Encuesta elaborada por la Universidad
palestina de Birzeit sobre el impacto de los cierres impuestos por Israel
en las condiciones de vida del pueblo palestino
(Presentado y traducido por el Comité
de Solidaridad con la Causa Árabe, marzo de 2001)
Presentación
La Universidad palestina de Birzeit desarrolla dentro de su Programa
de Estudios sobre Desarrollo (PED) una labor de investigación
sobre la realidad socio-económica de los Territorios Ocupados (TTOO)
basada en el análisis de campo mediante encuestas de opinión
dirigidas a la población palestina. A la labor académica inherente
a su actividad se suma el análisis político de sus resultados.
Desde el pasado septiembre, cuando comenzó la segunda Intifada, el
PED de la Universidad de Birzeit ha desarrollado tres estudios sobre el
impacto de los cierres impuestos por Israel en las condiciones de vida de
la población palestina de los TTOO. El que sigue a continuación
es el tercero de esa serie publicado el 19 de febrero de 2001. En él
se valoran las opiniones palestinas respecto a cuestiones diversas que abarcan
desde la actuación de las instituciones dependientes de la Autoridad
Palestina (AP), al boicot a los productos israelíes, pasando por
la cuestión, ampliamente debatida en estos días, del colaboracionismo
con Israel (espionaje) o la pena de muerte.
Del análisis de los resultados de la encuesta sobresale la constatación
de que la población palestina está haciendo frente a una situación
extrema de dificultad y penuria colectiva. El empobrecimiento masivo de
la población se debe a la pérdida de ingresos en las familias
(hasta un 73%). Ello está en relación directa con las consecuencias
de los cierres impuestos por Israel: la población palestina sigue
sin poder acceder a sus lugares de trabajo (en el interior de Israel o en
los TTOO). A pesar de haberse puesto en marcha mecanismos de recepción
de asistencia (árabes e internacionales) dos tercios de las familias
palestinas subsisten con un presupuesto de 300 dólares al mes.
El sistema educativo se ha paralizado (11% de las familias han visto
denegado el acceso a los centros de educación de algún miembro
de la familia); de igual modo, el 42% de la población está
sufriendo serias dificultades para acceder a los servicios médicos
y sanitarios. Esta situación es doblemente gravosa si se considera
que más del 75% admite tener problemas "psicológicos
y emocionales" derivados de la tensión y la violencia cotidiana.
En el sector de la infancia y la adolescencia se ha detectado que un 69%
sufre traumas psicológicos.
El coste que la Intifada está teniendo en el interior de los TTOO
suscita entre la población palestina una evaluación crítica
del liderazgo palestino y de las instituciones creadas al amparo de los
Acuerdos de Oslo. El 43% de la población reclama un cambio en el
gabinete ministerial de la AP, mientras el 48% considera que la AP no ha
hecho lo suficiente para combatir la corrupción interna y sólo
un 38% piensa que el equipo negociador de la AP vela por los intereses colectivos
palestinos.
Mientras aumenta el distanciamiento entre la población y el liderazgo
palestino y sus instituciones, disminuye la identificación con todas
las facciones políticas palestinas: el 48% de la población
no apoya en estos momentos a ninguna fuerza política. Asimismo, el
53% considera que no hay diferencia entre la AP y el liderazgo de la Intifada
representado en Fatah. La consideración de que el 53% de la población
respalda los ataques suicidas contra ciudades israelíes perpetrados
por los movimientos islamistas confirma la tendencia en aumento de apoyo
a dichos movimientos (particularmente a Hamas, con un 22%) mientras el respaldo
a Fatah se ha estancado en un 26%. Es en la Franja de Gaza -donde los niveles
de empobrecimiento, marginación y retraso son más elevados-
donde el nivel de popularidad de Fatah y de Hamas se ha igualado por primera
vez en la historia. (en un 24%).
Los resultados de la encuesta de la Universidad de Birzeit señalan
una tendencia preocupante: la frustración y el retroceso material
que afecta a la población palestina en la última década
-en aumento desde que Israel estableciera la intensificación de la
política de cierres como medida de represión colectiva
contra la Intifada el pasado septiembre-, combinados con la desconfianza
creciente en el liderazgo palestino está conduciendo a una modificación
de las tendencias políticas populares tanto respecto a la Intifada
y las estrategias a seguir, como en el apoyo lento pero creciente a los
movimientos islamistas.
