En el estado español las movilizaciones sin precedentes han generalizado un clima de contestación y rebeldía

Millones de personas inundan las calles de todo el mundo tras el comienzo de la guerra

El jueves 20, hora y media después de que acabara el ultimátum de Bush a Sadam, el ejército americano empezó a bombardear Iraq. Muchas habían sido las muestras de rechazo a la posible intervención armada, desde todos los puntos del mundo. Aún así, los intereses económicos finalmente han provocado la explosión de la guerra. Las protestas empezaron desde ese mismo momento, recorriendo todos los continentes y países. Bien de forma espontánea o bien de forma organizada las multitudes salieron a recuperar la calle y las grandes ciudades del mundo quedaron colapsadas.

La jornada de protesta comenzaron en Asia y Oceanía y se trasladaron a Europa, donde cientos de miles de personas marcharon por París, Berlín, Amsterdam, Atenas, Berna, Copenhague, Helsinki, y varias ciudades de Italia y España, entre muchas otras.
En Londres, donde el gobierno británico apoya militarmente a EEUU, se celebró una de las manifestaciones más multitudinarias, con eslóganes hostiles al Gobierno, como “Echar a Blair. No a los bombardeos”. La policía cargó contra un grupo de manifestantes que bloqueaban la céntrica Oxford Street. Otras protestas se llevaron acabo en diversos puntos del Reino Unido, incluyendo bases aéreas británicas.
Las manifestaciones en Francia fueron masivas y congregaron a distintos sectores sociales. En Estrasburgo, en el este del país, se produjeron detenciones tras incidentes entre unos cientos de asistentes y decenas de policías, en primer lugar ante el consulado de EEUU y después en una hamburguesería de una cadena americana.
En Grecia, el viernes 21 fueron detenidas 61 personas, cuando se intentaba llegar a la embajada americana. El fin de semana también continuaron las movilizaciones en este país.
En Italia, decenas de miles de personas se manifestaron en las principales ciudades del país; destacaron los dos cortejos de Roma y la acción de los ecologistas de Greenpeace, que colocaron una pancarta contra Silvio Berlusconi en el Altar de la Patria, en la capital. Los participantes corearon eslóganes contra la guerra, EEUU, el presidente George Bush y el Gobierno italiano por ser aliado de los norteamericanos.
Cerca de 35.000 personas, según la policía, se manifestaron en Lisboa, donde la pianista Maria Joao Pires leyó el manifiesto final.
En Bruselas la manifestación reunió a unas 10.000 personas y en ella se produjeron diez detenciones y tres heridos durante enfrentamientos de la policía belga con algunos manifestantes. En Alemania cientos de miles de personas protestaron en Berlín, Hamburgo, Colonia y Nuremberg... entre otras cosas, por la apertura del espacio aéreo alemán a los aviones de la coalición internacional En Suiza, la policía cargó con balas de caucho a los 30.000 manifestantes.
En Amsterdam se congregaron 200.000 personas, 50.000 en Estocolmo, 30.000 en Viena, 30.000 en Berna y 10.000 en Copenhague.
En Estados Unidos, decenas de miles de neoyorquinos participaron bajo extremas medidas de seguridad en la marchas que solicitaban al presidente norteamericano el fin inmediato los bombardeos contra Iraq. Los asistentes desafiaron la intimidación policial para salir a la calle con pancartas con lemas como “EEUU, superpotencia terrorista” o “La televisión engaña”, pese a que la policía inspeccionó a algunos manifestantes que se dirigían a la marcha en metro y les requisó algunas pancartas. Otras ciudades como Washington, frente a la Casa Blanca, y Chicago, fueron escenario de concentraciones. En San Francisco el fin de semana que comenzaron los bombardeos miles de activistas consiguieron colapsar el centro de la ciudad con la estrategia de cortar calles. Más de 1400 personas fueron detenidas, lo que no impidió que las acciones continuaran
También hubo manifestaciones en ciudades de Australia y Nueva Zelanda y en otros países del sureste asiático y el Pacífico.
En Australia -país que apoya la ofensiva liderada por EE.UU. y el Reino Unido contra Irak- miles de opositores a la guerra tomaron las calles y cortaron el tráfico en varias ciudades.
En Indonesia 3.000 musulmanes se reunieron frente a la embajada de EEUU en Yakarta para criticar la pasividad de la ONU ante el conflicto. Los manifestantes, muchos de ellos mujeres, portaron un ataúd para simbolizar la muerte de las Naciones Unidas. Unas 1.500 personas también marcharon en Java, y cientos de estudiantes protestaron en Sumatra. En Taiwan un número indeterminado de activistas resultaron heridos leves al ser atacados por las fuerzas de seguridad.
En Bangladesh miles de personas participaron de una huelga general, en protesta por la guerra. Una masiva marcha en la capital, Dhaka, concluyó con la quema de una efigie del presidente estadounidense, George W. Bush.
Una serie de marchas antibélicas también se realizaron en distintas ciudades a lo largo de Pakistán.
Japón, Taiwán, Corea del Sur, Malasia, Tailandia e India también fueron escenario de protestas contra la guerra el sábado. De hecho, en Taiwan un número indeterminado de activistas resultaron heridos leves al ser contenidos por las fuerzas de seguridad.
En México la manifestación que finalizó delante de la embajada americana acabó con 16 detenidos y varios heridos tras intentar la policía disolver la manifestación.
En el mundo árabe se repitieron los actos contra la guerra, como la que reunió en Beirut y otras ciudades de Líbano. Grupos de estudiantes se congregaron en las proximidades de la embajada de Kuwait en protesta por la política de los gobernantes kuwaitíes, que permiten atacar Irak desde su territorio.
En Egipto, donde las manifestaciones están prohibidas, la gente no se amedrentó y también salió a la calle a protestar ante el ataque americano. Y así por todo el mundo...

