EEUU presiona al CS de NNUU
para que dictamine el incumplimiento de Iraq sobre desarme y
exija la salida de científicos iraquíes del país
19 de diciembre de 2002. Nota informativa
CSCAweb (www.nodo50.org/csca)
Mientras autoriza públicamente
al ejército británico para que avance en los preparativos
de su contribución bélica, el gobierno de Blair
declara que no es necesaria la aprobación de NNUU para
que EEUU y Gran Bretaña lancen oficialmente la guerra
contra Iraq.
El Consejo de Seguridad Nacional de EEUU (CSN) se reunió
el miércoles, 18 de diciembre para decidir cuándo
debe anunciar el presidente Bush que Iraq ha violado la Resolución
1441 del CS de NNUU. La declaración oficial debería
producirse, según fuentes oficiales de la Administración
Bush, el jueves 19, [1] coincidiendo con la intervención
de Hans Blix, jefe de la misión de inspectores de armamento
de NNUU a Iraq, ante el CS de NNUU, prevista para ese mismo día.
En reunión del CSN, a la que asistieron además
del secretario de Estado Collin Powell, el secretario de Defensa
Rumsfeld, el vicepresidente Dick Cheney y otras figuras representativas
del aparato oficial neo-conservador de la Administración,
se evaluaron las opciones que se presentarán al presidente
Bush tras el encuentro mantenido entre el representante de no
proliferación de armas del Departamento de Estado, John
S. Wolf, con Hans Blix, en la que el representante estadounidense
describió "las deficiencias que las agencias de inteligencia
de EEUU dicen haber hallado en la Declaración de Iraq"
[2].
Ante la falta de pruebas por parte de la Administración
Bush que puedan culpabilizar a Iraq de disponer o desarrollar
armamento de destrucción masiva, tras la evaluación
de la Declaración de Iraq, el CSN habría consensuado
dar por satisfactorias las conclusiones de los responsables de
las agencias estadounidenses que han examinado el informe y que
afirman que la Declaración "no contiene evidencia
de que se hayan eliminado las armas químicas y biológicas
que los inspectores de armamento de NNUU habían identificado
en 1998, o las sospechas de los inspectores de que existían"
[3].
Igualmente, representantes oficiales de la Administración
Bush han confirmado que éste no utilizará estas
conclusiones para declarar formalmente y de manera inmediata
la guerra contra Iraq, sino para incrementar la presión
sobre el CS de NNUU para que exija la salida de los científicos
iraquíes de Iraq para ser entrevistados fuera del país.
Una respuesta negativa del gobierno de Bagdad a esta exigencia,
significaría -según Washington- una "violación
material" de la Resolución 1441 y la vía libre
para la declaración oficial de guerra contra Iraq. EEUU
sigue presionando a los inspectores de NNUU para que presenten
un listado de científicos iraquíes que deberán
ser trasladados fuera de Iraq para ser interrogados [4].
La Administración de EEUU ha previsto la fecha del
19 de diciembre para hacer públicas sus conclusiones sobre
la Declaración de Iraq coincidiendo con el anuncio de
Hans Blix de que este mismo jueves 19 él hará sus
primeras declaraciones relativas a dicha Declaración ante
el CS de NNUU.
Frente a las conclusiones previas de EEUU sobre la Declaración
de Iraq, tanto la mayoría de los miembros del CS de NNUU
como el secretario de NNUU Kofi Annan difieren al respecto. Ante
la insistencia de EEUU de que Iraq ha cometido violaciones en
su Declaración, Annan ha vuelto a manifestar el 18 de
diciembre que "se debe dar tiempo a los inspectores para
que concluyan su labor" [5]. Por su parte, Hans
Blix, ha declarado que aunque tiene algunas consultas que hacer
a los responsables iraquíes relativas a proyectiles de
gas mostaza que no aparecen en la Declaración y a discrepancias
sobre algunas páginas del informe iraquí, no considera
que ello constituya una "violación material"
de la Resolución 1441. [6].
