Política
principal
economía | política
pensamiento
| marx siglo XXI
debates | eventos
institucional
| enlaces
Buscar

Vanguardia, conciencia, estrategia revolucionaria y la propuesta de Marta Harnecker

Toby Valderrama

Después de la derrota del movimiento revolucionario en América, luego de la muerte del Che y del derrumbe del ensayo soviético; la Vanguardia y la Conciencia revolucionarias han ocupado el centro de las discusiones de los revolucionarios. Una crisis de identidad cubrió como una neblina espesa el ánimo de los teóricos, que no encontraron mejor salida que enfilar todo su entendimiento contra la Vanguardia, erigida ésta en máxima culpable de todas las desdichas pasadas y las por venir, de tal manera que disolviendo la Vanguardia e ignorando a la Conciencia revolucionaria se corregirían todos los entuertos. Se comportaron como el alemán que frente a la infidelidad vendió el sofá.

Nosotros en Esperanza Patriótica pensamos que el punto no está agotado y por eso queremos participar en la polémica. Entremos en materia.

La construcción correcta de los conceptos de Vanguardia y Conciencia son vitales para un proceso revolucionario. Estos conceptos tienen estrecha relación con la visión de la sociedad capitalista y la necesidad, y posibilidad de su superación. Tienen relación con la idea de la lucha de clases y de la dominación que de allí se desprende. El concepto de Vanguardia y de Conciencia van a determinar la actuación política y la prefiguración de la sociedad futura. Además nos hablan de la etapa de transición. De estos conceptos depende, sin duda, el rumbo del proceso, el objetivo de ese proceso y en definitiva la visión general de la Revolución. El asunto no es trivial ni es nuevo, las posiciones son antiguas.

En el campo revolucionario aparecen, con persistencia centenaria, varios modelos de Vanguardia, que corresponden a tres campos ideológicos generales: Los que plantean que el capitalismo no puede ser superado. Los que proponen que puede ser superado pero lentamente y por pasos, y los que plantean que el capitalismo únicamente puede ser superado por una revolución que doblegue la voluntad de los poseedores. Sin embargo al estudiar con detenimiento las diferentes propuestas, nos daremos cuenta que en realidad se reducen a dos grandes posiciones ideológicas: los que creen que el capitalismo es superable y los que creen que no es superable. En este escrito nos ocuparemos, entonces, de dos de las más conspicuas tesis que se manifiestan en estos dos grandes posiciones.

Los que proponen la superación del Capitalismo lentamente, acumulando reformas, acumulando fuerzas, tomando colinas, encuentran uno de sus más visibles teóricos en la señora Marta Harnecker. Veamos un resumen de su planteamiento: la señora Harnecker, en su libro "Haciendo posible lo imposible," nos ofrece un rico diagnóstico del mundo actual, no obstante, tenemos graves diferencias en la solución que aporta. Harnecker expone en el párrafo 1297 del citado libro, el meollo de su tesis, para mejor comprensión transcribimos el párrafo íntegro:

"1297. Estas opiniones (se refiere a la importancia de los gobiernos locales, nota nuestra) tienen mucho que ver con la percepción que tenga de la actual situación política y del papel que se otorgue al estado en ella. Quienes piensan que puede abrirse una situación insurreccional y que de lo que se trata es de demoler el estado burgués, es decir, que existe una posibilidad de ruptura revolucionaria en el horizonte inmediato, tenderán a minusvalorar este espacio. Quienes pensamos, por el contrario, que vivimos un período ultraconservador y que estamos en grandes desventajas en cuanto a la correlación de fuerzas a nivel mundial y local, creemos que de lo que se trata es de acumular experiencia política y organizativa dentro del marco de las relaciones jurídicas institucionales burguesas para preparar las condiciones de un cambio ulterior y, por lo tanto, valoramos positivamente el acceso a la administración de un gobierno local por parte de la izquierda. Lo consideramos un espacio que permite crear condiciones culturales y políticas para ir avanzando en la organización autónoma de la sociedad."(resaltado nuestro)