CSCA, marzo de 2001
Universidad de Birzeit
Programa de Estudios sobre Desarrollo
Estudio núm. 3, 19/02/2001
El impacto de los cierres impuestos
por Israel en las condiciones de vida palestinas
Fecha de publicación: 19 de febrero
de 2001
Fecha de la investigación: 8 al 10
de febrero de 2001
Extensión en personas de la muestra:
1.200 palestinos de Cisjordania y Gaza
Nº de investigadores de campo: 62 (mujeres
y hombres)
Nº de localidades para la muestra: 75
Porcentaje de error: (+ ó -3)
Antecedentes
La investigación comenzó dos días después
de que tuvieran lugar las elecciones presidenciales en Israel. Dichas elecciones
dieron como resultado la victoria de Ariel Sharon, líder de la derecha
del Partido Likud.
La encuesta se desarrolló bajo las condiciones de cierre completo
de Cisjordania y Gaza.
La tasa de desempleo y de pobreza eran ya elevadas en esas fechas.
La violencia continua: el número de palestinos asesinados desde
el comienzo de la Intifada ha aumentado a 400.
Las negociaciones entre palestinos e israelíes se han paralizado
sin que se detecten signos de reanudación.
Ente la sociedad palestina se mantiene el debate en relación con
cuestiones relativas al colaboracionismo con Israel (espionaje), la pena
de muerte, el boicot a los productos israelíes y la actuación
de las instituciones dependientes de la Autoridad Palestina (AP). Dos palestinos,
acusados de colaboracionismo con los servicios de inteligencia israelíes
en el asesinato de dos compatriotas palestinos han sido ejecutados (en público)
por la AP.
Principales resultados
1. El impacto de los cierres impuestos por Israel
sobre las condiciones de vida palestinas
- 73% de las familias palestinas han visto reducida su renta durante
los pasados cuatro meses.
- 27% de las familias palestinas han perdido completamente su fuente
de ingresos.
- Dos tercios de las familias (independientemente del tamaña familiar)
manejan una renta mensual que no excede los 300 dólares USA.
- En Cisjordania, el 46% de los encuestados afirman que al menos un miembro
de sus familias ha perdido completamente su trabajo. Además, en un
25% de las familias, al menos un miembro de ha perdido parcialmente su trabajo.
- En Gaza, el 54% de los encuestados afirman que al menos un miembro
de la familia ha perdido completamente su trabajo.
- El 53% de los residentes en campamentos de refugiados afirman que al
menos un miembro de su familia ha perdido completamente su empleo, en comparación
con el 46% de los que viven en áreas rurales y el 43% de los residentes
en ciudades.
- El 75% de los entrevistados sufren "dificultades psicológicas
y emocionales" como consecuencia de las privaciones económicas
y políticas durante la Intifada.
- Los adolescentes y los niños son el sector de población
más afectado por el sufrimiento de traumas psicológicos. El
69% de los que tienen entre 5 y 14 años de edad están haciendo
frente a traumas psicológicos. En Gaza el porcentaje alcanza el 72%.
- Las mujeres sufren traumas psicológicos en mayor proporción
(87%) que los hombres (62%).
- 11% de los encuestados manifiestan que al menos un miembro de sus familias
se han visto privados de asistir a la escuela (a la universidad). Además,
el 60% manifiesta que al menos un miembro de su familia ha sido parcialmente
privado de acceder a la educación.
- El 42% de la población ha experimentado dificultades adicionales
para acceder a los servicios médicos o sanitarios. Ello es así
para el 50% de los residentes rurales de Cisjordania.
- El 77% de los encuestados se sienten inseguros respecto a su estado
de bienestar y el de sus familias y de sus propiedades.
- 28% de las familias palestinas han recibido ayuda material -económica
o en especie- durante el periodo de la Intifada. El porcentaje es el doble
para Gaza (41%) que para Cisjordania (20%).
- El 84% de las familias palestinas han tenido que reducir sus gastos
para poder hacer frente a las dificultades de los pasados cuatro meses.
Más del 55% se han visto obligadas a gastar sus ahorros y el 43%
ha tenido que solicitar un crédito. En el 31% de las familias de
Gaza, las mujeres han tenido que vender su dote. El 52% de las familias
de Gaza ha tenido que solicitar un crédito para poder salir adelante.
- Sólo el 12% de los encuestados opina que los países árabes
han cumplido su compromiso de asistir a la población palestina. En
contraste, el 58% opina que dichos países no han cumplido sus compromisos.
- El 56% de los encuestados percibe que la asistencia no está
siendo distribuida a aquellos que más lo necesitan. El 16% considera
que la distribución de la asistencia es justa y el 19% cree que es
justa "hasta cierto punto". La insatisfacción por el modo
en que la ayuda se está repartiendo es más alta en Cisjordania
(60%) que en Gaza (50%).
