En respuesta a:
6 de febrero de 2006
SOLEDAD GALLEGO-DIAZ
Hay cosas raras que van ocurriendo en nuestra sociedad, sin escándalo ni controversia, y que no deberían pasar tan desapercibidas ni estar tan ocultas, porque ignorarlas podría terminar enviando señales equivocadas a quienes las protagonizan o promueven. Quizás, incluso, (...)