Uno de los carniceros de Sabra
y Chatila revela sus masacres
AFP
/ CSCAweb (www.nodo50.org/csca), 6 de abril de 2005
"Más
tarde se unió a la unidad 104, unidad de operaciones especiales
dentro de la milicia, recibiendo entrenamiento de combate en
Israel y al sur de Líbano. Hatem afirma haber visitado
clandestinamente Israel en mas de veinte ocasiones para encontrarse
con el jefe de la Seguridad General de Israel, el Shabak. 'Cobra'
fue asignado también a la guardia personal de Ariel Sharon,
entonces ministro de Defensa, en Líbano. Añade
'con orgullo' que Sharon nunca se sintió seguro en Líbano
salvo con él"...
Un libanes, criminal de guerra
implicado directamente en las masacres de Sabra y Shatila revela
horrendos crímenes cometidos en los setenta y ochenta
contra los refugiados palestinos.
En una entrevista con el diario
israelí Yedioth Ahronoth, Robert Hatem, conocido
como "Cobra", aseguró haber asesinado a casi
400 personas con sus propias manos, y haber tomado parte en el
asesinato de miles más.
Cobra aseguró que cuando
los interrogadores de los prisioneros declaraban a éstos
"disponibles", el los ejecutaba con una bala de su
Magnum, añadiendo que disfrutaba cuando sus víctimas
suplicaban por su vida, antes de que las descerrajara un tiro
en la cabeza.
Robert Hatem vive en Paris
desde 1997, después de que se le garantizara asilo temporal
gracias a su antigua relación con los servicios de inteligencia
franceses; el ministro de Exteriores francés se niega
a ofrecerle asilo permanente porque "mató a docenas
a sangre fría", alegando adhesión a la Cuarta
Convención de Ginebra, que dispone que una persona no
puede ser expulsada del país de acogida hacia otro país
donde pudiera enfrentar la pena de muerte.
"Cobra" fue el guardaespaldas
personal del trístemente célebre Eli Hobeika, durante
las décadas de los setenta y ochenta del pasado siglo,
momentos en los que proclamaba orgullosamente su participación
en las masacres de Tal Al Zaatar, así como en las de los
campos de refugiados de Sabra y Shatila.
Hatem se unió a las
milicias libanesas en 1975, donde cometió su primer asesinato
eliminando a un combatiente sudanés durante un tiroteo
cerca de la zona de Forn Al Shobak. De acuerdo con su confesión,
al dispararle sintió pánico como primera reacción,
pero más tarde perdió toda su humanidad y no encontraba
dificultades en seguir cometiendo crímenes.
Más tarde se unió
a la unidad 104, unidad de operaciones especiales dentro de la
milicia, recibiendo entrenamiento de combate en Israel y en el
sur de Líbano. Hatem afirma haber visitado clandestinamente
Israel en más de veinte ocasiones para encontrarse con
el Jefe de la Seguridad General de Israel, el Shabak.
De acuerdo con la entrevista
mantenida con Yedioth Ahronoth, "Cobra" fue asignado
también a la guardia personal de Ariel Sharón,
entonces ministro de Defensa, en Líbano. Añade
"con orgullo" que Sharon nunca se sintió a salvo
en Líbano salvo con el.
El criminal de guerra enumeró
sus numerosos crímenes en Lïbano, incluyendo el secuestro
de mujeres y chicas que eran del deseo de Eli Hobeika y los ataques
contra diplomáticos sirios e iraníes. Asegura haber
huido a París cuando los sirios le hicieron temer por
su vida.
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