En Atenas, desde la Embajada

Index | Palestina 2011
Actualidad
PALESTINA

Palestina

 

En Atenas, desde la Embajada

Nos hallamos en la Embajada española en Atenas que los brigadistas del «Gernika» hemos ocupado hace dos días. Ha sido un acto de protesta e indignación por la retención de nuestros barcos y por la indiferencia mostrada por nuestro Gobierno.

Miguel San Miguel. Miembro de la «Flotilla de la Libertad» con destino a Gaza

Netanyahu y Papandreu
El presidente “socialdemócrata” Giorgios Papandréu de Grecia y Benyamin Netanyahu, presidente de ultraderecha en la entidad sionista de Israel, charlan durante la visita del anterior a Grecia a comienzos de junio

Sólo sé que no sé nada». Dicen que esa frase, tan llena de sabiduría, la pronunció Sócrates. Con tal aserto no alababa la ignorancia; todo lo contrario, confirmaba todo lo que le restaba por aprender. Mas retorciendo el argumento me pregunto: ¿por qué nuestra ministra de Exteriores, tan pródiga en sonrisas, no quiera saber nada de nosotros?, ¿o es que no le interesa saber, porque los asuntos de su negociado son los intereses de algunos?

Nos hallamos en la Embajada española en Atenas que los brigadistas del «Gernika» hemos ocupado hace dos días. Ha sido un acto de protesta e indignación por la retención de nuestros barcos y por la indiferencia mostrada por nuestro Gobierno.

Desde el día 21 de junio un grupo de más de cuarenta activistas españoles, acompañados de varios parlamentarios, íbamos a aliviar la situación espantosa que sufre el pueblo de Gaza. Viajábamos con ayuda humanitaria y con la idea de romper el bloqueo que impone Israel al pueblo palestino para, como hacía el Imperio romano, derrotarlo por hambre y por enfermedades.

Por ahora no ha importado a la Ministra que el Gobierno griego, fiel servidor de los especuladores y del Estado sionista de Israel, haya decidido bloquear los barcos de ayuda humanitaria; en unos casos asaltándolos, como ha hecho con los americanos y los canadienses. En otros inmovilizándolos con patrulleras, como han hecho con el «Gernika» y el carguero con ayuda humanitaria de España.

Esta medida no nos ha dejado otra solución que ocupar la Embajada española para reclamar nuestra libertad de navegar por las aguas comunitarias y disponer de nuestros barcos. Nuestro acto ha contado con la admiración de los demás integrantes de la flotilla; ayer recibimos la visita de los americanos, entre ellos estaban una ex coronel del Ejército americano y una señora judía de 90 años superviviente del Holocausto.

Ayer fue un día de despedida de parte de los integrantes de la brigada española; una despedida con canciones y abrazos. Marcharon los compañeros que no podían continuar en la misión por razones personales y de trabajo, pero que desde sus pueblos y ciudades van a seguir apoyando para que cuando sea pueda navegar la esperanza para el pueblo palestino.

Frente a tantos obstáculos para ayudar a los demás, hace unos días escuchamos el zumbido de los cazabombarderos, que volaban hacia Libia y con toda seguridad de que muchas de sus víctimas serían personas inocentes. Es difícil entender tanta libertad para algunos y tanto autoritarismo con quienes pretendemos ayudar a los demás.

Mientras escribo esta línea escucho a Zohar, la israelí que viaja con nosotros en la flotilla; se encarga de la intendencia; es una mujer disciplinada y entregada a la causa que goza del respeto y del cariño de todos. A su lado Nacho acaba de hacer otra pancarta que dice: «Liberad al "Gernika"». Camino de la Acrópolis no cesan de pasar turistas; muchos se detienen a preguntarnos, otros nos hacen fotos. Frente a nosotros, el Partenón, a pesar del paso de los siglos, sigue desafiando a la barbarie; unos metros más abajo, la «Victoria» de Fidias, que estaba atándose la sandalia, ha alzado la cabeza para darnos su grito de apoyo.

Zohar sigue incansable en su trabajo de intendencia; arriba en el primer piso, junto a la bandera Palestina, estamos Rafa, Cañamero, Elvira y el resto de los compañeros. Zohar sigue trabajando, entregada a la causa, ajena a las amenazas de seis energúmenos israelitas que hace días le gritaban: «Traidora, te vamos a matar, te quedan pocos años de vida». Ella sigue firme defendiendo lo que considera justo: los derechos humanos. Y nosotros seguimos resistiendo y exigiendo a la Ministra que se mueva para que las autoridades griegas nos devuelvan el «Gernika».