- El análisis palestino sobre las "condiciones internas"
muestra una marcada división de opiniones, con un 37% que consideran
que "el caos y la violencia se incrementan" en sus comunidades.
En contraste, un 40% cree que no es así y un 19% piensa que ello
es cierto "hasta un cierto punto". El sentimiento de vivir "entre
el caos y la violencia" es más alto en Cisjordania (41%) que
en Gaza (29%).
- 17% de los encuestados abandonarían el país para ir a
vivir al extranjero si tuvieran oportunidad. El deseo de emigrar es mucho
más alto entre los palestinos jóvenes; 38% de los varones
entre 18 y 22 años de edad emigraría si tuviese la oportunidad.
La tasa de mujeres que emigrarían (de edad comprendida entre los
23 y los 27) es del 28%
2. La Intifada y el proceso de paz
- El 12% de los encuestados considera que el nuevo gobierno israelí
(liderado por Ariel Sharon) se comprometerá en alcanzar un acuerdo
de paz global con los palestinos. El 13% cree que quizá se comprometa
y el 64% cree que no comprometerá en absoluto.
- El 70% apoya el mantenimiento de las negociaciones hasta que se alcance
un acuerdo final.
- El 60% apoya una paz duradera entre palestinos e israelíes basada
en las Resoluciones de Naciones Unidas (NNUU). El 7% lo apoya "hasta
cierto punto" y el 27% se opone a ello.
- El 27% cree que Israel reconocerá el derecho de los refugiados
palestinos al retorno a sus tierras perdidas en 1948.
- El 25% manifiesta que aceptaría un acuerdo firmado por el actual
liderazgo. El 67% contesta que lo decidiría sólo cuando se
conociesen los detalles de dicho acuerdo.
- El 38% considera que los negociadores palestinos están trabajando
en beneficio del pueblo palestino. El 19% están de acuerdo con ello
"hasta cierto punto" y el 32% no están de acuerdo.
- El 44% se muestra satisfecho con el desarrollo de la Intifada; el 20%
está satisfecho "hasta cierto punto" y el 33% está
insatisfecho.
- El 17% considera que el nuevo presidente de EEUU, George Bush será
más equilibrado en relación con el conflicto palestino-israelí
que su predecesor Bill Clinton. El 58% está convencido de que no
habrá cambio alguno. El 25% no se decide.
3. Operaciones militares
- El 53% de los encuestados apoyan los ataques suicidas u otros tipos
de ataques contra civiles dentro de las ciudades israelíes, mientras
el 40% se opone a cualquier ataque. La oposición a los ataques suicidas
es más elevada en Cisjordania, donde la población se divide
entre un 47% que los apoyan y un 44% que se opone. El apoyo a los ataque
suicidas es mucho más elevado en Gaza, donde alcanza el 64%, con
frente a un 33% que se opone.
- El 40% de los que apoyan los ataques militares en general son partidarios
de que vayan dirigidos exclusivamente contra objetivos militares y colonos
israelíes.
4. Boicot a los productos israelíes
- El 91% de los encuestados ha oído hablar de las campañas
impulsadas para boicotear los productos israelíes. El 57% cree que
tal boicot podría llevarse a cabo. El 74% compra ahora menos productos
israelíes que antes de la Intifada.
5. La pena de muerte
- El 66% de los encuestados creen que todos los ciudadanos, incluso los
acusados de colaboracionismo con Israel, deben tener el dercho de ser juzgados
y de apelar su sentencia. En contraste, el 25% se manifiesta contrario a
esta opinión.
- Preguntados sobre si la pena de muerte debería imponerse sobre
aquellos [palestinos] que colaboran con Israel en el asesinato de compatriotas
palestinos, el 85% afirma apoyar ese castigo frente al 11% que se opone.
- El 77% considera que la pena de muerte es disuasoria para evitar que
otros colaboren con Israel.
- Sólo un tercio de los encuestados considera que los palestinos
que fueron ejecutados constituían un peligro para la causa palestina.
En contraste, el 53% considera que no representan el más mínimo
peligro para la causa palestina. En Gaza sólo el 25% considera que
los ejecutados eran los que más merecían ese castigo.
- Lospalestinos consideran que la capacidad de los servicios de inteligencia
israelíes (Mosad) para manipular a compatriotas palestinos en tiempos
de dificultades económicas es la causa principal que conduce al colaboracionismo.
