Las bajas de la ocupación
Deliberadas subestimaciones
en el número de muertos de la 'coalición' en Iraq
Paul de Rooij*
CSCAweb
(www.nodo50.org/csca), 18 de febrero de 2004
'Counterpunch', febrero de 2004
Traducción para CSCAweb de Sinfo Fernández
"Los
propagandistas están intentando manipular las estadísticas
y tratando de esconder la llegada de féretros a EEUU.
Para evitar nuevas guerras, para 'apoyar a nuestras tropas' de
verdad y para detener a los insufribles neocolonialistas es fundamental
que los ciudadanos sean profundamente conscientes de los costes
de esta guerra"
Hay evidencias de que se está
realizando un esfuerzo coordinado y premeditado a fin de ofuscar
el número de víctimas de la reciente cosecha de
guerras emprendidas por EEUU. El 1 de mayo fue la fecha en la
que el presidente Bush aterrizó en un portaviones y declaró
el fin de la guerra y el comienzo de la ocupación de Iraq
[1]. Desde entonces se han publicado muchas cifras de
bajas la mayor parte de las cuales son manipulaciones confusas
de las cifras reales de muertos. Hay muchas razones por las que
se intenta reducir el número de víctimas y en este
informe vamos a analizarlas.
El régimen de Bush está
haciendo todo lo que puede para ocultar el coste humano de sus
últimas guerras. Durante un año electoral dar publicidad
sobre las muertes de los soldados no favorece al candidato y
es perjudicial para que EEUU continúe justificando la
ocupación de Iraq. Ya que ellos están tratando
de ocultar las cifras de muertos nos incumbe entonces a nosotros
descubrirlas y ampliarlas hasta alcanzar un cómputo real.
¿Somos
una 'Coalición'?
Los propagandistas de EEUU
y los medios de comunicación utilizan el término
coalición cuando les conviene. Cuando resulta importante
mostrar que EEUU no está actuando en solitario, sin autorización
de NNUU, entonces se ensalzan las virtudes de la coalición.
Cuando el objetivo es reducir el número de víctimas
y esconder las cifras de muertos, entonces conviene contar exclusivamente
a las víctimas estadounidenses. El hecho de que los muertos
británicos, daneses, españoles, polacos e iraquíes
que trabajan para EEUU no se añadan al número de
víctimas sobre las que los medios de comunicación
informan es, cuando menos, deshonesto.
Uno puede encontrar comprensible
que los medios de comunicación estadounidenses centren
su atención exclusivamente en las víctimas de EEUU.
Los británicos son el segundo contingente más importante
en la denominada coalición y cabría esperar
que los medios de comunicación británicos informaran
tanto de las víctimas estadounidenses como de las británicas.
Sin embargo, cuando se informa sobre la gravedad de la situación,
la BBC también separa las cifras y se centra en
las víctimas estadounidenses. BBC Online tiene
numerosos artículos que tratan exclusivamente de las víctimas
de EEUU y,de forma separada, solo se encuentran unos pocos sobre
las víctimas británicas [2]. Esto sólo
puede interpretarse como un intento de reducir las cifras presentadas
y esconder la escalada de la resistencia contra la coalición.
Y juegan a la baja a costa de las víctimas británicas;
incluso en los medios de comunicación británicos
es raro que se añada algo más.
Clasificación
de las manipulaciones
Si un soldado pisa una mina
terrestre ¿debería ser clasificada la víctima
como un muerto por "acción hostil"? ¿Qué
pasa con alguien que muere claramente a causa de una mina? Para
pasar a integrar las estadísticas sobre bajas recogidas
por los medios de comunicación esas bajas se deben clasificar
como "no hostiles" -que, de esa forma, no son
recogidas por la mayoría de los medios de comunicación
ya que sólo informan de los soldados que resultan muertos
a consecuencia de acciones hostiles. Desde luego, a las
agencias de noticias más importantes no se les pide que
usen como propaganda cifras atenuadas -también
disponen de listas generales. Y si no quieren resolver el tema
de los números pueden referirse a Lunaville (una
buena fuente con datos de calidad) [3]. Sin embargo, la
clasificación utilizada habitualmente da como resultado
una reducción del número de víctimas relacionadas.
