Comunicado del CSCA ante la
amenaza de eliminación del presidente Arafat y la escalada
militar de Israel contra el pueblo palestino y sus organizaciones
10 de septiembre de 2003, Comunicado del CSCA
CSCAweb (www.nodo50.org/csca)
"Las amenazas de Israel
contra Arafat, al igual que sus permanentes agresiones contra
el pueblo palestino, explicitan una vez más la impunidad
vergonzante con la que el Estado de Israel actúa frente
al pueblo palestino, víctima colectiva de la ilegalidad
permanente de la ocupación militar israelí desde
hace más de 37 años y de la represión y
el castigo sistemáticos impuestos contra él por
ejercer su leítimo derecho a resistir."
Ante
las últimas amenazas de aniquilación física
contra el presidente palestino Yaser Arafat por orden del gobierno
de Israel, dadas a conocer en el día de hoy por fuentes
diplomáticas de NNUU, y la escalada militar contra el
pueblo palestino y sus organizaciones, el Comité de Solidaridad
con la Causa Árabe expresa lo siguiente:
1. Su condena sin paliativos por cuanto tales amenazas constituyen
un acto criminal de agresión de un Estado y su gobierno
contra un presidente democráticamente elegido en las elecciones
presidenciales de 1996 y, por tanto, representante legítimo
del pueblo palestino. La voluntad expresa del Estado de Israel
de aniquilar físicamente a Arafat es un atentado contra
la libre determinación palestina y los principios de soberanía
y democracia de su pueblo.
Las amenazas contra Arafat representan la vía expeditiva
que el Estado de Israel está dispuesto a tomar para forzar
un definitivo cambio de régimen en la dirección
de la Autoridad Palestina (AP) favorable a sus intereses tras
haberse puesto en evidencia con la dimisión del primer
ministro Mahmud Abbas, Abu Mazen, y el nombramiento para
el mismo cargo de Ahmad Quraya, Abu 'Ala, que la AP sigue
controlada por su presidente Yaser Arafat y no sometida a las
directrices que Israel y EEUU pretenden imponerle.
El gobierno de Israel, arropado por el respaldo incondicional
de la Administración de EEUU y ungido por la sumisión
de la Unión Europea (UE), de Rusia y de NNUU (junto a
EEUU, integrantes del denominado Cuarteto) a la política
estadounidense, pretende operar, en el contexto de la inmoral
de la llamada "Guerra global contra el terrorismo"
decretada por Bush a nivel internacional tras el 11 de septiembre
de 2001, un expeditivo y definitivo cambio estratégico
en la dirección de la AP con el fin de situar en ella
una nueva interlocución palestina acomodada a las exigencias
y proyectos de Israel, que acabe definitivamente y con medidas
represivas propias con la Intifada popular, con la resistencia
armada palestina y, esencialmente, con el Movimiento Nacional
Palestino, máxima expresión de las reivindicaciones
y aspiraciones nacionales palestinas por un Estado de Palestina
cuyos principios de independencia, soberanía y democracia
contravienen frontalmente los designios del proyecto fascista
que el sionismo pretende imponer a través de Israel en
toda Palestina.
2. Su denuncia por cuanto estas amenazas suponen la culminación
de la política de agresión que el gobierno de Ariel
Sharon ha llevado a cabo desde su acceso al poder contra el pueblo
palestino en su conjunto y, en particular, contra la figura de
Arafat, como su símbolo más reconocido. Desde marzo
de 2001, el presidente Arafat ha quedado sometido al más
humillante cerco en la Mukata -residencia oficial de la
Autoridad Palestina en Ramala (Cisjordania ocupada)- tras haber
sido objetivo militar directo de los ataques perpetrados hasta
su destrucción casi total y amenazado públicamente
de muerte o de deportación durante los meses que ha durado
su secuestro vigilado y mantenido por el ejército de ocupación
israelí hasta la actualidad, con amenaza directa para
su vida.
Igualmente, el CSCA denuncia la política de asesinatos
selectivos (el último esta misma tarde contra el dirigente
de Hamas Mahmud Al Zahhad, en Gaza, que ha causado tres víctimas
mortales y 30 heridos) aplicada sistemáticamente por Israel
contra los dirigentes palestinos de las formaciones políticas
que apoyan el derecho a la resistencia armada palestina.
3. Las amenazas de Israel contra Arafat, al igual que sus
permanentes agresiones contra el pueblo palestino, explicitan
una vez más la impunidad vergonzante con la que el Estado
de Israel actúa frente al pueblo palestino, víctima
colectiva de la ilegalidad permanente de la ocupación
militar israelí desde hace más de 37 años
y de la represión y el castigo sistemáticos impuestos
contra él por defender su derecho a resistir en la Intifada
desde septiembre de 2000; frente a su más alto representante
institucional, el presidente de la OLP, así como frente
a la comunidad internacional y el Derecho Internacional.
Los gobiernos de la UE, en su afán de situarse vasallamente
a los pies de EEUU -como el español, el británico
o el italiano- o con el fin de corregir sus diferencias con la
Administración Bush tras la guerra contra Iraq -como Francia
y Alemania- para obtener mejores contrapartidas en el arreglo
final a la gestión de la ocupación, han abandonado
a su suerte al pueblo palestino, a sus instituciones y a sus
representantes, al amparo del denominado Cuarteto en el
que, junto a EEUU, NNUU y Rusia, pretenden hacer frente común
para imponer una salida de rendición al pueblo palestino
y a sus formaciones políticas a las que se criminaliza
oficialmente como terroristas por defender y aplicar el
derecho legítimo a la resistencia.
Igualmente, los inmorales regímenes árabes siguen
operando en contra de la causa palestina en particular y de los
intereses árabes en general, al maximizar el respaldo
a la "Hoja de ruta" y a Israel para poner fin a la
Intifada y minimizar la humillación de Arafat y del pueblo
palestino; al aceptar los planes de ordenamiento regional neocolonial
que EEUU e Israel pretenden imponer en la zona, acomodándose
a ellos, y obviar la ocupación del espacio árabe
de Iraq y Palestina. Significativo es el hecho de que la Liga
de Estados Árabes haya aceptado esta semana reconocer
al "gobierno" iraquí emanado del Consejo Gubernativo,
una instancia creada por los ocupantes.
4. Finalmente, el CSCA llama a las organizaciones sociales
y políticas comprometidas con la causa del pueblo palestino
y con la defensa de sus derechos nacionales, incluido el de resistir
por todos los medios a la impunidad y brutalidad de la ocupación
israelí, a estar atentos ante cualquier acción
que el ejército israelí pueda llevar a cabo contra
la Mukata y contra Yaser Arafat para movilizarse. Igualmente,
el CSCA reclama el respaldo al pueblo palestino y la defensa
de su unidad nacional basada en los principios democráticos
como única vía para desafiar los retos que contra
él se atenazan.
Comité de Solidaridad con la Causa Árabe
10 de septiembre de 2003
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