Recientemente la señora Harnecker refuerza su tesis cuando en un trabajo aparecido en el número de Marzo de la revista Cuba siglo XXI y titulado "Delegando Poder En La Gente. El presupuesto participativo en Porto Alegre"

En este trabajo después de describir en que consiste el presupuesto participativo, Harnecker entra en materia en el apartado que titula. 2. DEPENDE DE VISIONES ACERCA DEL ESTADO

En este apartado entrevista a Iria, y a Tarso quienes exponen los fundamentos del "Presupuesto Participativo" veamos:

"Iria: De hecho existe una larga y polémica discusión entre quienes se plantean implantar una República de……como quieren muchos en Rio Grande de Sul-- por vía revolucionaria y quienes aceptamos hacer una guerra de posiciones. Si alguien tuviese la fórmula para que la gente acabe con el neoliberalismo en Río Grande y en la Alcaldía de Porto Alegre de un día para otro, sería otro cantar.

Tarso: A propósito de lo que dice Iria, yo creo que la desconfianza que algunos compañeros expresan está relacionada con la visión que tienen respecto a la cuestión del estado. Si se piensa que se está en un proceso de acumulación política para destruir, para demoler el estado burgués, o sea, si se piensa que existe una posibilidad de ruptura revolucionaria en el horizonte inmediato, es evidente que se opinará que el presupuesto participativo como estrategia democrática no contribuye a eso, o, dicho de otra manera, si se tiene la ilusión --en mi opinión una ilusión pequeño-burguesa y voluntarista-- de que se puede avanzar por la vía insurreccional en la actual etapa de desarrollo histórico del capitalismo y de crisis del estado burgués, entonces la experiencia del presupuesto participativo sería incluso una experiencia innecesaria. Si se tiene otra visión; si se piensa que es necesario acumular experiencia política y organizativa dentro del marco de relaciones jurídicas burguesas y realizar experiencias de control del estado por la base de la sociedad organizada de manera autónoma, entonces se considerará al presupuesto participativo como una experiencia altamente positiva y altamente revolucionaria. Y esa es la posición que yo comparto. Yo creo que estamos en un momento histórico de acumulación de fuerzas; en un momento en el que debemos crear condiciones culturales y políticas para que la organización autónoma de la sociedad ejerza algún tipo de control sobre el estado actual y realice experiencias que combinen la democracia representativa con la democracia directa de participación voluntaria".

Ellos aquí van al meollo del asunto: La visión que se tiene del estado, de la lucha de clases, del sistema de dominación, de la posibilidad de la Revolución y coinciden muy plenamente con el párrafo 1297 del libro de la señora Harnecker. Queda claro que no es un mero problema de repartir el presupuesto se trata de una postura frente a la Revolución, postura que divide las aguas. Y desemboca en diferentes conceptos de vanguardia y de Conciencia.

No nos interesa discutir, en esta oportunidad, la utilidad de los gobiernos locales. Nos importa, ahora, desentrañar el perfil estratégico que subyace en el planteamiento de la señora Harnecker, quien basada en los éxitos tácticos de los gobiernos locales y las dificultades para hacer la Revolución construye una estrategia que se consume en sí misma, desechando la posibilidad de la Revolución, por tanto, dando origen a una vanguardia, a una Conciencia y a unos objetivos francamente reformista. Se pueden usar la variables tácticas que las circunstancias aconsejen, lo que no se puede hacer, so pena de caer en el oportunismo, es transformar esa táctica en estrategia cómoda del movimiento revolucionario, renunciando a la idea motora del revolucionario: "el capitalismo es derrotable, la Revolución siempre es posible". No debemos impresionarnos por el poderío circunstancial del enemigo. Ninguna Revolución, esto es una ley, se ha iniciado en condiciones favorables para los revolucionarios, por el contrario siempre en condiciones desesperadas. Nunca debemos, como decía Engels: "renunciar al futuro del movimiento en aras del presente del movimiento"

