Informe de la Coordinadora de Solidaridad con las Personas Presas

 

 

El 30 de mayo de 1.999, SERGIO SAMPEDRO ESPINOSA fue agredido por funcionarios de la prisión de CURTIS- TEIXEIRO (A Coruña)

El 29 de mayo, Sergio Sampedro Espinosa llegó a la prisión de Curtis (Teixeiro) procedente del Centro Penitenciario de Villabona (Asturias)[1]. Al llegar le hacen entrega de un folleto con las normas del centro, en las cuales se indica que los recuentos se pasarán con el interno “de pie, con las manos visibles, al fondo de la celda y bien vestido” . A las 21,30 horas de ese día se produce el primer recuento, y por entender que dichas normas no son legales, Sergio Sampedro no se levanta. El funcionario que realiza el recuento le amenaza diciéndole “te vas a enterar”.

Al día siguiente, a las 8.00 horas, se produce un nuevo recuento por parte de los funcionarios de la prisión. Sergio Sampedro insiste en que el Reglamento Penitenciario sólo le obliga a permanecer bien visible durante los recuentos, por lo que se niega a levantarse y así se lo hace saber al funcionario que efectúa el recuento.  Poco después se presente en la celda de Sergio Sampedro el Jefe de Servicios, a quien Sergio Sampedro conocía desde que estuvo, tiempo atrás, ingresado en la prisión de Monterroso (Lugo) donde este funcionarios estaba, por su parte, destinado. Este funcionario vuelve a amenazarle y le dice “te daremos una lección”.

Sobre las 17.00 horas del día 30 de mayo, Sergio Sampedro solicita, a través del interfono de la celda, efectuar una llamada telefónica. Unos minutos después, se presenta en su celda el mismo Jefe de Servicios indicado en el punto anterior, acompañado de varios funcionarios portando porras. El citado Jefe de Servicios propinó un puñetazo en la cara a Sergio Sampedro, quien a continuación es golpeado por los restantes funcionarios con las porras, siendo inmovilizan.

En esta situación, Sergio Sampedro solicitó asistencia médico, presentándose en la celda quien se presentó como la médica de la prisión. Cuando Sergio Sampedro estaba mostrando las marcas de los golpes recibidos, el mismo Jefe de Servicios, en presencia de la doctora, comenzó a golpearle con los puños, agresión a la que se sumaron otros funcionarios que le propinaron nuevos golpes con las porras, causándole varias lesiones, entre ellas una brecha en la frente, y dejándole inconsciente. Cuando la doctora finalizó la sutura de la herida en la frente, el Jefe de Servicios agrede de nuevo a Sergio Sampedro, quien se encuentra tumbado. Para defenderse de esta nueva agresión, Sergio Sampedro golpea con el puño la boca del funcionario. En ese momento, los demás funcionarios presentes se unen a la agresión del Jefe de Servicios contra la persona de Sergio Sampedro. Cuando finalizó esta agresión.

                Para lograr ser trasladado a un centro médico y ser asistido de las lesiones que había sufrido durante las agresiones, Sergio Sampedro simuló haber tragado varios efectos (medicamentos, pilas, etc). Sobre las 21.30 horas, nuevamente se presentó en su celda la médico de la prisión y varios funcionarios. Tras pasarle un detector de metales por el estómago, Sergio Sampedro fue esposado con las manos a la espalda y uno de los funcionarios intentó introducirle un mechero en la boca al tiempo que decía “este hijoputa lo que quiere es ir al hospital. Toma, trágate esto” (refiriéndose al mechero), al mismo tiempo varios funcionarios le propinaron golpes con las porras y con una walki-talkie, tras lo cual abandonaron las celdas. Esa misma noche, a las 3 de la madrugada del día 31 de mayo, se volvió a producir una nueva agresión cuando Sergio Sampedro solicitó que apagasen la luz de la celda y poder dormir. En esta ocasión los golpes se centraron en las rodillas de Sergio Sampedro.

                El 1 de junio, Sergio Sampedro, cursó una instancia al Juzgado de Guardia de La Coruña (se adjunta copia de la misma), en la que se ponía en conocimiento del juzgado las agresiones sufridas y se solicitaba el ser reconocido por un médico forense así como se solicitaba protección judicial ante las amenazas de muerte proferidas por uno de los funcionarios.

                Las asociaciones PRE-SOS, Cruz Negra Anarquista y ACT formularon sendas denuncias ante el Juzgado de Betanzos. No se ha recibido, hasta la fecha, comunicación o notificación alguna del Juzgado.

                Posteriormente, A finales de agosto y principios de septiembre de 1999, la dirección de la prisión de Teixeiro, ordenó la intervención de la correspondencia de Sergio Sampedro alegando que la misma “aborda torturas, malos tratos de los funcionarios a los presos” lo que “puede afectar  en un índice alto de probabilidad el orden y seguridad (del centro) atentando contra la dignidad de la función penitenciaria”.

 

 

Hemeroteca:

 

 

Ideal Gallego, 19 de octubre de 2004

Suspendida la vista contra un recluso acusado de agredir a dos funcionarios

El fiscal ha pedido le sobreseimiento del caso contra los funcionarios

http://www.elidealgallego.com/ID20041019/coruna/coruna09.html

 

 

 

 

 



[1] Ver caso anterior.