Las mujeres son mayoría en el sector legal, pero pocas logran cargos de “relevancia”

Las mujeres son mayoría en el sector legal, pero pocas logran cargos de “relevancia”

Yolanda Rodríguez

4 marzo, 2016

El despacho de abogados JAUSAS ha lanzado una iniciativa para visibilizar los obstáculos que encuentran las mujeres en el sector legal, en el que se pone de relieve que la presencia femenina es mayoritaria en los despachos, aunque pocas consiguen ascender a cargos de “relevancia” en los bufetes y en las principales instituciones de este ámbito.

Con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, las socias y principales abogadas de JAUSAS analizan la “larga revolución” que ha transcurrido desde que hace 94 años se colegió una mujer se colegió por primera vez para ejercer la abogacía en España. Se llamaba María Ascensión Chirivella y el 12 de enero de 1922 fue admitida en el Colegio de Abogados de Valencia sin las “reticencias” y la “polémica” suscitada en otros países europeos.

“Desde entonces, el camino no ha sido fácil”, expone Jausas en un dossier titulado “talento femenino en el sector legal”, donde señala que ha habido que esperar hasta 2016 para que una mujer, Victoria Ortega, haya sido elegida presidenta del Consejo General de la Abogacía, el máximo órgano de representación de los abogados españoles.

En su estudio Jausas señala que La Ley de Igualdad, aprobada en 2007, trató de impulsar la presencia femenina en la alta dirección de compañías de más de 250 empleados pero con escaso éxito.

Y resaltan que en el sector legal han existido y persisten graves dificultades para alcanzar ese porcentaje de la Ley de Igualdad, ya que menos del 16% de los socios son mujeres, según un reciente estudio del diario Expansión. Si el peso femenino es tan exiguo en esos puestos de responsabilidad, contar con un consejo casi paritario es, por ahora, un objetivo inalcanzable.

“Existe talento femenino en todas las organizaciones, con sobradas capacidades para acceder a puestos de la máxima responsabilidad. Sólo es necesario que se otorgue visibilidad a ese talento”, asegura Nieves Briz, socia de Fusiones y Adquisiciones del citado despacho, que anteriormente trabajó durante 25 años en Ernst & Young, donde fue la primera mujer en ser nombrada socia en España.

Briz apuesta por medidas que “satisfagan los intereses corporativos y sociales, más que por modificaciones legislativas tendentes exclusivamente a la protección de la mujer” para facilitar su acceso a los consejos de administración o a los máximos órganos de dirección de los despachos y del resto de empresas.

Un plus que no se exige a los hombres

En cualquier caso, “en las últimas décadas, la mujer ha ido alcanzando cada vez más reconocimiento como profesional y ya está muy introducida tanto en la profesión como en el ámbito judicial”, recuerda Mercè Caral, y presidenta del capítulo español de la American Bar Association, la mayor organización de abogados del mundo, con cerca de 400.000 miembros.

En efecto, doce de los 83 abogados que ejercen en la actualidad de decanos de Colegios de Abogados son mujeres, según datos del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE). Muchas de ellas han hecho historia al ser las primeras en ocupar esos puestos, como Sonia Gumpert (Madrid) o Filomena Peláez (Badajoz).

También se hace mención a la presencia femenina en el ámbito judicial, donde está limitada a menos del 14% en el Tribunal Supremo pero es mucho más abultada en instancias inferiores como la Audiencia Nacional (36,2%), los Tribunales Superiores de Justicia (35%) o las Audiencias Provinciales (34,1%), según datos del Consejo General del Poder Judicial.

La asociada de Derecho Laboral de JAUSAS Emma Vicente cree que a estas y otras mujeres que alcanzan cargos de relevancia “se les exige todavía tener un plus –mayor formación, mayor dominio de idiomas, mayor dedicación o eficiencia– para tener el mismo reconocimiento profesional que el hombre”. “Percibo mayor exigencia y una necesidad de demostrar continuamente nuestra valía profesional”, asegura.

Un futuro esperanzador

En cualquier caso, el futuro se presenta esperanzador, ya que “las nuevas generaciones de abogados tienen una conciencia más igualitaria”, como señala Maria José Gómez, asociada de Fiscalidad.

Y recuerdan que “los legisladores y reguladores tanto españoles como supranacionales intentan promover proyectos que ayuden a romper los “techos de cristal””.