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SEMILLAS DE LIBERTAD COLECTIVO ESTUDIANTIL POR LA RECUPERACIÓN DE LAS SEMILLAS Y LA MEMORIA HISTÓRICA LATINOAMERICANA  

Sobre los hechos acontecidos entre 2 de junio y hoy 7 de junio del año 2016  

En el marco del Paro Agrario Nacional, el pasado jueves 2 de junio un grupo de compañeros encapuchados protagonizó un bloqueo en las inmediaciones del campus universitario el cual desenlazó en fuertes enfrentamientos con el aparato represivo estatal. Producto de este enfrentamiento se tuvo como resultado el destrozo de la estación Univalle, perteneciente al Sistema Integrado de Transporte SEMIPRIVADO MIO, además de lesiones físicas en personal interno y externo a la universidad.


La respuesta del señor rector Edgar Varela frente a estos actos no se hizo esperar, en la noche del mismo 2 de junio Varela envío dos comunicados a la comunidad universitaria, el primero condenando el uso de la violencia y vandalismo en la Universidad del Valle. En el segundo comunicado Varela anuncia el cierre del campus universitario entre el 3 y 6 de junio argumentando estar preocupado por la seguridad de los estudiantes, pasando por alto la opinión de los mismos y sin consultar previamente ninguno de los estamentos universitarios.


La sorpresa de la comunidad universitaria fue total la mañana de hoy al observar los hechos, más violentos y vandálicos que los protagonizados el día jueves, esta vez ejecutados por órdenes del rector Edgar Varela, según él sin la ayuda de la SIJIN. El huerto universitario, ubicado al frente de cafetería central fue arrasado por los miembros de jardinería siguiendo órdenes estrictas de Edgar Varela, además los espacios asignados a grupos estudiantiles fueron saqueados y esculcados selectivamente, sin ninguna supervisión del Comité de Derechos, lo cual vulnera las garantías con que se encuentra el estudiantado.  


No bastando estas medidas arbitrarias, el cínico de Varela envía un nuevo comunicado en el que afirma no haber destruido ninguna huerta, tal vez esto haciendo alusión a que nunca existió una tal huerta universitaria, siguiendo la directriz de Juan Manuel Santos quien nunca vio existir el tal paro agrario, en lugar de eso plantea que los funcionarios de la universidad lo que destruyeron fue un grupo de cambuches, caletas y cultivos, además asocia a las personas que frecuentan estos lugares con los recientes hechos delictivos ocurridos en la universidad.  
LO QUE NO ACLARA VARELA ES, que los cultivos arrasados en la huerta universitaria en su gran mayoría corresponden a especies nativas del bosque seco tropical, moringas hindúes y especies arbóreas en peligro de extinción como Ceibas. No aclara que el delicado equilibrio biológico de la fauna univalluna se encuentra en serio peligro debido a la torpe intervención propiciada por su ignorancia y arbitrariedad, no aclara que una cantidad considerable de zarigüeyas, lechuzas, aguiluchos y otras especies animales que habitan el sector vieron destruido su entorno, lo cual las lleva a enfrentarse a su posible aniquilación, que las pertenencias de varios compañeros fueron hurtadas en medio de esta pésima intervención.  


El colectivo estudiantil y multidisciplinario Semillas de Libertad, desde hace 5 Años guardián e impulsador del espacio conocido como huerta universitaria, ve con profunda tristeza como el delirio de omnipotencia se conjuga con la violencia, la ignorancia y el poder otorgado en la figura rectoral de la Universidad del Valle, dando como resultado no solo la muerte de varias especies vegetales y por ende de las especies animales que subsisten de ellas, sino también la estigmatización, señalamiento y destrucción del trabajo adelantado por el que tal vez sea uno de los pocos colectivos de estudio interdisciplinar en la universidad que se preocupan verdaderamente por el rescate de la soberanía alimentaria.

 
Se equivoca la dirección de la Universidad del Valle, encabezada por el rector Édgar Varela, al hacer afirmaciones basándose en rumores de pasillo. Niega el papel de la Universidad del Valle al destruir el trabajo de 5 años del grupo de investigación que se evidencia en el espacio constituido como huerta universitaria, e implícitamente afirma que son ellos los responsables de dicha destrucción. Un acto que sin duda contraría tanto la misión como la visión de la Universidad. El rector Varela es el principal responsable de la destrucción de los espacios académicos; de la destrucción de años de investigación y de cuidado de semillas nativas por parte del huerto universitario.


