El 19 de abril de 1810 la población de Caracas desconoció a Vicente Emparan, recién nombrado por José Bonaparte, como Gobernador y Capitán General de Venezuela. Este acontecimiento, iniciado por la oligarquía criolla pero secundado por el pueblo, concentrado en la Plaza mayor de Caracas, fue el inicio del proceso de Independencia de Venezuela.

El 13 de abril de 2002 la movilización del pueblo consiguió la recuperación del Poder Popular que la oligarquía criolla, sirviendo a los intereses del neoliberalismo y valiéndose de mandos militares indignos, había secuestrado dos días antes, consumando un golpe de estado. La población se expresó y comunicó a través de emisoras de radio y televisión comunitarias, teléfonos móviles, internet, pintadas, cacerolazos y motoristas, auntoconvocándose para recuperar la televisora pública y sitiar las principales guarniciones del país y el palacio presidencial de Miraflores, exigiendo la liberación y el regreso del Presidente Chávez.

Antes, durante y después del golpe, el imperialismo no ha dejado de ensayar procedimientos para derrocar al Gobierno Bolivariano, siempre acompañados de campañas de desprestigio y de distorsión del Proceso.

Para conmemorar estos hechos históricos y profundizar en el conocimiento de la campaña mediática de intoxicación de la opinión pública, que desde España, Europa y los Estados Unidos se está orquestando contra Venezuela y los demás procesos populares de América, convocamos el 20 de abril, con el apoyo del Ateneo Republicano de Carabanchel, un cine-debate en el que proyectamos el documental Enjambre, las reglas han cambiado, dirigido por David Segarra y producido por Venezolana de Televisión y Guarataro Films.

Este documental desvela la aplicación contra Venezuela de la guerra de cuarta generación, guerra en red o guerra asimétrica, es decir, la guerra de manipulación mediante la utilización de los medios de comunicación y otros instrumentos que actúan sobre la opinión pública, usando técnicas capaces de crear matrices de opinión o percepción de supuestas realidades, para debilitar y desacreditar al enemigo y poder acabar con él, utilizando procedimientos en los que no se perciba la acción directa de quienes orquestan la conspiración.

El acto fue presentado y moderado por Elena Priego, militante de la Coordinadora Estatal de Solidaridad con Cuba (Madrid) e integrante de Plataforma Bolivariana de Madrid; mientras que el documental fue presentado por Olmo Romero, comunicador audiovisual que trabajó en el Departamento de Postproducción de Ávila TV (Caracas) y que en Venezuela colaboró, además de en éste, en documentales como Nuevas Caras, el mismo objetivo, Rebelión Radio Bemba o Carimba, marcada en tu piel.

Al acto habíamos invitado como ponente al historiador, analista y profesor de Sociología de la Universidad Central de Venezuela Vladimir Acosta, pero finalmente no pudo viajar a nuestro país. En su lugar contamos con un invitado de lujo: el Embajador de la República Bolivariana de Venezuela, Isaías Rodríguez, que durante los sucesos del 11 al 13 de abril de 2002 desempeñó un papel fundamental en la recuperación del Poder Popular.

Tras el debate, que se prolongó hasta más allá de las 10 de la noche, cerramos el acto con la actuación musical de nuestro compañero Juanjo Anaya, que interpretó cuatro temas característicos del cancionero de América Latina.