Está claro que las cifras del Pentágono son utilizadas
por amplios sectores; por otro lado, uno no podría explicarse
cómo las cifras de la [cadena de TV estadounidense] CNN
son las mismas que las señaladas por la BBC. Cualquiera
que intentase recoger las cifras de víctimas distinguiendo
entre la causa de la muerte habría llegado posiblemente
a una cifra diferente. Ya que éste no es el caso, en la
mayor parte de los medios de comunicación se puede deducir
únicamente que el uso propagandístico de cifras
atenuadas sirve para reducir el número de víctimas
reales que se producen.
Hay también una manipulación
clara de los datos. Por ejemplo, los soldados muertos por acciones
hostiles son reclasificados con posterioridad como "muertes
accidentales" [4]. El simple hecho de esta manipulación
es evidente para cualquiera que desee investigarlo y debería
ser una razón suficiente para informar de todas
las víctimas con independencia de la causa de muerte señalada
pero no es así.
La tabla mostrada más
abajo muestra un nivel relativamente alto de muertes "no
hostiles" durante mayo de 2003. Parece algo sospechoso y
puede que sea un tema interesante para que los intrépidos
periodistas empotrados pudieran hacer preguntas a sus dirigentes
del Pentágono. Inicialmente hubo muchas muertes debido
a los vehículos [multiruedas] Humvee -17 para ser
precisos-; quizá el hecho de que los soldados lleven
ahora cinturones de seguridad podría explicar que esta
causa de muerte haya desaparecido. Una explicación más
probable es que la causa de la muerte sea debida en realidad
a una acción hostil, por ejemplo que los tanques con ruedas
aplasten explosivos. Incluso con una simple aproximación
a las estadísticas podemos captar una reducción
extraña de las muertes "no hostiles" en el gráfico.
Una información honesta
requeriría contabilizar una muerte si la víctima
hubiera podido hoy estar viva de no haberse producido los hechos
en Iraq. [Las bajas por [muerte] por insolación, por enfermedades
sin explicación, por [pisar] minas terrestres, por los
vehículos multiruedas Humvee, por suicidio, por
lanzar granadas de mano [5] deberían estar incluidas
en el cómputo total. Sólo de esa manera sería
posible elaborar un retrato más ajustado de lo que está
ocurriendo sobre el terreno y poder hacer estimaciones sobre
las cifras reales de víctimas en el futuro. Y hay un argumento
que los estadounidenses seguramente entenderán: esas cifras
también indican el coste que esta ocupación va
a suponer en términos de dólares.
Algunas
estadísticas
Es curioso que para una nación
obsesionada con las previsiones virtuales de las cotizaciones
en bolsa ninguna agencia de noticias publique previsiones de
muertes de soldados. El cuadro inferior combina las víctimas
tanto de estadounidenses como de británicos (son menores
en el caso del Reino Unido porque el contingente británico
supone menos del 10% del total). Está claro que hay una
tendencia al alza en las muertes y esto es sorprendente porque
todas las fuerzas militares extranjeras en Iraq han reducido
sus riesgos. Según Patrick Cockburn:
"[...] En conjunto, la
captura de Sadam Husein parece tener poco que ver con las diferencias
observadas en el nivel de ataques de la resistencia. Esto no
es obvio de forma inmediata, porque el número de ataques
sobre las fuerzas estadounidenses ha disminuido ahora a alrededor
de 17 diarios comparado con el doble de hace dos meses. Pero
esto se debe en gran parte a que, deseosos de reducir sus víctimas,
los comandantes estadounidenses redujeron el número de
patrullas que llevaban a cabo en dos terceras partes, de 1.500
al día en noviembre a 500 al día en diciembre."
Por ello, si ha disminuido
la exposición a amenazas potenciales y la tasa de víctimas
ha aumentado entonces esto sólo significa una cosa: la
resistencia está creciendo de forma más violenta.
La tasa media total de víctimas es de 1,5 por día
desde el 1 de mayo al período del 27 de enero de 2004.
La proporción en el último mes asciende a 1,8 y
las previsiones para la tasa de víctimas en mayo del 2004
es de 2,1 por día. El porcentaje de muertes está
creciendo. Mientras que durante los primeros cuatro meses de
la ocupación las causas de muertes hostiles alcanzaban
el 50% en la actualidad, a lo largo del período del 1
de mayo al 27 de enero de 2004, se han incrementado hasta el
66%.
