Butlletí
de la
Fundació d'Estudis Llibertaris
i Anarcosindicalistes
  La FELLA
Notícies, convocatòries
Publicacions
Contactar

 

Núm. 4    Primavera    1999     Sumari     <<<     >>>


El "asalto científico" de la biotecnología

Luis Andrés Edo

Cuando el economicismo tradicional (ese pretexto político, que nada tiene que ver con la economía social) se tambalea a la velocidad de la luz, poniendo en trance la estabilidad del Sistema, una especie de "nuevo oleaje científico" se halla dispuesto a sustituir las muletas sobre las que se sustenta el Poder.

El pasado 9 de marzo en el Congreso de los Diputados se decidía que en España se sigan desarrollando los cultivos agrícolas transgénicos.

Durante esos mismos días se celebraba en Barcelona un encuentro internacional de expertos y científicos, donde se denunciaba sin paliativos los efectos destructivos de la biotecnología sobre la biodiversidad de los cultivos agrícolas.

El método transgénico de simientes se viene realizando en laboratorio desde hace más de veinte años; en la actualidad esa biotecnología ha alcanzado una aplicación generalizada, con movimientos de libre comercio en el mundo que rebasan un volumen financiero de más de medio centenar de billones de pesetas, solo en el sector alimenticio.

Este fenómeno comercial es consecuencia de una metodología empresarial basada en la investigación para la elaboración artificial de simientes de cultivo agrícola, uno de los sectores de mayor crecimiento son las Empresas privadas de laboratorios, especializados para cultivos transgénicos.

La ya auto llamada "Industria Biotecnológica", en un despliegue público sin precedentes, está contraatacando a sus críticos, utilizando, o mejor dicho instrumentalizando, la "comunidad científica española", que ya se ha manifestado en favor de dicha industria, sentenciando que las citadas críticas no son más que "una guerra comercial". Guerra que, como por ejemplo en Inglaterra alcanza un carácter de auténtico "terrorismo empresarial", protagonizado por las multinacionales contra grupos y publicaciones ecologistas inglesas.

Durante más de un millar de millones de años la "ingeniería genética", en el terreno agrícola, se ha producido por un fenómeno natural de biodiversidad. La intromisión de un concepto economicista en cualquier investigación científica produce, inevitablemente, una deformación de la finalidad de esa investigación, que no puede, ni debe, tener otra que una finalidad social. La transgenética que nos ocupa, no tiene la honesta finalidad de suplir las necesidades contra el hambre, sino, exclusivamente, la de ganar dinero.

Kropotkin, ante Darwin y Husley

Este marasmo "científico", que sirve a los intereses de la alta finanza, está ahogando un fenómeno, aun minoritario y marginal, de un auténtico avance de la ciencia biológica molecular que, en un contexto hostil, está superando barreras seculares que la han venido estancando hasta ahora.

DarwinUna de estas barreras es el criterio defendido por Darwin, que aun prevalece hasta hoy, con la vulgarmente llamada "ley del más fuerte", calificada como "el motor del desarrollo y supervivencia de las Especies".

Sobre estas teorías, y tras un ensayo del darwinista T. H. Husley, ya polemizó en su día Pedro Kropotkin, defendiendo su tesis de que el motor de ese desarrollo era la solidaridad entre los individuos de una misma Especie.

Esta polémica protagonizada por Kropotkin, mantenida en diversa prensa durante varios años y especialmente a partir de 1890 en la Revista especializada The Nineteenth Century, fue copilada después en una obra que tomó como titulo "El Apoyo Mutuo".

Kropotkin, basándose en observaciones experimentales, se avanzaba de un siglo a la investigación analítica de hoy, por la que se demuestra científicamente, que el comportamiento celular y molecular en el contexto de un ente, se desenvuelve cooperativamente. El deterioro de esa cooperación se traduce en el deterioro del ser.

Queremos destacar la referencia a Kropotkin, aparecida en el nº61 "Bulletin d'Information" du 2éme U.R. CNT, Paris, que de alguna forma rompe con el incomprensible silencio, sobre esta noticia, de nuestros especialistas libertarios, en materia teórica y cultural. Dicho "Bulletin" se hace eco de los trabajos de disciplina matemática, de dos investigadores, Martín Nowac, de la Universidad de Viena y Karl Sigmund de Oxford, que, un siglo después descubren que Kropotkin tenia razón con su teoría del apoyo mutuo.

Mientras, una nueva percepción científica de la realidad se viene abriendo paso en el terreno de la biología, con análisis que han llegado a una síntesis prácticamente completa de los nuevos descubrimientos, en una perspectiva englobadora, con el reconocimiento de la cooperación y la interdependencia entre las formas de vida, como aspectos centrales de la evolución y la supervivencia de las Especies.

En efecto, una de la más extraordinaria síntesis, es la que nos ofrece el físico Fritjof Capra en su última obra "La Trama de la Vida", desafiando las visiones convencionales de la evolución y organización de los sistemas vivos, con un criterio que podría resumirse con la frase "La vida no conquistó el Globo con combates, sino con alianzas", de un análisis de la bióloga Linn Margulis, una de las principales investigadoras actuales de esta nueva perspectiva científica.

"Desde hace miles de millones de años -nos dice Capra- las habilidades combinadas de los sistemas vivos para reproducirse y generar novedad, condujeron naturalmente a la evolución biológica; un despliegue creativo de vida que sigue en un ininterrumpido proceso desde entonces....., sin romper jamás el patrón básico de sus redes autopoiésicas ( creadoras)".

Es decir, sin romper, durante miles de millones de años, el elemento transversal de los sistemas vivos: la cooperación.

Sin embargo, estos trabajos investigativos, de indudable interés e importancia, quedan inconclusos porque las decenas de investigadores que se inscriben en esta nueva perspectiva de la ciencia, no se comprometen, como lo hizo Kropotkin, a dar el salto a la transferencia social de sus descubrimientos.

La ocasión es suficientemente oportuna para terminar con una crítica a nuestros teóricos actuales de anarquismo que, salvo honrosas y marginales excepciones, vegetan patinando con las imágenes históricas, en una estancadora invariancia sobre la Idea.


La FELLA    Notícies, convocatòries    Publicacions    Contactar    Inici