logo
volver a página pricipal

  nº 34 abril03

La presencia de internacionalistas en Bagdad continúa pese al inicio de la agresión militar directa
 
En la noche del 19 de marzo, justo cuando expiraba el ultimátum impuesto por la administración estadounidense, abandonaban Bagdad l@s 23 componentes de la brigada internacionalista, l@s últimos ciudadanos del estado español en irse de Irak. Esta brigada ha sido la quinta que, dentro de la iniciativa impulsada por la Campaña Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Irak (CELSI), ha visitado este país para mantener una presencia continuada de personas del estado español durante todo el tiempo que fuese posible. Con ell@s han participado en las Brigadas Internacionalistas contra la Guerra en Irak “Mohamad Belaidi” un total de 137 personas de Catalunya, Andalucía, Asturies y Madrid.
Al cierre de esta edición permanecen en Bagdad nueve integrantes de estas brigadas, con la pretensión de ser testigos de todo lo que pase y mostrar con su gesto el masivo rechazo de la población del estado español a esta guerra. Seis de ellas, pertenecientes a la brigada que salió de Madrid (la cuarta brigada), y tres de la brigada de Euskadi, por ahora la ultima, ya que con el inicio de la agresión, las brigadas se han tenido que suspender. En caso de necesidad, cuentan con el apoyo y expreso amparo de la embajada de Cuba en Bagdad, una de las pocas representaciones diplomáticas que se mantienen abiertas. Según declaraban los componentes de esta quinta brigada que se quedaron, Manu, Imanol y Javi: “No sabemos hasta cuándo, no sabemos en qué situación, pero nos quedamos. Sin dramatismos, el riesgo que asumimos es verdaderamente pequeño, puesto que somos europeos. Son los iraquíes los que están en verdadero peligro. Es la libertad la que esta en peligro, en este sucio mundo cada vez más injusto. Nosotros no vamos a salvar a nadie. Nosotros no somos nadie. Somos tres vascos sin nombre, entre millones de personas sin nombre. Eso es justamente lo que queremos resaltar, que estamos juntos los sin-nombre del mundo, que nos han unido los mismos que nos han quitado el nombre.”
Por su lado, los seis brigadistas madrileños (Teresa, María Rosa, Ana, Mino, Pepe y Carlos) declararon igualmente que “los gobiernos implicados en este genocidio están procurando convencer a los medios de comunicación y a los internacionalistas aún presentes en Irak de que abandonemos el país. Nadie conoce a ciencia cierta qué puede ocurrir en los próximos días y semanas, pero esta claro que los agresores –tampoco el gobierno español- no quieren que haya testigos o, dispuestos como están a usar todo su poder militar contra este pueblo a fin de aplastar cualquier posible resistencia, no quieren víctimas con apellidos y rostros occidentales: como el millón y medio de civiles asesinados por las sanciones, los muertos iraquíes no tendrán ni cara ni nombre. Para los seis brigadistas tienen ya cara y nombre, y cuando regresemos llevaremos como testimonio sus miradas, el timbre de sus voces, sus francas sonrisas.” “La nuestra no es tampoco una opción personal: nos quedamos aquí para seguir reivindicando –de igual manera que lo seguiréis haciendo vosotros y vosotras allá- el derecho de los pueblos a la autodeterminación, a la soberanía, a la gestión popular de sus recursos, a una democracia autentica cimentada en el disfrute de derechos sociales y económicos inalienables. Sintiéndonos parte del poderoso movimiento internacional y del Estado español contra la guerra, reclamamos vuestra atención y protección no sobre nosotros y nosotras, sino sobre este pueblo y estos principios”.

Los “escudos humanos”
También permanecen en Bagdad los “escudos humanos”. Esta iniciativa, mucho menos organizada y coordinada que, por ejemplo, la de las brigadas internacionalistas, ha pasado por muchas tensiones, tanto internas (por la diversidad de la gente que acudió a dicho llamamiento, por acusaciones de estar infiltrados por la CIA...) como con las autoridades irakíes. Estas les intentaron organizar e imponer unos lugares específicos para “proteger” que los “escudos” no aceptaron, lo que implicó que parte de estos abandonaran Irak. El resto permaneció, siendo denostados por las autoridades norteamericanas: según un comunicado de los escudos “a través de una radio de onda corta, hemos recibido de la emisora “Voz de América”, perteneciente a la CIA, la siguiente información: los escudos humanos en Bagdad están dando protección al régimen de Sadam.” Por ello, hacen “constar que nuestra labor sigue siendo la misma por la que vinimos a Irak. Dar protección a la población civil así como a las infraestructuras que garantizan la seguridad de la vida en dicha población. Disfrutamos de plena libertad y únicamente estamos aquí por decisión propia y libre, pudiendo abandonar nuestra labor en el momento en que lo solicitemos”.
Nos relata su situación, al cierre de esta edición, Javier Balcells. “Somos en este momento unas 150 personas, contando 40 sudafricanos y 40 argelinos que llegaron el 20 de marzo. En cuanto a los españoles Guillermo, Beatriz, y yo estamos en la labor que nos trajo hasta Irak. Beatriz en un silo de comida y yo, junto con 10 personas más, en una planta de generación eléctrica de la cual depende el 30% del consumo Bagdad. Además de los miles de personas que viven en las inmediaciones del recinto.
El resto de escudos humanos se reparten entre plantas de tratamiento de agua, depósitos de comida, estaciones eléctricas, refinerías de petróleo y centro de comunicación. Todas estas personas están por voluntad propia con el único propósito de dar protección a la población civil. El trato con las autoridades, a través de la ONG iraquí, “Friendship, peace and solidarity” es, como con el resto de la población, de total cordialidad y respeto. Estamos avisados, por las mismas autoridades del riesgo que corremos y nos han ofrecido con gratitud que abandonemos el país en cuanto lo decidamos.”

