallar el cuerpo sin vida de su madre. El principal sospechoso del crimen es un hombre, de origen sudamericano y 34 años, con una condena previa por malos tratos a la víctima en 2006 y otra en 2010 por incumplir una orden de alejamiento. Pese a todo, el hombre y la víctima se habían reconciliado y él volvía a vivir en la casa de la mujer, en el número 38 de la calle Don Bosco de Reus, según explicó Xavier Serrano, un vecino del edificio. Fuentes vecinales aseguraron que no llegaron a escuchar ruido alguno durante la pasada noche que pudiera hacer pensar en una agresión. No obstante, otro vecino apuntó que, al acudir a su trabajo a las ocho de la mañana, observó que la puerta del piso de la víctima estaba abierta, pero pensó que era un simple descuido. La mujer fallecida era de nacionalidad española y trabajaba como agente de seguros. Tenía dos hijas, una de cinco años –la que encontró el cadáver– y otra de 15 años de un primer matrimonio. El juez de guardia de Reus procedió al levantamiento del cadáver a las 11.30 horas ayer y el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde le realizarán la autopsia para determinar la causa exacta de la muerte.

La cifra de muertas en 2011 va camino de igualar las de 2008, el peor año hasta ahora La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha elevado a 12 la cifra de mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas en España en lo que va de año, el peor dato registrado en el mismo periodo de tiempo desde 2007, cuando se computaban 13 víctimas, cifra que se alcanzaría en caso de confirmarse definitivamente el de Reus (Tarragona). En ese supuesto, en 2011 habría ya dos víctimas mortales más que en 2008, el peor año desde que se elaboran estadísticas. El delegado del Gobierno, Miguel Lorente, ha condenado ambos asesinatos y ha reiterado que la «solución requiere de la coordinación, esfuerzo y dedicación de todas las administraciones implicadas, así como de las familias, los entornos y la sociedad en su conjunto». Lorente ha insistido en utilizar la ley y el rechazo social contra el maltrato. De los doce casos confirmados, sólo existía denuncia previa por malos tratos en uno. De las doce mujeres, nueve convivían con el asesino y ocho mantenían aún una relación de pareja con él. En cuatro casos, el asesinato se produjo cuando ya habían roto o se encontraban en fase de ruptura. efe madrid