Jueves 6 de febrero de 2025
Ana Bernal-Triviño, Periodista 05/02/2025 Público
Que el aborto es como el Holocausto nazi, porque se asesinan a miles de personas. Es lo que ha dicho un concejal de Vox en Castellón. Para ilustrar la idea, sacó un muñequito para preguntar al resto del pleno si lo matarían o lo aplastarían.
Todo esto sale ahora, ¿a cuento de qué? Se había presentado una moción de Compromís que pedía no acosar a las mujeres ante las clínicas donde se realizan abortos. Vox lo rechazó. Y no solos. A ellos se unió un partido más: el PP. Esto daría para mucho, pero detallo seis claves:
Por ley, las organizaciones contrarias a la interrupción del embarazo no debería percibir ni un céntimo, pero lo reciben. Viven del dinero público mientras se dedican a cuestionar ese derecho. Desde el año 2020, han recibido cerca de 8 millones de euros. ¿Y quién les paga más? Comunidad de Madrid, Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Madrid.
Por ley, está prohibido que estos grupos acudan a las puertas de las clínicas a acosar, presionar e insultar a las mujeres que van a abortar. Pero siguen acudiendo, con la excusa de que están rezando. Que casualidad que no rezan ni en la iglesia ni en sus casas, sino a las puertas de estas clínicas en su horario. Solo pretenden señalar y humillar a unas mujeres que no van allí de fiesta. Acuden solo para añadir escarnio público y dolor a una situación ya de por sí dura. Porque para los niños y niñas ya con vida, en pobreza o exclusión o, por ejemplo, aniquilados por las bombas de Israel, no han orado ni un padrenuestro.
El concejal de Vox que ha comparado el aborto con el Holocausto, Alberto Vidal, muy original no es. El término feminazi nace de esta idea, cuando un locutor estadounidense comparó con el nazismo a las mujeres norteamericanas que luchaban por ese derecho. Y de eso hace ya décadas.
El concejal de Vox, Alberto Vidal, suspende en historia. En ese Holocausto sí se hacían abortos, pero selectivos, solo a las mujeres judías para conseguir la raza “aria”. En campos de concentración de mujeres, como el Ravensbrück, se cometieron crímenes específicos de género como abortos forzados, esterilización, prostitución forzada y violaciones. Y los bebés nacidos (no fetos) eran exterminados, ahogados en un cubo de agua, o los tiraban contra un muro y descoyuntaban, relataban las víctimas. Fue justo en el nazismo cuando más abortos selectivos hubo, ¿o de esos no dicen nada porque piensan que esas judías lo merecían?
El concejal de Vox también está suspenso en leyes nacionales e internacionales, pues el aborto seguro está reconocido como un derecho humano por Naciones Unidas. Pero también está reconocido aquí, en España, con una ley que ampara realizarlo en un plazo determinado, que se respeta y se cumple. Vivimos en 2025, señor.
Vox y tantas organizaciones provida deberían de dejar de usar la religión como excusa. Jesús no dijo ni una palabra sobre el aborto. Y el resto son interpretaciones. Escuchen a mujeres como Católicas por el Derecho a Decidir, que también son cristianas. Sabemos que detrás solo hay grupos de extrema derecha que impulsaron desde EEUU este rechazo por interés político, no religioso. Muchas mujeres no abortarían si esa situación llegase a sus vidas, pero respetan y apoyan ese derecho para que el resto sea libre de decidir.
Para acabar, un aviso. Recuerdo. Vox lleva en su programa electoral derogar la ley del aborto y de violencia de género. Vox está como tercera fuerza política en las encuestas. Así que quienes hoy están en el poder, pónganse las pilas. Más vale que, como en Francia, el derecho al aborto se blinde en la Constitución ya. Que si todo va como pintan las cosas, y al PP no le tiembla el pulso, tendremos a un vicepresidente negacionista y contra los derechos de las mujeres llamado Santiago Abascal.