logo
volver a página pricipal

  nº 36 junio 03
NauFraG@s

iEntrevista a Cheb Balowski

"Intentamos comprometernos con lo que vemos y vivimos, y contra lo que nos indigna”


>> Tras el nombre de Cheb Balowski se esconde una joven y numerosa banda barcelonesa que mezcla a la perfección diferentes músicas con aires festivos. Han sacado hace poco su segundo disco “Potiner” (Propaganda pel fet, 2003) y en la actualidad se encuentran presentándolo y llevando su fiesta allá donde tocan. Aprovechamos su paso por Madrid para que nos contaran más cosas sobre el grupo y sus inquietudes.

Gromeck
Molotov: Contadnos brevemente la historia del grupo. ¿Habéis seguido alguna evolución musical?
Cheb Balowski:
El grupo empezó en el 97, pero la mayoría de los integrantes nos conocemos desde los tres años, o sea que la historia ya viene de lejos, muchos íbamos a la misma escuela, luego en el instituto seguimos viéndonos y allí fue cuando empezó la cosa. Al principio éramos siete, se fue añadiendo gente que no era de la escuela y luego fue creciendo la banda. Ha habido cambios, como por ejemplo los percusionistas, hasta la formación actual, bastante estable de once miembros. Empezamos haciendo versiones de ska, que era la música que escuchábamos y más nos gustaba, por ejemplo Madness, Specials o Dr. Calypso además de versiones de soul. Luego empezamos a escuchar música más mestiza como Color Humano y grupos así, empezamos a ir cambiando con música latina y de Europa del este que hemos ido juntando hasta ahora, ya en el primer disco (“Bartzeloona”, 2001) aparecía música gitana y ahora seguimos en esa línea chupando de la música que nos gusta, la que oímos.

M.: Al ser un grupo en el que hacéis música tan variada, vuestras influencias supongo que serán muchas. ¿Algún ejemplo?
C.B.:
Hay muchos grupos que nos gustan, por ejemplo Zebda, Dusminguet, grupos franceses con influencias árabes, en general la música que vamos escuchando. Somos once, cada uno con sus gustos musicales.

M.: ¿Alguna vez os han dicho “Me recordáis a tal grupo”? ¿A cuáles?
C.B.:
(Risas) Nos llamaban la Orquesta Nacional del Raval, por la Orquestre National de Barbes. Cosa falsa porque no somos del Raval, y no creemos que nos parezcamos mucho a ellos. Hace poco nos dijeron en una entrevista que éramos más Zebda que Zebda. También nos comparan con Mano Negra o Los Fabulosos Cadillacs.

M.: Cuando se habla de música mestiza o grupos mestizos, ¿os identificáis con esa etiqueta? ¿O definirías vuestra música de algún modo más concreto?
C.B.:
Lo de la etiqueta es algo inevitable que siempre se hace y que no nos toca a nosotros hacerlo. Suele ser algo a posteriori, que hacen sobre todo los medios. Aparte de eso no sé, el nombre siempre va cambiando pero la cosa es lo de siempre, transformándose. Diría que hacemos música para divertirnos

M: En el nuevo disco hay varias colaboraciones. ¿Colaboráis vosotros también con otros grupos?
C.B.:
Sí, hay gente de La Carrau, de Kultur Shock, de Radio Bemba, Íñigo Muguruza y alguna colaboración en las letras. Yacine (el cantante) ha colaborado en bastantes grabaciones y yo (Marti) he colaborado con el violín en un disco de Sagarroi. Esperemos que sigan surgiendo.

M: ¿Qué mensajes transmitís con vuestras letras?
C.B.:
Hay algunas canciones en las que el mensaje no está muy claro (risas) por ejemplo un poema de una especie de Mantra como de espacios cromáticos del alma, que tampoco lleva otro mensaje detrás. Intentamos hacer referencia a lo que nos rodea e intentamos comprometernos con lo que vemos y vivimos, en contra lo que nos indigna. También tratamos el tema de la inmigración, hay alguna visión crítica de la situación actual.

