Rumbo a Gaza señala la ocupación y la Ministra Jiménez sigue en la Luna de la Trilateral

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Rumbo a Gaza señala la ocupación y la Ministra Jiménez sigue en la Luna de la Trilateral

Arropemos a la Flotilla por la Libertad

No puede haber acuerdos, como los hay militares, de inteligencia con el opresor y ocupante. No puede ser que el Gobierno de Rodríguez Zapatero -y otros-, modifiquen la ley de jurisdicción universal. Que ante una llamada del Ministro israelí Netanyahu pida que ningún españolito se embarque en la Flotilla -cambió en ese sentido la página oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores español- y no emplee su capacidad diplomática -como no la ha hecho en todo su periodo de Gobierno- para apoyar, en los hechos, a las víctimas, los ocupados, los refugiados, para que dejen de serlo.

Santiago González Vallejo, Comité de Solidaridad con la Causa Árabe
Mundo Obrero, junio 2011

Zapatero y Peres

Las personas que están en la Flotilla por la Libertad-Seguimos siendo humanos consideran la ocupación de Palestina por Israel como responsable del sufrimiento humano que acontece en esas tierras desde hace ya muchas décadas. La Flotilla es un reconocimiento del fracaso o mejor dicho la complicidad de la comunidad internacional y sus gobiernos con quien ejerce de facto la ocupación, la potencia israelí. No se podría dar una sin la complicidad de la otra.
 
El recibimiento institucional otorgado por las autoridades españolas al presidente Peres con motivo del 25 aniversario del reconocimiento del Estado Español al de Israel, con carantoñas y medallas, es el termómetro que mide el apoyo a la política de hechos consumados de la colonización israelí o el bloqueo que somete a Gaza. Y no la verborrea que se utiliza cuando desde los diferentes Gobiernos se señalan como interlocutores y sus intenciones verbales a ayudar a no se sabe qué paz sin hablar de la ocupación. Peres fue un artífice de la implantación de las colonias, también de la judeización de Jerusalén, participó en el diseño del Muro ilegal que se adentra en Cisjordania.... No es un personaje nuevo. Pero sí, siempre ha estado rodeado de conmilitones: Ha sido miembro de la II Internacional junto a otros asociados como los de los partidos de Mubarak de Egipto o Ben Alí de Túnez en todo este tiempo de ocupación, opresión y crimen contra los palestinos.
 
Los argumentos políticos de rechazo a flagantes vulneraciones de los derechos humanos, e imposición de sanciones, eliminación del comercio de armas, búsqueda y captura de supuestos responsables de asesinatos que Europa lanza a posteriori, cuando el régimen afectado ha caído o se ha determinado por los Gabinetes de inteligencia que es el momento de desasistirles, que mediante una operación de mercadotecnia parecerían novedosos y reiterables con otro régimen que hiciera esos atropellos, no se emplean con Israel. Y así, Peres, Presidente de Israel mientras su ejército mataba a más de 1400 personas en Gaza -y que supuso declaraciones comedidas de nuestras autoridades- apenas dos años, se jactaba de un proceso de paz que les permite aumentar la ocupación de Palestina ante sus anfitriones institucionales españoles que le reían las gracias.
 
La derrota palestina es profunda, sus líderes están empantanados entre la seducción de un posibilismo o la impotencia. La doble vara de medir que utilizan los aliados de Israel y los medios de comunicación es permanente. Se rechazó el Gobierno democrático palestino liderado por el partido Hamás, y se selló Gaza a continuación, haciendo un castigo colectivo, porque no reconocía a Israel, no admitía unos acuerdos anteriores, como los de Oslo y no rechazaba formalmente la violencia, aunque declaraba una tregua indefinida. Pero, cuando se constituyó el Gobierno israelí, a continuación, esos mismos aliados de Israel (sea cual sean sus Gobernantes y lo que hagan en la profundización de la colonización) no usaron las mismas presiones por los mismos hechos: Israel nunca ha reconocido a Palestina (el Estado de Israel nace con la afirmación de que respeta la partición de Palestina, pero nunca lo ha considerado); ha seguido ampliando las colonias o expulsando a palestinos en toda Cisjordania, incluyendo Jerusalén, y ejerce continuamente la violencia, mata, tortura, aprisiona, bombardea,...
 
Eso es lo que señala la Campaña Rumbo a Gaza. Quiere que la diplomacia, la voluntad política de los que nos dicen representar se ejerza alineada a la justicia. A favor de una paz justa. Que la diplomacia, los acuerdos comerciales, científicos sean diseñados y que sean ejercidos para presionar al ocupante. No puede haber acuerdos, como los hay, militares, de inteligencia con el opresor y ocupante. No puede ser que el Gobierno de Rodríguez Zapatero (y otros), modifiquen la ley de jurisdicción universal. Que ante una llamada del Ministro israelí Netanyahu pida que ningún españolito se embarque en la Flotilla (cambió en ese sentido la página oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores español) y no emplee su capacidad diplomática -como no la ha hecho en todo su periodo de Gobierno- para apoyar, en los hechos, a las víctimas, los ocupados, los refugiados, para que dejen de serlo. Y no es ayuda económica (que va a parar en muchos casos al fortalecimiento de la economía israelí) o construyendo aeropuertos (que son destruidos y no se reclama la indemnización) sólo lo que necesitan los palestinos.
 
Falta alinear la política con la defensa de los derechos humanos, ejercer el derecho internacional. Por eso Rumbo a Gaza, una empresa solidaria de miles de ciudadanos españoles, de muchísimas asociaciones de la sociedad civil, quiere hacer un gesto humano, ayudar a otras personas. Los internacionalistas solidarios arrastran un peligro cierto, la criminal actuación israelí, ya efectuada en la anterior Flotilla, con el resultado de nueve asesinatos, heridos y el robo de todas sus pertenencias. 

Ahora es el momento de arroparlos y estar vigilantes, para que no estén en peligro y puedan socorrer a otros seres humanos. Para que cambie la política. Reclamando coherencia a los gobernantes. Que no miren a la luna de la Trilateral. Que dejen de ser aliados del Israel ocupante. Que prevalezca el derecho y la humanidad.