L’Albufera de València, un paraje natural en peligro por su “preocupante” estado de conservación

La organización ecologista SEO/BirdLife advierte que la "deficiente" calidad y cantidad de los aportes de agua al lago impide la recuperación de la biodiversidad en este paraje natural

Vista aérea del Tancat de la Pipa, humedal restaurado y Reserva Ornitológica de SEO/BirdLife. SEO/BirdLife

Miguel Giménez València — 7 de febrero elDiario.es

El parque natural de l’Albufera de València está en peligro por su "preocupante" estado de conservación. Tal y como ha denunciado la organización ecologista Seo BirdLife en su informe ’Humedales Ramsar en España: En Alerta’, el paraje valenciano, incluido en el convenio Ramsar, se encuentra entre los espacios considerados como áreas IBA (importantes para la conservación de las aves y la biodiversidad) más amenazados a nivel mundial. En condiciones similares se encuentran también Doñana, S’Albufera de Mallorca, Delta del Ebro, Laguna de Gallocanta y Mar Menor (seis de los 277 parajes más amenazados a nivel mundial): "El 85% de los humedales Ramsar españoles presenta un estado de conservación preocupante".

El informe revela que el 22% de las poblaciones invernantes y migrantes de aves acuáticas presenta importantes problemas de conservación, cifra que se dispara al 63% en el caso de las poblaciones de aves acuáticas que usan los humedales españoles para reproducirse. De hecho, casi 3 de cada 10 especies de aves que dependen de estos ecosistema están gravemente amenazadas.

Por lo que respecta al caso concreto de l’Albufera, está "ampliamente aceptado" por la comunidad científica y sus gestores que los problemas que condujeron a su colapso ambiental "dificultan su recuperación ambiental". Los problemas ambientales del humedal, según reconocen las administraciones públicas, están asociados a la "deficiente calidad" y cantidad de los aportes de agua que recibe el lago y a la crisis ambiental de la laguna, lo que impide la recuperación de la biodiversidad de la laguna costera.

El colectivo ecologista recuerda que los documentos de planificación hidrológica apuntan a un estado de "hipertrofia" de la laguna, que "no alcanza los objetivos ambientales". "No existe vegetación sumergida, elemento clave para el buen funcionamiento y regulación del sistema", sostienen, para alertar también de la "pobreza" de fauna del sustrato subacuático y de la asociada a las plantas y de la desaparición "o drástica reducción" en el humedal de especies de gran importancia ecológica.

Según estudios técnicos realizados en l’Albufera, "no es previsible que se pueda alcanzar el buen estado ecológico a corto plazo, especialmente por los problemas de eutrofización debidos al exceso de fósforo y por los sedimentes existentes en el lecho del lago".

La ficha oficial del Convenio de Ramsar para l’Albufera advierte de años de vertidos urbanos e industriales sin depurar y recoge que en los últimos años se ha manifestado "un nuevo e inquietante factor de preocupación: la reducción de los aportes hídricos". Esta circunstancia representa un problema potencial de indudable calado, puesto que puede conllevar una pérdida de la calidad general de las aguas.

Se puede considerar, por tanto, que el ecosistema muestra un funcionamiento hidrológico completamente modificado, tanto

en su estructura como en la tipología y cantidad de los aportes, y una drástica reducción, o desaparición, de poblaciones y especies autóctonas de flora y fauna", entre las que destaca el empobrecimiento de la comunidad de aves acuáticas, cuyas especies representativas de los hábitats lacustres y palustres, recogidas, por otro lado, en el Anexo I de la Directiva Aves, son precisamente las que se encuentran en un estado de conservación "más desfavorable".

La situación actual de la laguna hace imposible que su ecosistema se acerque al que presentaba en los años sesenta, "momento en el que el lago podría considerarse oligotrófico (aguas muy limpias y con escasa carga de nutrientes) y presentaba una calidad ecológica alta. A pesar de que los aportes de nitratos y fosfatos se han reducido respecto a lo entraban en los años ochenta, y se han realizado esfuerzos para aumentar la calidad del agua entrante al lago, l’Albufera "está aún muy lejos de alcanzar un estado que asemeje a sus condiciones naturales".

La amenaza del Puerto de València

La pasada semana se celebró en la Universitat Politècnica de València la jornada ’El desafiament del canvi climàtic a l’Albufera’ organizada por la comisión científica Junta Rectora del Parque Natural dependiente de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y que contó con la participación de 50 expertos. Éstos coincidieron en señalar al Puerto de València como uno de los factores que pone en riesgo l’Albufera.

Estas amenazas se suman a cuestiones como el cambio climático. El Informe de Evaluación sobre Cambio Climático del Grupo Intergubernamental de Expertos (IPCC) de Naciones Unidas (ONU) prevé para el próximo siglo un incremento del nivel del Mediterráneo de hasta un metro debido al calentamiento global, lo que dejaría casi inundada el paraje natural.