El embajador de Rusia ante NNUU, Sergev Lavrov, ha insistido
igualmente en que sólo los inspectores de NNUU tienen
autoridad para determinar si Iraq ha cometido una violación
seria. Igualmente, Francia ha mantenido que "la evaluación
de la conducta de Iraq es responsabilidad de Blix y El Baradei
[jefe de misión de inspecciones de Agencia Internacional
de la Energía Atómica en Iraq] y no de naciones
concretas del CS de NNUU" [7] .
Por su parte, los diez miembros no permanentes del CS de NNUU
recibieron las copias de los informes de la Declaración
de Iraq el pasado 17 de diciembre, tras haber sido eliminados
de sus páginas por los expertos de NNUU las informaciones
relativas a la fabricación y adquisición de armamento.
Los cinco miembros permanentes -salvo EEUU que lo obtuvo con
anterioridad [8]- las recibieron el 8 de diciembre.
El gobierno y el ejército
británicos, listos para la guerra
El secretario del Ministerio de Defensa británico,
Geoff Hoon, ha declarado el pasado 17 de diciembre que "el
Parlamento británico no tendrá un voto sustantivo
en caso de guerra contra Iraq" [9]. Por su parte,
el ministro de Asuntos Exteriores, Jack Straw ya había
señalado anteriormente que informar al Parlamento sobre
la guerra podría resultar "completamente irresponsable"
pues perjudicaría un necesario "elemento sorpresa".
Ante las preguntas de los miembros de la oposición británica
sobre si el Parlamento podrá votar antes de que las tropas
británicas sean enviadas a la guerra y reafirmando que
"el pueblo británico tiene derecho a saber si el
gobierno piensa operar exclusivamente con el mandato de NNUU
o ejercer una acción independiente del mandato de NNUU",
el ministro de Defensa británico ha señalado que
EEUU y Gran Bretaña podrían lanzar la guerra sin
la autorización del CS de NNUU.
Tras semanas de presión por parte de los altos cargos
del ejército británico, que requerían el
apoyo político y financiero explícito del gobierno
de Gran Bretaña a las medidas de preparación de
su fuerza bélica para la guerra contra Iraq, el Ministerio
de Defensa ha revelado los preparativos del despliegue militar
de sus tropas y de su armamento en el Golfo para la invasión.
Además de la expedición de ordenes urgentes de
adaptación de su maquinaría bélica a las
condiciones del desierto y la preparación de medidas de
protección frente agentes químicos y biológicos,
se han puesto en alerta máxima a miles de tropas y se
anuncia que hasta 10.000 reservistas serán llamados a
filas en breve plazo.
Según fuentes oficiales del Ministerio de Defensa británico,
unos 20.000 miembros del ejército serán desplegados
en el Golfo para asistir a la invasión de Iraq por parte
de EEUU [10] . El despliegue podría producirse
"en cualquier momento", apuntándose la fecha
de principios de enero de 2003. El Ministerio de Defensa ha anunciado
que, además de fletar barcos comerciales desde el 18 de
diciembre, la contribución militar británica consistirá
en la aportación de 250 carros de combate -cuyo despliegue
tendrá un coste de 90 millones de libras esterlinas- así
como obuses autopropulsados que están siendo revisados,
al igual que los tanques de guerra Challenger 2 (cuyos
resultados fueron muy negativos en las maniobras realizadas el
pasado año en Oman). Igualmente, y a petición de
EEUU, el gobierno de Gran Bretaña desplegará sus
fuerzas especiales, aviones de reabastecimiento y dragaminas.
Una fuerza naval que incluye un submarino cargado con misiles
de crucero Tomahawk dirigida por el avión de combate
Ark Royal, y el portaaviones HMS Ocean de la Marina
Real se situarán asimismo en las aguas del Golfo a comienzos
de año.
Notas:
1. The New
York Times, 18 de diciembre de 2002
2. Ibid.
3. Ibid
4. The New York Times, 16 de diciembre de 2002
5. The New York Times, 18 de diciembre de 2002, op. cit.
6. Ibid
7. The New York Times, 18 de diciembre de 2002, op. cit.
8. Véase en CSCAweb: EEUU obtiene la declaración
sobre armamento de Iraq contrariando la decisión del Consejo
de Seguridad y antes de que haya sido revisada por los expertos
de NNUU
9. The Guardian, 18 de diciembre de 2002, op. cit.
10. Ibid.
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