La activista saharaui Sultana Jaya denuncia que paramilitares marroquíes allanaron su casa y le pincharon con jeringuillas sustancias sin identificar

La mujer sufre desde hace más de 11 meses vejaciones y ataques y está retenida en su casa. Vive en un territorio saharaui ocupado por Marruecos.

Sultana Khaya lleva más de cien días de arresto domiciliario en Bojador, en el Sahara Occidental ocupado por Marruecos, por su actividad política.

madrid 08/11/2021 Jose Carmona Público

La activista saharaui Sultana Jaya ha denunciado que paramilitares marroquíes allanaron su casa durante la madrugada del domingo al lunes y le pincharon con jeringuillas sustancias que le han provocado dolores corporales. Aunque desconoce qué contenían y hay médicos revisando posibles efectos, la mujer asegura que tiene dolores en la zona lumbar y de los riñones.

Sultana Jaya es una mujer saharaui que vive en los territorios de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) ocupados por Marruecos. Sus problemas con las autoridades de la monarquía de Mohamed VI son continuos, ya que la propia mujer denuncia que no puede salir de casa y que ha sufrido palizas y vejaciones constantes.

La denuncia de la activista saharaui ha sido publicada por Equipe Media, que recoge en un vídeo publicado en redes sociales los acontecimientos de la última noche en la que esta mujer ha sido agredida por agentes externos.

Ahmedna Abdi M’barek, jurista y miembro de Juventud Activa Saharaui y partícipe de la campaña internacional para denunciar la situación de Sultana Jaya, habla con Público sobre lo ocurrido: "Ya son más de once meses que esta familia está asediada en su casa. Hoy ha sido un día muy duro para Sultana, su madre y su hermana. Han entrado en su casa de forma ilegal, pusieron la casa patas arriba y echaron productos químicos por toda la casa".

El jurista teme que la situación vaya a más, ya que los pinchazos con jeringuillas suponen una nueva forma de ataque contra la mujer: "Desconocemos la sustancia que le han pinchado y el objetivo, pero estamos muy inquietos. Estamos con médicos viendo qué le puede pasar. Ya han sido violadas, agredidas y la situación es incontrolable. No es ni una ni dos las personas que irrumpen en su casa. Son policías camuflados"