Los presos palestinos internos en la
prisión israelí de Ashkelon convocan una nueva huelga de hambre
en solidaridad con los presos menores de edad encarcelados en Telmond y
contra la prohibición de recibir visitas de familiares
Comunicado de Adamir (Asociación de Apoyo a los Presos Palestinos)
25 de marzo de 2001
(Traducción del CSCA)
Los presos palestinos internos en la prisión israelí de
Ashkelon anunciaron la semana pasada la convocatoria de una huelga de hambre
a partir del domingo 25 de marzo del 2001. La huelga se desarrollará
una vez por semana cada domingo en protesta por la política de la
Administración de Prisiones de prohibir las visitas familiares a
los presos. Normalmente, a las familias de presos procedentes de Cisjordania
que intentan visitar a sus hijos en las prisiones israelíes se les
niega ese derecho a menos que viajen en autobuses de la Cruz Roja. Desde
hace unas semanas, las autoridades militares israelíes prohiben a
los autobuses de la Cruz Roja recoger a familiares de presos en Cisjordania;
a aquellas familias que han intentado alcanzar las prisiones por su cuenta
se les ha denegado la entrada incluso cuando poseían el permiso administrativo
en regla.
Los prisioneros reclaman que la Cruz Roja ejerza alguna presión
sobre la Administración de Prisiones israelíes para que sus
autoridades permitan las visitas de familiares de Cisjordania. Desde el
comienzo de la Intifada el pasado septiembre, las familias de Cisjordania
tienen prohibido visitar a sus presos en las cárceles de Israel pese
a que la Cruz Roja ha estado coordinando visitas familiares desde Gaza sin
ningún problema.
La huelga de hambre semanal se convoca también como mecanismo
de presión ante las autoridades penitenciarias de Telmond para que
los presos palestinos menores de edad sean separados de los presos comunes
israelíes. Las autoridades de la prisión han rechazado esta
solicitud de separación a pesar de las demandas efectuadas por los
propios presos y por sus abogados.
La Asociación Adamir de apoyo a los presos palestinos expresa
su gran preocupación ante esta situación que considera extremadamente
peligroso para el estado de los detenidos palestinos menores de edad. La
ubicación de presos palestinos menores con criminales israelíes
adultos es contraria los Mínimos Requeridos en el Tratamiento de
Prisioneros de Naciones Unidas (NNUU) (Standard Minimun Roles) adoptado
por la Resolución del Consejo Económico y Social de NNUU 663C
(XXIV), el 31 de julio de 1957, que constituye la guía orgánica
legal para interpretar los principios dependientes de documentos como la
Declaración Universal de los Derechos Humanos y la Convención
Internacional sobre Derechos Políticos y Civiles.
(...)
El mantenimiento en prisión de presos menores con presos comunes
adultos israelíes en el periodo de la actual Intifada ha dado lugar
a las siguientes violaciones:
- Los menores palestinos detenidos han sido golpeados, escaldados con
agua hirviendo y cortados con navajas.
- Existen informes que demuestran que se han dado casos de abuso sexual
contra los menores por parte de los presos comunes israelíes los
cuales no han sido investigados por las autoridades de la prisión.
- Los "privilegios" de tarjetas telefónica, cigarrillos,
zapatos y uso de la cantina han sido revocados.
- Los periódicos, las revistas y la ropa de deporte han quedado
prohibidos.
- Las visitas de familiares han sido prohibidas desde el comienzo de
la Intifada el pasado septiembre de 2000. Desde entonces, los permisos de
visitas únicamente se expidieron el día 10 de febrero durante
un periodo de cuatro días después del cual fueron prohibidas
de nuevo hasta la actualidad.
- La práctica de reducción de condena tras el cumplimiento
de los 2/3 del periodo de detención -práctica llevada a cabo
antes de la Intifada- ha sido cancelada.
- En un periodo reciente, Adamir ha documentado la re-introducción
de las prácticas de tortura que quedaron legalmente prohibidas por
el Tribunal Supremo de Israel en septiembre de 1999. (...)
Addameer ha documentado un incremento extenso del número de detenidos
la mayor parte de los cuales están encarcelados en los centros de
detención. Las detenciones tienen lugar en los cruces fronterizos
(checkpoints) y en las mismas viviendas palestinas que están
situadas en zonas bajo control israelí. Los arrestos en las viviendas
van acompañados sistemáticamente del destrozo del mobiliario
y de los objetos domésticos. (...)
Adamir ha efectuado 14 visitas y ha hallado 32 casos de detenidos en
centros de detención entre el 20 de febrero y el 20 de marzo de 2001.
La Administración de Prisiones ha prohibido las visitas a los abogados
de muchos de los detenidos durante periodos de 10 a 30 días con el
propósito de presionar a los detenidos negándoles cualquier
tipo de contacto humano excepto con el del interrogador.
Los abogados reciben la comunicación de que el permiso de visita
a los detenidos ha quedado invalidado por un periodo de 2 ó 3 días.
Cuando los abogados intentan la visita después de ese periodo se
les comunica que el periodo de cancelación del permiso de visita
se ha extendido por otros 2 ó 3 días más. El uso de
este tipo de ordenamiento de prohibición de dos en dos días
impide a los abogados apelar la orden al Tribunal Supremo.
Los Servicios Generales de Seguridad de Israel han incrementado la practica
de ingresar a los presos palestinos en celdas de detención con colaboracionistas.
Los colaboracionistas aprovechan esta situación para tratar de obtener
información de los detenidos presentándose a ellos como activistas
organizados en el exterior de la prisión a fin de ganarse su confianza.
La práctica del "shabeh" (posición de abuso,
un método de tortura en el que a los presos se les mantiene atados
en dolorosas posiciones, normalmente sentados en pequeñas sillas
cuyas patas tiene las patas cortadas a diferente altura y en las que se
les obliga a permanecer sentados por extensos periodos de tiempo) es asimismo
utilizada durante los periodos de interrogación por periodos de más
de 24 horas.
La Asociación de Apoyo a los Presos Adamir
solicita:
1.- Que se ponga fin inmediato a la practica de prohibir asistencia legal
a los detenidos palestinos;
2.- Que se concedan los permisos de vista a las familias procedentes
de Cisjordania;
3.- Que se ponga fin a las practicas de tortura durante los periodos
de interrogatorio;
4.- La separación de los detenidos palestinos menores de edad
de los presos comunes (y adultos) israelíes.
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