6. Evaluación de las Instituciones
- El 47% de los encuestados evalúa la actuación del Presidente
Yaser Arafat como "positiva". El 28% evalúa su actuación
como "justa" ("Justa" equivale a un término medio
entre positiva y negativa), mientras que el 15% otorga a su actuación
una evaluación negativa. El 52% de los encuestados de Gaza dan a
la actuación de Arafat una valoración positiva, comparada
con el 44% en Cisjordania.
- El 28% considera que la AP está haciendo lo suficiente para
combatir la corrupción entre sus filas. Por contraste, el 48% considera
que la AP no está haciendo lo suficiente. El 21% no sabe o no contesta.
- El 43% cree en la necesidad de reemplazar al actual gabinete ministerial
de la AP y a la dirección de la mayor parte de las instituciones
gubernamentales. El apoyo al cambio es mayor en Gaza (50%) que en Cisjordania
(38%). En ambas regiones, el 38% piensa que no hay necesidad de efectuar
cambios.
- El 21% evalúa la actuación del Consejo Legislativo Palestino
(CLP) durante la Intifada como "positivo". El 34% cree que dicha
actuación es "justa" y el 43% considera que es "negativa".
- El 48% cree que los servicios de seguridad de la AP están cumpliendo
su función en la protección de los ciudadanos palestinos.
- El 81% considera que aquellos acusados de corrupción deben ser
juzgados antes de ser castigados. Sólo el 15% afirma que "la
calle palestina" debería ser quien les juzgase.
- El 52% de encuestados evalúa el papel de las facciones islamistas
(como Hamas y Yihad Islámica) en la Intifada es "satisfactorio".
El 30% considera ese papel como "normal" y el 10% lo valora como
"insatisfactorio". La satisfacción con la actuación
de las facciones islamistas alcanza un 63% en la Franja de Gaza frente a
un 45% en Cisjordania.
- El 53% considera que Fatah y la AP son "una misma cosa";
en Gaza el porcentaje es del 57%. En contraste, el 27% de los encuestados
de Gaza y Cisjordania piensan que Fatah es independiente de la AP, mientras
el 4% cree que Fatah forma parte de la oposición.
- El 21% cree que los ministros e instituciones de la AP están
efectivamente al servicio del pueblo.
- El 30% cree que sólo sirven al pueblo "hasta cierto punto"
y el 36% cree que no son eficientes sirviendo al pueblo.
- El 60% dice estar satisfecho con los servicios actuales de recogida
de basuras.
- El 47% dice estar satisfecho con el control de tráfico en las
ciudades y en los pueblos.
- Si hoy se celebrasen elecciones independientes a la presidencia, el
52% se mostraría "indeciso" o no votaría. Del 48%
restante (que si sabría a quien votar), el 28% lo haría por
Yaser Arafat; el 12% por el Sheij Ahmed Yassin y el 9% votaría por
haider 'Abdel Shafi. El apoyo a Yaser Arafat es más alto en Gaza
(34%) que en Cisjordania (24%).
- El mayor grupo de palestinos (48%) no apoya ninguna de las facciones
políticas existentes. El resto se encuentra dividido como sigue:
Fatah (26%); Hamas (18.5%); Yihad Islámica (4.3%); Frente Popular
para la Liberación de Palestina (FPLP, 2.3%).
- En Gaza, sin embargo, por primera vez en la historia, Fatah y Yihad
reciben el mismo porcentaje de apoyo (24% cada una de las facciones), mientras
que en Cisjordania el apoyo a Fatah es todavía mayor (27%) que a
Hamas (15%).
7. La educación como factor más
decisivo en la configuración de las actitudes
- Los encuestados con mayor grado de estudios y formación se muestran
menos inclinados a apoyar el mantenimiento de las negociaciones que los
iletrados. Mientras que el 76% de éstos apoyan el mantenimiento de
las negociaciones, sólo el 61% de los graduados lo hacen (se entiende
por "graduados" a los licenciados universitarios, mientras que
"los iletrados" se refiere a los analfabetos).
- El 50% de los graduados apoyan una paz duradera con Israel basada en
las Resoluciones de NNUU, frente al 71% entre los iletrados.
- El 70% de los graduados considera que el actual presidente de EEUU
no diferirá de su predecesor, mientras el 50% de los iletrados comparte
esa convicción.
- Los graduados son menos partidarios de la pena de muerte por colaboracionismo
con Israel; el 20% de ellos se opone, frente al 11% entre los iletrados.
- Los graduados apoyan más el derecho de cualquier palestino (incluso
acusado de colaboracionismo) a apelar al Tribunal Supremo, con un 80% de
apoyo frente a un 62% entre los iletrados.