Estado español
Un puñado enorme de iniciativas proliferan por todas la ciudades: cortes de carreteras, paros en los lugares de trabajo, acampadas, manifestaciones espontáneas, etc., que tratan de interrumpir la normalidad, de evitar que se normalice la situación de guerra.
Con más determinación que antes del 20 de marzo y con más rabia e irritación, millones de personas atravesaron las ciudades españolas cortando las calles, reclamando a los mirones que se unieran, defendiéndose de la brutalidad policial (que ha incluido botes de humo y pelotazos de goma) con cualquier medio al alcance la mano, gritando su ira contra el Partido Popular y el régimen estadounidense. Y no sólo eso, miles de personas proclamaban a los cuatro vientos consignas como “¡que no, que no, que no nos representan!” y “lo llaman democracia y no lo es”.
Resumiendo, podríamos hablar de millones de personas movilizadas por toda la geografía española, en ciudades y pueblos. Se han llevado a cabo también multitud de acciones contra intereses americanos repartidos por el estado, así como en distintas sedes del PP y contra sus líderes, mostrando un rechazo frontal al gobierno. Las delegaciones de gobierno, así como otros edificios de la administración pública, han presenciado múltiples actos de rechazo a la guerra.
En Madrid, el jueves que empezó la guerra los estudiantes cortaron autopistas, colapsaron el centro y llegaron al Congreso, donde la policía cargó con pelotas de goma. Por la tarde, miles de personas volvieron al Congreso y se intentó llegar a la sede del PP. El viernes, lo que tenía que ser una concentración ante la embajada de EEUU, se convirtió en una continua marcha por el centro de Madrid de múltiples grupos. Las cargas policiales contra la multitud se volvieron a repetir, lo que en algunos casos provocó la reacción de manifestantes ante la actuación policial. El sábado, la idea era llegar al Palacio de La Moncloa, pero el despliegue policial lo impidió. Lo que no impidió (y también pese a las amenazas del gobierno advirtiendo que las manifestaciones eran ilegales) fue que medio millón de personas saliera a la calle. Parte de las multitudes consiguieron llegar a Sol, pero los antidisturbios rompieron la marcha por el final y cargaron contra las personas que quedaban. Las actuaciones de los días anteriores, así como la rabia ante lo que está pasando, provocaron un fuerte rechazo a la carga. Los enfrentamientos duraron varias horas y siete personas fueron detenidas. Centenares de personas resultaron heridas tras las actuaciones policiales. Los manifestantes resistieron las cargas que se han producido en Madrid, recuperando la calle y las libertades perdidas, demostrando sus ganas de expresarse.
En Barcelona también se han producido diversas movilizaciones. Cortes de autopistas y calles centrales de la ciudad, acciones ante empresas americanas, manifestación con un millón de personas, clases de la universidad realizadas en medio de la calle Diagonal, son algunos ejemplos de actos realizados.
En Iruñea, Málaga (donde hubo un detenido), Alacant, Galiza, Tenerife, Sevilla, Terrasa, Aragón... los actos en contra de la guerra fueron continuos y multitudinarios.
De momento y mientras dure la guerra parece que las movilizaciones continuarán. /Kasius. fuente: indyacp

Más información:

www.nodo50.org/csca > con información diaria sobre la situación de los brigadistas en Bagdad · www.nodo50.org/paremoslaguerra · www.liberInfo.net · www.indymedia.org > red internacional indymedia · acp.sindominio.net > Madrid · barcelona/indymedia.org > Barcelona · http://euskalherria.indymedia.org > Euskal Herria · www.ecologistasenaccion.org · www.lahaine.org · www.ainfos.ca.org