El próximo 26 de septiembre se celebrarán elecciones legislativas de vital importancia para la Revolución Bolivariana y para la lucha por el socialismo a escala internacional. Son estratégicas para el pueblo venezolano porque la revolución necesita sacar una mayoría legislativa suficiente para profundizar las medidas revolucionarias a favor del pueblo; de esta manera, el mundo entero podrá ver en Venezuela que es posible superar el capitalismo, mediante el control obrero y democrático de los medios de producción, y dejar atrás su secuela de guerras de rapiña, muerte y destrucción que es la base que lo sustenta. Por esta misma razón estos comicios son importantes para la oligarquía venezolana aliada del imperio. Tienen previsto presentarse no porque crean en el proceso, porque sólo respetan las elecciones en las que ganan sus intereses, sino porque a su vez necesitan sacar el suficiente número de escaños que les permita sabotear justamente esta profundización revolucionaria que está pidiendo ya el pueblo de Venezuela.

Las conquistas sociales de la Revolución Bolivariana han sido ganadas en una lucha constante, no exenta de atentados sangrientos contra el pueblo venezolano por parte de los sicarios de la oligarquía. Los avances en educación, sanidad y disminución de la pobreza, por nombrar algunas de los más importantes, han sacado a Venezuela del marasmo de miseria y muerte en que tiene sumidos el capitalismo a todo el continente latinoamericano y están refrendados por organismos de la propia ONU. La colaboración en todos estos campos con la Revolución Cubana demuestra a su vez el potencial multiplicador de emancipación social que la extensión y la cooperación entre pueblos solidarios contienen en si mismas.

Con su ejemplo, la Revolución ha demostrado al mundo que es posible organizar la sociedad sobre bases solidarias, integradoras, socialistas, por decirlo con una sola palabra, y que para conseguirlo es posible enfrentarse a los poderes imperialistas mundiales que intentan impedir la consolidación y el triunfo del proceso revolucionario con todos los medios a su alcance.

Este ejemplo de lucha para la humanidad y los trabajadores de todo el mundo es la razón por la cual los medios de comunicación en manos o al servicio del capital multinacional, injurian y agraden a la Revolución Bolivariana a base de calumnias permanentes; en primer lugar en la figura de su principal dirigente, Hugo Chávez; sin el concurso de este proverbial dirigente histórico la plasmación política del malestar popular venezolano en un proceso revolucionario hubiera sido harto problemática, habida cuenta de que los partidos de clase trabajadora, la única clase revolucionaria por si misma, carecían de fuerza suficiente para dirigir la efervescencia social anticapitalista hacia la toma del poder. De aquí la rabia desmesurada con la que se le ataca permanentemente, con las acusaciones más espurias, que van desde dictador hasta terrorista.

Desde la Plataforma Bolivariana de Solidaridad con Venezuela denunciamos con toda firmeza la campaña de permanente acoso y derribo perpetrada desde todos los frentes contra la Revolución Bolivariana por parte del capitalismo internacional y desmentimos rotundamente la sarta de patrañas que desde las multinacionales de los medios de des-información vierten a diario contra Venezuela su pueblo y sus dirigentes revolucionarios por querer afrontar su propio destino en lugar de dejarlo al albur de intereses capitalistas.

En estos momentos de crisis terminal del capitalismo, cuya factura y consecuencias los estrategas y portavoces mediáticos del capital nos quieren hacer pagar a los trabajadores y pueblos de todo el mundo, hacemos un llamamiento de apoyo a la Revolución Bolivariana, precisamente por enseñarnos que existe un camino distinto del egoísmo depredador de unos pocos privilegiados, distinto de las sociedades clasistas basadas en la explotación de unos seres humanos por otros.