Curiosamente ningún
medio de comunicación publica la procedencia étnica
de las víctimas. La tabla inferior se refiere a las bajas
estadounidenses y británicas durante el período
del 1 de mayo de 2003 al 27 de enero de 2004 [6]:
Origen |
Bajas |
% |
Europeo |
283 |
67% |
Afroamericanos |
53 |
13% |
Hispanos |
37 |
9% |
Otros |
8 |
2% |
Desconocido |
39 |
9% |
Total |
420 |
100% |
Mujeres |
(10) |
(2,4%) |
La composición étnica
de las bajas se mantiene más o menos constante con un
ligero incremento en el número de muertes de blancos [de
origen europeo], que ha subido del 65% al 68% del total.
La edad media y el rango militar
medio de las víctimas están también aumentando.
Esto se explica porque las tropas de la línea del frente
tienden a ser más jóvenes y a tener un rango menor.
Por eso cuando el conflicto pasó de la guerra a la ocupación
se produjo un cambio en la naturaleza de las bajas: éstas
van desde los soldados de la línea del frente a los soldados
reservistas; éstos últimos tienden a ser mayores
y a tener un rango más alto. Además los métodos
que utiliza la resistencia iraquí para atacar a las tropas
también explican este modelo. Los morteros lanzados a
los campos militares dan a todos la oportunidad de resultar heridos;
lo mismo ocurre con los convoyes militares alcanzados por los
IED ([en sus siglas en inglés], un nuevo término
militar para designar a los [denominados] Dispositivos Explosivos
Improvisados).
Finalmente, para una cultura
que vive obsesionada con las previsiones financieras o meteorológicas
es extraño que nadie prevea las víctimas militares.
En un artículo publicado en septiembre de 2003 pronosticábamos
que los muertos de EEUU y de Gran Bretaña desde el 1 de
mayo al 31 de diciembre serían de 378; el número
actual parece ser de 374. De nuevo, esto no es ciencia espacial,
sólo se necesita considerar algunas estadísticas
básicas. Las previsiones desde el 1 de mayo de 2003 al
1 de mayo de 2004 son de 610 militares muertos de EEUU y Gran
Bretaña aunque es probable que sea algo menor ya que a
la resistencia iraquí se le está agotando los explosivos
y la munición. Es más probable una previsión
de alrededor de 560 víctimas a menos que los iraquíes
puedan abatir un avión de transporte -el único
alcanzado el 8 de enero llevaba a bordo 69 militares pero no
fue derribado.
Miles de soldados han sido
trasladados a Alemania o a EEUU para recibir tratamiento médico.
Al principio se podía encontrar el informe ocasional de
algún soldado que murió en el hospital tras resultar
herido. Durante los últimos meses se han producido sólo
tres informes de muertes de este tipo a pesar de que la tasa
de víctimas ha aumentado. O bien tales muertes son clasificadas
ahora como errores médicos, o bien los doctores están
realizando milagros y manteniendo con vida a todos los soldados
heridos. Al menos dos suicidios de soldados cuando regresaban
a un hospital militar fueron considerados como bajas locales.
Una cosa es cierta, se está actuando con una gran deshonestidad
evadiendo la información real de las cifras de muertos
al rehusar incluir a aquellos que mueren en hospitales como por
ejemplo en el Centro Médico Walter Reed en Washington.
Mercenarios
Otro factor importante que
influye en las cifras totales es el de los mercenarios. El número
de mercenarios ha aumentado notablemente. Si uno viaja al aeropuerto
de Bagdad se encuentra con muchos guurkas en los puestos
de guardia. Hay 300 mercenarios de Fidji en Iraq empleados por
un contratista privado y hay más personal de seguridad
privada trabajando en más lugares de Iraq [7].
Cuando estas personas resultan muertas y, a pesar de que muchas
también son ciudadanos estadounidenses, sus bajas no engrosan
las cifras de muertos. Un artículo reciente del Business
Week sobre la industria mercenaria informaba de las muertes
de algunos de los empleados de una subcontrata de Haliburton;
estas muertes no cuentan para las estadísticas sobre cifras
de bajas. La actitud parece ser la de considerar que es el resultado
de hacer un trabajo de riesgo; si resultan muertos, ¡mala
suerte! Ante esta situación es imposible obtener una cifra
de muertos verdadera.
El 20 de agosto un traductor
que llevaba un uniforme completo del ejército de EEUU
resultó muerto pero igualmente su muerte no cuenta para
las estadísticas de víctimas de los informes de
prensa en el CENTCOM [Comando Central de EEUU correspondiente
a la región de Oriente Medio y Asia]. El traductor debía
estar contratado por el ejército de EEUU y aunque era
un ciudadano estadounidense su muerte no cuenta. La CNN
o la BBC tampoco consideran esta víctima y esto
se puede ver fácilmente analizando las listas extensas
que elaboran ambas agencias de noticias. Al excluir muertes de
este tipo de sus cifras tanto la CNN como la BBC
se mantienen en un nivel de propaganda manipulada.