- Únicamente el 20% de los graduados considera que los actuales
equipos negociadores palestinos representan bien los intereses palestinos,
frente a un 50% que así lo piensa entre los iletrados.
- El 50% de los iletrados se manifiesta satisfecho con el desarrollo
actual de la Intifada; frente a sólo un 27% entre los graduados.
- La insatisfacción con la actuación de los países
árabes respecto a la donación de ayudas es mayor en los graduados
(70%) que en los iletrados (49%).
- El 34% de la población garduada se muestra satisfecha con el
reparto de los fondos y de la ayuda alimentaria, frente al 16% de los iletrados.
- Los sectores iletrados y los más pobres son los que están
soportando las mayores dificultades a la hora de conseguir acceso a los
servicios médicos, como resultado del cierre actual impuesto por
Israel.
- El 50% de los iletrados deben hacer frente a problemas para acceder
a dichos servicios médicos, frente al 32% entre los graduados.
- El 65% de los graduados considera que ya es hora de cambiar el gabinete
ministerial palestino y la dirección de las instituciones gubernamentales,
frente a un 26% que comparte esta idea entre los iletrados.
- El 63% de los graduados cree que Fatah y la AP es "una misma cosa",
frente a un 47% entre los que tienen menos formación.
8. Variaciones entre Cisjordania y la Franja
de Gaza
- Los resultados expuestos anteriormente revelan que la actual crisis
está generando mayor homogeneidad en el estado de la opinión
pública palestina entre si comparamos Cisjordania y Gaza. No hay
diferencias sustanciosas en la mayor parte de las cuestiones planteadas.
Sin embargo, algunos indicadores muestran que los encuestados de Gaza se
están viendo progresivamente más afectados en la privación
de sus derechos civile:
- Todos los indicadores muestran que las dificultades económicas
en Gaza son mayores que en Cisjordania. En Gaza hay mayor número
de personas que han perdido sus empleos y mayor número de las que
han perdido toda fuente de ingresos. Ello, ciertamente, se explica por el
hecho de que los residentes de Gaza, más que los de Cisjordania,
dependen del trabajo en Israel para obtener una fuente de ingresos.
- El apoyo a los ataques contra civiles israelíes es más
elevado en Gaza qu en Cisjordania.
- El apoyo a Hamas es mayor en Gaza que en Cisjordania. Por primera vez,
el respaldo a Hamas en Gaza es igual que el respaldo a Fatah. La satisfacción
respecto a la actuación de las facciones islamistas es mucho mayor
en Gaza que en Cisjordania.
- El apoyo a la idea de remplazar el actual gobierno de la AP es también
más elevado en Gaza que en Cisjordania.
- Frente a ello, sin embargo, el apoyo a Yaser Arafat (y la evaluación
de su actuación) es mayor en Gaza que en Cisjordania.
9. Una generación perdida
- Los datos muestran la existencia de una extensa generación perdida.
Una cultura política joven está tomando lugar y varía
drásticamente en su forma respecto a la de sus mayores. Los grupos
de edad entre 16-17 años y 18 y 22 son los más "radicales"
en sus puntos de vista respecto a la mayor parte de las cuestiones planteadas,
un signo de decepción y de voluntad de cambio.
- El 31% entre el grupo de edad de 16-17 años se opone a mantener
las negociaciones hasta alcanzar un acuerdo final, frente a un 16% entre
los que tienen más de 52 años.
- El apoyo a una paz duradera alcanza un 70% entre la población
palestina mayor, frente a un 50% que lo apoyan entre los más jóvenes.
- El 47% de la población mayor palestina se opone a los ataques
suicidas, mientras un 44% los apoya; frente a ello, el 33% de los jóvenes
se oponen y un 64% apoyan tales ataques (una diferencia del 20%).
- La población mayor apoya de mejor grado el derecho de todo ciudadano
a "un proceso justo". Mientras el 80% del grupo de edad comprendido
entre los 43-47 años apoya que todos los palestinos (incluidos los
colaboracionistas con Israel) tienen derecho a apelar al Tribunal Supremo,
sólo el 51% de l grupo de edad más joven (16-18) apoya este
derecho.
- Los palestinos de más edad están haciendo frente a mayores
dificultades para acceder a los servicios médicos.
- Los jóvenes son más dogmáticos respecto a cambiar
el actual gobierno. El 43% del grupo de edad comprendido entre los 16-22
años considera que hay una necesidad de cambio, mientras que el 40%
no lo considera así.
- En contraposición, el 35% de la población mayor palestina
sienten la necesidad del cambio, frente 37% que no ven tal necesidad, y
un 28% que no opina sobre esta cuestión.
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