M: Utilizáis varias lenguas en vuestras canciones. ¿Que buscáis con esto? ¿Os consideráis internacionalistas?
C.B.:
Yacine sabe árabe, francés, castellano y catalán. Las letras en esos idiomas salen como algo natural, y ya que mezclamos diversas músicas, porqué no mezclar diversos idiomas. Tenemos también una en euskera, ya que Santi (guitarra) está estudiándolo, además de ruso. Vamos juntando todo lo que podemos. Tenemos la idea de cantar algún día en esperanto como homenaje internacionalista.

M: Viendo la cantidad de festivales en los que participáis, ¿qué opináis de la fiebre festivalera que hay en la actualidad?
C.B.:
Es cierto que hay un negocio montado alrededor de la música, pero cuantos más festivales sean por una causa justa e interesante, mejor, y en la medida en que nos sea posible escoger, nos decantaremos por ellos. Pero aún así, cuantos más festivales haya en general y más trabajo para los músicos también mejor.

M: ¿Qué opináis de la música en internet? ¿Os habéis planteado poner a disposición de la gente vuestro disco en la red?
C.B.:
Estamos aprendiendo ahora a hacer la página web, y ya nos cuesta bastante. Es un tema en el que nos tenemos que ir metiendo más, porque lo consideramos un mecanismo bastante bueno para poder transmitir cosas que es muy difícil que aparezcan en otros medios. Lo de colgar el disco aún no lo hemos pensado. Aún así es algo no nos podemos plantear porque hay una gente que nos ha pagado el disco y es un dinero que hay que recuperar, es un tema complicado. Depende de cada grupo, de cómo se lo hayan planteado.

M: ¿Hasta dónde os gustaría llegar como grupo?
C.B.:
Ahora mismo todos hacemos otras cosas aparte del grupo, somos muchos. Aunque no suene muy bien, lo que nos planteamos en un momento dado es poder ganar algo de dinero con esto.

M: ¿Qué opinión tenéis de las discográficas? ¿Las consideráis necesarias? ¿Grabaríais con una grande?
C.B.:
Ya sea autoeditado o en coproducción, lo que está bien es que se mueva la música cuanto más mejor, algo que estamos viendo ahora mismo en internet. El sistema que llevamos con el primer disco nos gustó bastante, y a la hora de grabar el siguiente consideramos que lo más sensato era seguir como estábamos. El tema de la multinacional, me asusta un poco, no solo ya por principios, sino por la complejidad del tema.

M: Ahora que estamos con las elecciones. ¿Qué os parecen? ¿Os significáis de alguna forma políticamente?
C.B.:
Como grupo no nos significamos políticamente, está claro que no somos amigos de determinadas ideas. Cada uno piensa cosas diferentes, aunque en las letras nos gusta criticar o hablar de las cosas que no nos gustan. Tenemos cierta indignación sobre el actual estado de la “mentira” en el que estamos y hacia donde están yendo las cosas. La semana pasada estuvimos en Euskadi, y allí este año el tema de las elecciones no pasa así como así.

M: ¿Participáis en algún colectivo o habéis colaborado en alguna campaña que se salga del ámbito musical?
C.B.:
En la actualidad se está preparando una recopilación para una red de apoyo a Palestina en la que colaboraremos, también participamos en el disco de Cultura de Resistència que hizo el centro de documentación Arran, y varios conciertos como el de la reunión del banco mundial en Barcelona.

M: ¿Qué tal han sido vuestras experiencias en el extranjero?
C.B.:
Hemos estado un par de veces en Francia. Hace poco estuvimos en Alemania y allí flipamos, porque no nos esperábamos lo que vimos, la gente como loca e incluso algunos nos conocían. Acogen muy bien la música de Barcelona, como la llaman allí. Una experiencia muy buena. En verano recorreremos más países.

M: ¿Qué proyectos tenéis a corto-medio plazo?
C.B.:
Aprovechar que ha salido el disco para tocar bastante y sobre todo seguir haciendo canciones.

Propaganda-pel-fet
Telf. / Fax: 938726056
info@propaganda-pel-fet.com

 

subir