Los trabajadores Rurales:
Entre la Espada y la Pared
Por Ulises Sadoul
Investigador y Analista Social
Este texto recopila antecedentes de lo que
es una más de las bondades del capitalismo. Estoy haciendo referencia
al uso de pesticidas en las labores agrícolas. Realidad cruel e
inhumana con la conviven día a día los trabajadores rurales
y temporeros, sometidos al sistema de la ecología capitalista.
Sometidos a un trabajo explotador propios de la
sociedad esclavista, los trabajadores del área rural están
expuestos a contraer y desarrollar enfermedades con consecuencias infrahumanas
por el uso indiscriminado de pesticidas sin la menor consideración
por los trabajadores, ya que estos manipulan y operan estos productos tóxicos
sin o con la menor seguridad . A esto es lo que llama el capitalismo
‘‘bondad’’ , ya que los empresarios del rubro generan empleos, a
bajo costo sin importarles las consecuencias inhumanas que trae trabajar
con pesticidas, y sin contar por supuesto, con las demás bondades:
como lo son los bajos sueldos, inexistencia de condiciones necesarias de
seguridad. Por supuesto son trabajólicos obligados a trabajar varias
horas mas de lo normal , pues por eso mencioné sociedad esclavista
por el hecho que son obligados a trabajar mas de la cuenta, sino el capitalismo
le otorgar la bondad de irse .
Ahora pondré en antecedentes el material
recopilado de los pesticidas ,para así mostrar sus inhumanas
consecuencias y poner énfasis en las medidas de seguridad que se
deben utilizar en este trabajo, medidas las cuales tampoco son usadas ya
sea por la falta de información que tienen estos trabajadores, pero
principalmente por la reducción de costos que hacen los empresarios
del rubro para así hacer crecer sus fondos y por supuesto, ayudar
a que el país crezca, se desarrolle y este a la par con Estados
Unidos y la Unión Europea, cosa que Chile tenga un lugar en este
mundo globalizado , sin importar los costos humanos que trae este tema.
IMPACTOS SOBRE LA SALUD DE LOS AFECTADOS
La exposición a pesticidas
se ha transformado en el principal riesgo que deben enfrentar los trabajadores
temporeros de la agricultura y del sector forestal. Numerosos trabajadores
han resultado intoxicados por pesticidas que han manipulado con total desconocimiento
de los riesgos involucrados, sin la protección adecuada o porque
los pesticidas han sido fumigados sobre áreas de trabajo a las que
ingresan los temporeros sin respetar el tiempo necesario para que estos
productos no les intoxiquen. Varios trabajadores, e incluso niños
"temporeros", han muerto por intoxicación con pesticidas.
En las regiones del país con mayor consumo de pesticidas
se están registrando elevadas tasas de malformaciones congénitas
en niños recién nacidos cuyos padres son temporeros y aunque
los Gobiernos de pos-Dictadura han negado sistemáticamente la existencia
del problema, se han habilitado algunos casinos en las empresas que usan
temporeros para que estos sean alimentados mejor, con el propósito
de que estos "resistan bien" las intoxicaciones con pesticidas
Cuando se habla sobre el efecto nocivo de los pesticidas,
inmediatamente se piensa en las intoxicaciones agudas, porque son las más
evidentes y dramáticas.
Los efectos inmediatos de este tipo de intoxicaciones
son: vómitos, desmayos, úlceras, mareos. Todo el mundo teme
a este tipo de intoxicaciones, porque es fácil asociarlas al agente
causal: los pesticidas. El periodismo se ha encargado también de
difundir este efecto, por el impacto dramático de la noticia y porque
no hay dudas sobre la causa de la intoxicación, sin contar por supuesto
que este tipo de noticia vende y lucra a los intereses detrás de
la prensa.
Sin embargo, existe otro tipo de intoxicación, llamada
intoxicación subclínica o sin síntomas inmediatos.
En este tipo, es más difícil determinar cuál fue el
agente causal, ya que los efectos se observan tiempo después. Los
ejemplos más renombrados esta intoxicación son: abortos sin
causa aparente, malformaciones congénitas y alteraciones en el sistema
reproductivo. El desarrollo de tumores cancerígenos es también
otro ejemplo.
Se sabe de a lo menos cuatro pesticidas que se usan
en Chile, que están asociadas al desarrollo de cáncer, de
acuerdo con investigaciones realizadas en el extranjero: captan, benomilo,
permetrina y diazinon.
Casi todos los pesticidas afectan el sistema nervioso y la exposición
continua provoca irritación y desgaste nervioso. La persona tiene
su sistema nervioso alterado, está irritable y/o depresivo. A menudo,
la prensa informa de agricultores que se suicidan o agreden mortalmente
a sus familiares o amigos. ¿Qué relación existe, entre
la exposición continua de las personas que aplican pesticidas o
son obligadas a trabajar en lugares recientemente desinfectados, y el desarrollo
de estos efectos? Lamentablemente, demostrar la responsabilidad de los
pesticidas en este tipo de efectos, requiere de estudios estadísticos
que son costosos y el país no tiene la voluntad de efectuarlos.
Es urgente que el agricultor tome conciencia de la gravedad
de esta situación, y reduzca al máximo el uso de pesticidas.
Cuando sea inevitable aplicarlos, que tome todas las medidas de seguridad
recomendadas a continuación.