Bagdag: 23 de marzo
 Para hacernos una idea de en qué consisten las labores actuales de los brigadistas en Irak, reproducimos parte de su comunicado, del 23 de marzo, tras el quinto día de ataques sobre Bagdad.

“Durante toda la madrugada del 22 al 23, los brigadistas han sido testigos de los impactos que han causado esta noche las bombas en las proximidades del refugio donde se encuentran. A las 3.10 de la madrugada , los cristales del edificio en cuyo sótano se ubica el refugio han reventado por efecto de las ondas expansivas. Las explosiones se han escuchado durante toda la noche hasta que a las 7.00 de la mañana, hora local, ha sonado el fin de la alarma aérea.

Heridos entre la población civil
La brigada ha salido esta mañana a visitar un nuevo hospital, el Universitario de Al Kindi, un centro especializado en Traumatología y Ortopedia situado en el Barrio de Palestina. El director, Osama Salah Taha, formado en Cuba, ha explicado en castellano a los brigadistas que en su centro ingresa cada día una media de 30 heridos como consecuencia directa de los ataques estadounidenses que se producen por las noches. Esta mañana han ingresado otras 38 personas heridas tras los ataques de ayer de los cuales dos han fallecido. Esencialmente se trata civiles, personas de todas las edades, aunque también han registrado algunos heridos del personal militar. Los brigadistas han visitado las habitaciones de los heridos. (..) En Bagdad hay tres hospitales generales y varios más especializados. Todos ellos recogen cada mañana a los heridos que provocan los misiles y las bombas durante la noche.
Cuando los brigadistas estaban hablando con algunos de los heridos ha llegado al Hospital una delegación de la Federación de Mujeres Iraquíes que portaban ramos de flores y cestos con pétalos, caramelos y dulces para los heridos. (..) Han comenzado a cantar canciones populares convirtiendo por un momento las salas del Hospital en un espacio de alivio(..).

Gravísimas deficiencias
en los Hospitales de Bagdad
El doctor Salah Taha ha explicado a los brigadistas las deficientes condiciones en las que se encuentra el Hospital para atender a los heridos y cómo se organiza su atención tratando los casos más leves de inmediato para que puedan abandonar el hospital y dejar plazas libres para los casos más graves. El Hospital no puede atender en condiciones básicas ni siquiera las intervenciones más simples al carecer de anestésicos. La dirección confirma que los medicamentos solicitados a agencias internacionales y a Médicos sin Fronteras no han sido proporcionadas hasta el momento.

La Universidad
Al Mustansiriyya afectada
por los bombardeos
Los brigadistas han podido ver esta mañana en el recinto de la Universidad Al Mustansiriyya que el edificio contiguo al Rectorado había quedado afectado por la onda expansiva de un misil que cayó sobre el patio, abriendo un inmenso boquete en lo que ha debido de ser un bombardeo errado. (..)

Ánimo y voluntad
de resistencia popular
en Bagdad
En su visita a los barrios afectados por los últimos ataques de la noche, los brigadistas se han desplazo hasta el barrio Nuevo Bagdad que estaba esta mañana lleno de gente en sus calles y en un inmenso mercado popular en el que han podido constatar la confluencia de bagdadíes cristianos, sunníes y shiíes que hacían sus compras en los innumerables puestos de frutas y alimentos. Las tiendas y mercados como éste están muy abastecidas con productos frescos, con carnes y verduras. En ese momento, a las 12.00 del mediodía han sonado otra vez las baterías antiaéreas y se han podido escuchar nítidamente desde allí el sobrevuelo de los aviones agresores y nuevas explosiones de bombas o misiles que caían sobre alguna parte de la ciudad.
“Miles y miles de personas armadas pasean por las mañanas, cuando cesan los bombardeos, entre la población en imágenes en absoluto hostiles ni agresivas: milicianos conversando bajo los puentes, soldados y civiles paseando con sus armas o hablando en los puestos del mercado con pequeños grupos de mujeres, o en las esquinas ocupando las trincheras relajadamente con su Kalasnikov al lado mientras comen pipas rodeados de niños”. (..)
Las noticias del frente del sur -que indicaban esta mañana que las tropas terrestres británicas y estadounidenses han tenido que replegarse en Um Qasr y no han podido entrar en Basora, ni en Nasiriyya ni en Nayd por la resistencia armada iraquí que les está haciendo frente- “han fortalecido el ánimo de la gente que se muestra efusiva. (...) La expectativa de que la entrada de las tropas agresoras de EEUU y Gran Bretaña encontrará una amplia resistencia en Bagdad presagia, no obstante, jornadas trágicas y un fuerte derramamiento de sangre.”

subir