Errores
y omisiones
Cualquiera que intente interpretar
la cifra de víctimas recogida en [la web del] CENTCOM
DefenseLink encontrará errores en la información
[8]. Algunos ejemplos: fechas algunas veces equivocadas,
archivos incompletos (la lista de DefenseLink de octubre
está incompleta y hasta hace poco no se podían
recuperar datos antiguos) y el número de víctimas
en cada una de estas fuentes no coincide con el de la otra. El
CENTCOM no informó sobre los 17 muertos de una colisión
de helicópteros ocurrida el 15 de noviembre. El 2 de noviembre
se informó que dieciséis soldados habían
muerto al haberse estrellado hacía poco un helicóptero
Chinook, mientras que el informe inicial del CENTCOM sólo
se refería a quince y no estaba actualizado; cuando uno
suma las muertes confirmadas en la web de DefenseLink,
sólo se cuentan catorce. Hay otros pequeños errores
cuyo relato sería aburrido pero que vienen a indicar que
se está haciendo un esfuerzo concertado para manipular
la cifra de bajas.
¿Sólo
cuentan los muertos?
Es bastante extraño
preocuparse tan sólo de contar los muertos. Hay montones
de soldados mutilados y con la vida arruinada. Aunque supuestamente
se dispone de información sobre cuántas víctimas
hay de este tipo sólo puede conseguirse dicha información
si el que la solicita es periodista. Ante las dificultades que
hay que enfrentar para obtener esas estadísticas uno tiene
que concluir pensando que ha debido haber demasiadas peticiones.
Puede que algunos soldados
no aparezcan en ninguna estadística pero muchos se encuentran
cerca de áreas donde se utilizó munición
con uranio empobrecido -esto sucedió incluso en el centro
de Bagdad donde hasta una planta de tratamiento de agua fue demolida
con este tipo de munición [9]. Grandes extensiones
de Iraq han sido envenenadas al bombardear sin descanso [supuestos]
centros nucleares y químicos y se espera ahora que los
soldados vayan a trabajar allí. Tanto los departamentos
de Defensa de EEUU como de Gran Bretaña están escondiendo
las cifras de nuevos casos con el "Síndrome de la
Guerra del Golfo" pero un caso llevado a un tribunal en
Londres ha revelado que ya hay algunas. Dado que murieron muchos
más soldados a causa de este síndrome que debido
a los combates de la Guerra del Golfo de 1991, hay que esperar
que en los meses venideros aparezca una nueva cifra de muertos
que, probablemente, no se incluirá en las cifras de la
CNN. Los soldados son forzados a trabajar en un caldo
tóxico y cuando mueran de enfermedades horribles esto
ocurrirá probablemente en EEUU y de esta forma no se verá
reflejado.
Insensiblidad:
Indicador 1
El presidente Bush exhibe una
insensibilidad inexplicable cuando se le enfrenta con las víctimas-soldado;
la razón probable de esta actitud es que puede ser que
se encuentre enfáticamente dañado... No ha asistido
al funeral de ningún soldado y rara vez ha visitado a
soldados heridos en el hospital para "apoyar a nuestras
tropas". Está también claro que la Casa Blanca
está haciendo cuanto puede para esconder las estadísticas
o referencias a las víctimas que son soldados. Se retira
a los soldados heridos en vuelos nocturnos y no se permite que
haya periodistas informando de la llegada de féretros
o en su entierro. De nuevo, nos encontramos con que no conviene
mencionar a las víctimas para justificar la continuación
de la ocupación de Iraq y tampoco es conveniente para
la política durante un año de elecciones.
Los analistas militares informan
de una elevada incidencia de suicidios en Iraq en comparación
con otros conflictos e igualmente se han producido varias evacuaciones
de soldados debido a desórdenes mentales. El período
de servicio es largo, la tensión muy alta y, por todo
ello, podemos vaticinar el desarrollo de un número elevado
de problemas mentales. Cuando estos soldados vuelvan a EEUU,
a una sociedad que no les apoya o no les proporciona asistencia
en su situación mental podemos esperar que se produzca
más de un estallido de locura. Estas situaciones son auténticas
bombas de relojería listas para provocar más cómputo
de muertes.
¿Qué
pasa con los iraquíes?
