La realidad colombiana por más de cincuenta años ha sido marcada por la sangre de millones de personas de las clases populares, torturadas y asesinadas por el capitalismo encarnado en la oligarquía paramilitar que detenta el poder político y económico de nuestra hermana Colombia. La lucha del pueblo colombiano ha sido incansable y se ha perpetuado a lo largo de la historia: los movimientos sociales, la lucha armada, el movimiento estudiantil, el campesinado, son vivos ejemplos de resistencia que desde el Bogotazo, se ha intensificado exponencialmente en el país vecino.

La coyuntura nos lleva a reflexionar sobre la causa estructural que configura el conflicto en Colombia. Si bien, el próximo 28 de mayo el paracandidato y actual Presidente Álvaro Uribe Vélez persigue la reelección para seguir manteniendo el estatus de represión al más rancio estilo facistoide, la razón de ser de esta bofetada al pueblo, responde a la necesidad imperialista de mantener su hegemonía en toda la América Latina, tomando a Colombia como corazón geoestratégico de toda esta parafernalia genocida.

La reelección de Uribe representa la legitimación de la intervención militar (Plan Colombia – Plan Patriota), el apoyo (aunque disfrazado) irrestricto a las Autodefensas Unidas de Colombia (Paramilitarismo), la profundización del voraz y neoliberal Tratado de Libre Comercio (TLC) con EEUU, el inmediato aniquilamiento de cualquier voz insurgente, la represión sistemática contra el pueblo, el empobrecimiento, la exclusión social…. es decir, todo esto se traduce en la continuación de la burguesía en el poder y del pueblo en la miseria.

Desde Venezuela, Utopía eleva su voz de protesta contra el proyecto paramilitar Uribista y su reelección.

Enarbolamos las banderas de solidaridad y compromiso irreductible con el pueblo colombiano y todas sus luchas de liberación, porque entendemos que los desmanes sufridos por este pueblo, son comunes a la América Latina, y más allá, a toda la clase oprimida del mundo. Sólo venciendo al capitalismo lograremos la Colombia, la América Latina y el mundo libres que tanto anhelamos.