En este sentido, no nos podemos dejar engañar porque sus actos de violencia no son solo en contra del grupo estudiantil semillas de libertad, sino también contra de la vida, de la biodiversidad, de las plantas, de todos los animales que han sido desplazados de su hábitat. Este acto contraría ambientalmente tanto el respeto que dice tener, como la valoración del trabajo de los grupos de investigación en la Univalle.  


El trabajo, señor humanista, “cuasi filosofo”, no se mide por la productividad monetaria que deriva de este, sino más bien por el tiempo que ha sido dedicado por parte de los y las estudiantes; y este tiempo, este trabajo que usted arbitrariamente arrasó y destrozó, es algo que no puede ser resarcido ni reubicado por un aparente impacto marginal. Aquello que llama impacto marginal no es otra cosa que una rotunda equivocación de su parte principalmente y de toda la directiva universitaria. Con sus acciones lo único que lo logra es difamar el trabajo de investigación de los grupos ambientales en Univalle.  


Su principal error es querer meter en un mismo saco aquello que indudablemente es contrario. Esta asociando el microtráfico dentro de la Universidad con las actividades de siembra de parte de los huertos de Univalle. Queremos hacer una aclaración, en la huerta no solamente hay cultivos de marihuana, nosotros ante todo sembramos alimentos, recuperamos semillas, semillas nativas. Tenemos una pedagogía con base en la tierra y enfatizada en aquello que es imprescindible para la paz en Colombia: la soberanía alimentaria. En la huerta habían cultivos de: Ceibas, cacao, guanábanas, borracheros, bambúes, sábilas, bromelias, orquídeas, café, ortigas, badeas, tomates, cebollas, maíz, soya, moringas, dalia, plataneras, zanahoria, papa aérea, zapallo, arazá, yuca, chía, maracuyá, lechuga, girasol, ajenjo, citronela, hoja de espada, flor de tierra, ají de 4 variedades, marihuana peruana, cocas, trigo, 3 variedades de ipomeas (morninglory), cidron, sachainchi, alpiste, ajonjolí, Caracolí, papaya....semillas, libros, pero por sobre todo, la voluntad y la acción de la propia tierra.  


Nosotros sembramos marihuana, pero no tenemos cultivos. En el momento teníamos una pocas plantas sembradas y un semillero de plántulas, que iban a ser utilizadas para una campaña de sensibilización y auto cultivo hacia los estudiantes y demás ciudadanos, como principal objetivo en contra de la lucha contra el narcotráfico y el microtráfico. Pero el hecho de cultivar marihuana dentro de la universidad a pequeña escala no es causa para que se nos incrimine y difame nuestro nombre en comunicados oficiales y en los medios de información, diciendo que nosotros tenemos caletas, que tenemos cambuches, que surtimos el microtráfico en la universidad. Porque implícitamente todo esto se puede deducir con base en sus comunicados.  


El cultivo de la marihuana que afirma haber encontrado dentro del huerto y que es la excusa principal de su destrucción, no son nada más que 4 plantas y estas tienen como propósito principal la investigación: hacemos medicinas como aceites esenciales y pomadas. No tenemos nada que ocultar, por eso señalamos enfáticamente que no hay ninguna relación de las huertas universitarias con el microtráfico en la universidad. Esto es sin duda una campaña de difamación en contra de los procesos de siembra en la Universidad. Y lo más grave de todo es que se vincule un espacio de estudios, un grupo de investigación agroecológica con el expendio de droga en Univalle, algo que no solo es difamación, sino que también es un atropello contra la imagen del huerto y de los mismos estudiantes. NOSOTRXS NO SOMOS PERSONAS AJENAS A LA UNIVERSIDAD, SOMXS ESTUDIANTES. Por eso con estas declaraciones del rector Varela se está poniendo en riesgo nuestra propia vida. Si algo llega a pasarle a alguno de los estudiantes que hacen parte de este grupo estudiantil, el rector Édgar Varela es el principal responsable por no medir el alcance de sus palabras.  


