Domingo 28 de febrero de 2016
*La inacción de los gobiernos y la falta de solidaridad internacional están condenando a miles de personas, que se ven obligadas a huir de sus hogares debido a los conflictos, a arriesgar sus vidas. *En 2015 fuimos testigos del intolerable sufrimiento de personas refugiadas debido a la indiferencia de todos los gobiernos.
En 2015, al menos 5.933 personas murieron en el mar buscando una vida mejor. En el mar Egeo, el 30% de los que murieron eran niños y niñas.
*Ante esta situación, ante esta crisis humanitaria sin precedentes, hay personas especialmente vulnerables: Las mujeres refugiadas*sufren violencia y discriminación. El riesgo es aún mayor si están solas y tienen que sacar adelante a sus hijas e hijos en condiciones de total inseguridad y pobreza.
Este es el caso de *las mujeres**refugiadas sirias en el Líbano*, el país con más refugiados per cápita del mundo, que acoge a un millón de personas que han huido de Siria, donde más de la mitad son niños y niñas y donde el 20 % de las familias refugiadas sirias están encabezadas por una mujer. Algunas son viudas, otras están separadas o sus maridos se quedaron en Siria o están detenidos o desaparecidos. *Estas mujeres, además, se enfrentan a abusos y acoso sexual.*
*El reasentamiento y *otras vías de *admisión humanitaria*permitirían a estas personas viajar de una manera legal y segura a un nuevo país donde podrían reconstruir sus vidas.
En 2016 pedimos que esos viajes hacia la muerte y el horror se reemplacen por viajes seguros y legales hacia la esperanza.
Por ello, Amnistía Internacional lanza, en este sentido, en su espacio
de activismo (www.actuaconamnistia.org
Gracias por actuar.
— AMNISTIA INTERNACIONAL VALENCIA