No pretendo otra cosa que argumentar algunas observaciones y criterios en torno a algunos puntos de los abordados por Humberto Pérez, pues si vamos con nuestros argumentos a historiar sobre temas cruciales de los que fuimos participantes y a los que dedicamos nuestras vidas, entonces que cada cual presente su interpretación de los hechos, de sus causas y circunstancias sin olvidar las lecciones de la película Rashomon y que no se trata de una sola historia o de un monopolio de tesis, sino de muchas historias, condicionadas por el papel que cada cual desempeñó, su acceso a información, sus compromisos, actuación y prejuicios.