Cuando afirma que se han encontrado caletas, cambuches y cultivos de marihuana, y a esto responde con la destrucción de la huerta universitaria. ¿Qué más se puede pensar? Pues sencillamente que la huerta universitaria es responsable de todo esto. Esto es difamación, es incriminación, es calumnia. Lo hacemos responsable de la incriminación del espacio de la huerta, de la difamación del buen nombre de los estudiantes que ahí trabajan, que estudian, que están basando sus proyectos de trabajo de grado en la huerta. Pedimos claridad en sus comunicados, claridad ante la comunidad universitaria, la comunidad caleña y toda la sociedad en Colombia. Y coherencia en sus actos respecto a sus discursos ya que la defensa de la universidad no puede ser lograda de la misma manera violenta que dice ser criticada por toda el alma mater.  


¿La recuperación del espacio público, la recuperación ambiental y física del campus, tal como lo entiende usted, está sustentada con base en la destrucción de la biodiversidad, de la vida? ¿Toda esa retórica de que la universidad es un espacio para el pensamiento, para la cultura, valores democráticos y la paz se sustenta con base en difamaciones? Nosotros no vemos ningún espíritu de paz y reconciliación en sus actos, pues en ningún momento ha logrado superar la violencia que tanto se empeña en combatir.  


Por otra parte, la directiva de Univalle está pasando por encima de varios acuerdos, entre ellos la Resolución N. 009 de abril 4 de 2014. Pisotea el Derecho a la Vida, va en contrariedad de la Ley 99 de 1993 y la Ley 115 de 1994. En este sentido Univalle debe asumir la responsabilidad ambiental por la destrucción del medio ambiente y por el arboricidio que cometió en la huerta; ya que muchos seres vivían en codependencia con el entorno que se había generado en dicho lugar y que ahora es un gran cráter. Lo hacemos responsable por la destrucción de un vivero de árboles nativos del bosque seco tropical, por la destrucción de las plantas, de las semillas que habían sido sembradas, semillas que se perdieron completamente y que son imposibles de recuperar. Arboricidio de árboles nativos del bosque seco tropical como ceibas, samanes, guácimo. Guayacán y carbonero. Ustedes niegan el desarrollo sustentable al destruir el espacio físico que funcionaba como laboratorio experimental, en el cual se hacía pedagogía con niños, comunidades y procesos por fuera de la universidad. La biodiversidad que fue arrasada por el rector es un proceso de más de 9 años de recuperación de la tierra para volverla apta para la siembra, por eso resulta inadmisible el hecho de que se piense en reubicar a la huerta a otro espacio. O ¿Es que, rector Varela, nuestro trabajo va a ser arrasado por los pésimos consejos que ha recibido por parte de personas que solo quieren destruir los procesos estudiantiles, que solo quieren destruir la vida?  


Con lo anterior lo que queremos denunciar ante la comunidad universitaria es que las directivas también están incumpliendo sus acuerdos, sus estatutos en torno a la política ambiental de Univalle, pues niega los principios rectores, tal como la ética ambiental, que dice explícitamente defender todas las formas de vida y la cual se basa en el respeto. Siendo esto así, se cae el mismo discurso de la directiva con base en sus actos que atentan contra la vida y que son violentos desde todo punto de vista. No hay ethos alguno en sus actos que deslegitiman completamente su discurso de paz, de respeto y de defensa de la naturaleza.


Nosotros nos solidarizamos con todos los estudiantes, trabajadores que han sido afectados de algún modo por las políticas del rector Varela.  Nos solidarizamos con los compas de los puestos ambulantes que también lo perdieron todo. Nos solidarizamos con los compas de los grupos de estudio que fueron afectados, y hacemos un llamado desde este “cambuche artesanal” como lo llama Varela, o desde nuestra trinchera, para que nos unamos en esta gran minga por la defensa de la dignidad de la vida y de la tierra.  


A LAS DIRECTIVAS DE LA UNIVALLE POR LA PÉRDIDA DE AÑOS DE INVESTIGACIÓN Y DEDICACIÓN EN LA HUERTA, POR LA DIFAMACIÓN DE LOS ESTUDIANTES Y LA INCRIMINACIÓN DE NUESTROS PROCESOS ESTUDIANTILES, NI PERDÓN, NI OLVIDO.  

“Nos quisieron enterrar, pero lo que no sabían es que éramos semillas”.    

Desde la huerta universitaria: Semillas de Libertad. Cali – Colombia.    

SEMILLAS DE LIBERTAD