Se trata, nos dice Harnecker, de accionar dentro del campo de las "relaciones jurídicas institucionales burguesas" con la promesa de preparar las condiciones de un cambio ulterior, cambio este que se confiesa no es posible... en lo inmediato. Lo que plantean la señora Harnecker y sus dos discípulos, Iria y Tarso, es convivir con el capitalismo, sujeto a su marco jurídico, dentro de sus instituciones, es decir jugando con sus reglas y en su campo, no cuestionarlo, y de esta manera, como por arte de birlibirloque, acumular fuerzas para demolerlo. Por supuesto que la Vanguardia que se desprende de este planteamiento tiene como horizonte estratégico convivir con el estado capitalista, es un partido con Conciencia clientelar, permeable al oportunismo y a los oportunistas, inscrito en el organismo electoral, con tarjeta y con financistas poderosos. En resumen es un partido del sistema, domado, manso, que retóricamente puede cuestionarlo (cada vez menos), pero al tener la misma práctica de lo que quiere sustituir mantiene la Conciencia del sistema perverso y por lo tanto anula cualquier posibilidad de cambio. La practica del ejercicio del poder en el Capitalismo, absorbe, anula las buenas intenciones, y al final esa Vanguardia se transforma en un clásico instrumento político del sistema. No se hace nada para instalar la Conciencia de la liberación. Dicen atacar al sistema, pero al final de cuentas le sirven de válvula de seguridad. Nos parece apropiado para cerrar este punto, y a propósito del argumento de que estamos en un periodo "ultraconservador y que estamos en grandes desventajas en cuanto a la correlación de fuerzas a nivel mundial y local", traer la frase que el Che escribió en su diario boliviano a propósito del aniversario del 26 de Julio: "El 26 de Julio, asalto al Moncada. Asalto contra las oligarquías y contra los dogmas revolucionarios". El dogma principal en aquella época era la imposibilidad de hacer una revolución, en la América, a 90 millas de Estados Unidos, y si eso fuera poco en un país subdesarrollado, sin proletariado significativo, y para colmo innovar el método de lucha.

La otra tesis que hoy queremos comentar es la compartida por nosotros en la Esperanza Patriótica, que parte de una premisa: la dominación es un conjunto en el cual todos los factores que la componen interactúan con un solo fin: crear y reproducir una Conciencia, que permita perpetuar al sistema, manteniendo su hegemonía en la mente del dominado. Aquí es apropiado recordar la famosa frase de Biko: "la principal arma del explotador es el alma del explotado".

Si la dominación se basa en la colonización de la Conciencia del dominado, podemos deducir que la lucha revolucionaria consiste en última instancia en liberar las Conciencias tomadas por el sistema. En esta transformación de Conciencias sumisas en Conciencias revolucionarias hay diferentes grados de evolución. La Vanguardia es la organización de los más avanzados los que teórica y prácticamente han interiorizado su papel en la lucha contra la dominación.

Es papel de la Vanguardia prefigurar a la nueva sociedad, impregnarla de la Conciencia revolucionaria, guiar la lucha que conduzca a la construcción de las condiciones que posibiliten la generalización de la nueva Conciencia. No olvidemos las enseñanzas del maestro: "Las circunstancias hacen al hombre, en la misma medida que este hace a las circunstancias." Se trata, ahora de derrumbar las condiciones que hacen posible el imperio de la Conciencia dominadora. Cada acción de los revolucionarios debe ser dirigida a la acumulación de Conciencia revolucionaria, y debe motorizar nuevas acciones acumuladoras de Conciencia.

La Conciencia revolucionaria tiene como pilar fundamental la reflexión de que no es posible en el capitalismo resolver ningún problema esencial de la existencia de la vida. De que el sueño se anida fuera del capitalismo, de que es necesario establecer nuevas relaciones entre los humanos.


Trabajo que surge de la discusión colectiva en la dirección política de nuestro partido: "Esperanza Patriótica", partido revolucionario venezolano.

     
   
   
  principal | economía | política | pensamiento | marx siglo XXI | debates | eventos | institucional | enlaces