La CNN y la BBC
rara vez informan sobre las bajas de soldados o policías
iraquíes que trabajan para la coalición.
Dan información el día en que explota una bomba
pero no añaden las cifras [de bajas]. El privilegio de
aparecer en un cómputo se reserva sólo para las
víctimas estadounidenses o británicas.
Tampoco se informa sobre el número de otros iraquíes
muertos y a los periodistas se les prohíbe visitar las
morgues para poder recoger este aspecto del horrible cómputo
de bajas. Para nosotros es importante conocer esta estadística
con el fin de conocer si la población local tiene motivos
legítimos de queja y si la ocupación se está
precipitando al borde de una situación ingobernable. De
nuevo, la divulgación de este tipo de información
es un tema tabú para los nuevos propietarios de Iraq.
Los neocolonialistas aplaudieron
la guerra contra Iraq proclamando que sería un paseo dulce.
Cuando surgieron las preguntas sobre el motivo de esa guerra
recitaron el mantra del "apoyo a nuestras tropas"
y ahora están peleándose entre ellos para decidir
qué país será el objetivo próximo.
Estos perros de la guerra están instalados en sus "guaridas
de expertos pensantes", cómodos y seguros, con aire
acondicionado y maldito lo que les importa a quién se
está matando o quién está pagando por todo
esto; y ahora están batiendo los tambores de guerra para
su próxima correría. El execrable Richard Perle
también afirmó que nosotros estamos en Iraq
para obtener un gran botín sin importar el coste [9].
Desgraciadamente, hay muchos
estadounidenses que parecen estar contentos con este estado de
cosas y a los que no parece importarles el coste espantoso que
están pagando los pueblos de la zona. La única
cuestión que parece importantes es el número de
soldados estadounidenses (y posiblemente británicos) muertos
pero incluso a ese interés real no se está respondiendo
de forma adecuada. Como se ha mostrado en este artículo,
los propagandistas están intentando manipular las estadísticas
y tratando de esconder la llegada de féretros a EEUU.
Para evitar nuevas guerras, para "apoyar a nuestras tropas"
de verdad y para detener a los insufribles neocolonialistas es
fundamental que la población sea profundamente consciente
de los costes de esta guerra.
Cada uno de nosotros deberíamos mantener los ojos bien
abiertos ante las cifras terribles que se están produciendo
tanto en términos de sangre como de dinero.

Notas del
autor y de CSCAweb:
1. Para ser
un propagandista condescendiente, uno tendría que afirmar
que el 1 de mayo el presidente [Bush] declaró que los
EEUU habían interrumpido "las operaciones de combate
de mayor calado". Dado el gran número de bajas tras
ese 1 de mayo, la Casa Blanca subrayó que no había
declarado entonces el fin de la guerra, sino el fin de la guerra
caliente.
2. BBC Online
publica una lista con todos los muertos pero sólo se refiere
a los muertos estadounidenses. Véase en: http://news.bbc.co.uk
3. http://lunaville.org. Los datos utilizados en este informe
se solapan en gran medida con esta fuente de datos. La diferencia
entre los dos es que se han corregido algunos errores y se han
añadido algunas cifras de muertos que no figuraban en
el informe oficial sino sólo en relaciones de los medios
de comunicación.
4. "Propaganda
Predecible", CounterPunch, 2 de septiembre de 2003.
5. Disparar
al oficial de mando se llama fragging: lanzarle una granada
de mano. Ha habido ya un incidente de ese tipo.
6. Clasificación
hecha por el autor a partir de fotografías. Es un medio
imperfecto de clasificación, pero no hay otra fuente disponible.
7. Véase
en CSCAweb: Sinfo
Fernández Navarro: 'La invasión de Iraq: Un paso
más en la privatización de la guerra y la ocupación' [Nota de CSCAweb].
8. Cuando ocurre
una muerte el CENTCOM emite una simple nota de prensa. Estas
pueden verse en: (www. centcom.mil/CENTCOMNews). Algunos días
después, DefenseLink emite una declaración
de prensa con el nombre de las víctimas junto a una breve
explicación. Estas publicaciones pueden encontrarse en:
www.defenselink.mil/releases
9. Entrevista
con Doug Rokke, comandante del ejército en la reserva
llevada a cabo por Dennis Bernstein en Flashpoints (www.flashpoints.net/index.html).
10. Si Perle
considera adecuado referirse a un periodista importante como
el "execrable Robert Fisk" entonces se juega limpio
etiquetándole a él del mismo modo.
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