¿Cómo usar los pesticidas con un mínimo riesgo
de intoxicación?
1. Precauciones al comprar.
-
Los productos deben estar en su envase original. No compre productos reenvasados.
Aparte de ser ilegal, hay gran riesgo de derrame y contaminación.
La fecha de elaboración y vencimiento deben verse claramente. Un
producto vencido, no sólo ha perdido su eficiencia, sino que puede
desarrollar reacciones desconocidas, tanto en las plantas como en los operarios.
-
No acepte etiquetas en inglés, sino, ¿Cómo se va a
informar de las advertencias del producto?
-
Se debe distinguir claramente el color de la etiqueta, ya que éste
señala el grado de toxicidad del producto. El rojo señala
lo más tóxico, le sigue el amarillo, azul y finalmente, el
menos tóxico (pero no menos peligroso para la salud) es el verde.
2. Precauciones al preparar la mezcla o dilución.
-
El operario, deberá usar el traje de seguridad completo, al momento
de medir los productos y durante toda la faena de mezcla, porque este es
el momento en que el producto está concentrado y el riesgo de contaminación
es mayor.
3. Precauciones al aplicar el pesticida.
-
Los pesticidas ingresan al cuerpo a través de la piel, ojos, nariz
y boca.
I. Para evitar la intoxicación a través
de la piel.
-
Desinfectadora en buen estado, que no chorree.
-
Uso de ropa impermeable y lo más liviana posible. El cuello y las
muñecas deben ser ajustados o elasticados.
-
Uso de guantes de caucho o nitrilo, de puño largo, que se pone por
debajo de la manga.
-
Capuchón o sombrero impermeable que cubra totalmente la cabeza y
el cuello. No use gorros de lana, ya que absorben los químicos.
-
Uso de botas de caucho. Es importante que los pantalones vayan por fuera
de las botas.
II. Para evitar la intoxicación a través
de los ojos y cara.
-
Uso de anteojos o antiparras protectoras o una pantalla facial. El producto
puede ingresar a través de las lágrimas, donde se disuelve
y puede desarrollar graves reacciones alérgicas.
III. Para evitar la intoxicación a través
de nariz y boca.
-
Uso de mascarillas de acuerdo con las características del producto
aplicado. Los filtros protectores se basan en carbón activado y
funcionan cuando el aire con el pesticida circula a través del carbón.
Es importante que, una vez utilizados, los filtros sean guardados envueltos
en bolsas, para que el aire no circule por ellos. De lo contrario, el filtro
continúa trabajando, aunque esté colgado en la bodega y por
lo tanto disminuye su vida útil. Un filtro saturado es altamente
peligroso porque el operario, pensando que está protegido, puede
exponerse peligrosamente.
-
Los trajes son muy incómodos y calurosos y las personas se resisten
a usarlos apropiadamente. Hoy en día, existen trajes impermeables
que son muy livianos cómodos y económicos. Si usted tiene
operarios a su cargo, oblíguelos a usarlos y mantenga abundante
líquido fresco para evitar deshidratación. No acepte excusas.
Así, usted esta protegiendo a su gente y evitará exponerse
a fuertes multas. Si usted mismo es el que desinfecta, voluntariamente
oblíguese a usar el traje. Piense en su salud y el futuro de su
familia y sus hijos.(1)
Según INDAP,
estas medidas son las que deberían tomarse para trabajar
con pesticidas, pero la realidad es que estos trabajadores no usan ninguna
de las medidas de seguridad mencionadas antes, a lo sumo usan mascarillas
y guantes por la economía preventiva que usan los empresarios o
terratenientes al no proteger como corresponde a los trabajadores para
así contribuir a la economía mundial.
LOS SUELDOS DE LA MANO CON LA GLOBALIZACION
CAPITALISTA
Es importante destacar es que, en este sector, los trabajadores
, principalmente las trabajadoras informales o aquéllas que trabajan
por cuenta propia reciben sueldos hasta 40% menores que las asalariadas
urbanas. Estos empleos, además, a menudo carecen de protección
social y no aseguran el cumplimiento de los derechos laborales básicos.
A ello se añade el hecho de la responsabilidad del cuidado de los
niños, a menudo asumido por mujeres, las que deben optar por buscar
empleos de menor categoría que permitan combinar esta función
con el trabajo. Un claro ejemplo de ello es el caso de las 'temporeras'
o trabajadoras eventuales en la agricultura de exportación, las
que son afectadas por pesticidas y por las hormonas que se usan para la
producción agrícola, químicos que son altamente dañinos
para la salud, y que a menudo han sido prohibidos en sus países
de origen (2)
LA CRUELDAD NO TIENE FRONTERAS
En 1996, el niño Diógenes Machuca
Pereira (16 años de edad) murió tras resultar intoxicado
con Pentaclorofenol (PFC) cuando trabajaba de "temporero" para la empresa
forestal Maderas "Laguna Azul", en la ciudad de Cauquenes (VII R). Allí
compartía labores con su madre. El niño había sido
integrado a un grupo de trabajo de la maderera que se encargaba de impregnar
maderas con PFC para evitar la aparición de hongos. Según
la madre de Diógenes, el grupo no usaba medidas de protección
para manipular el pesticida, pues los jefes les aseguraban que "el líquido
no es peligroso". El niño resultó intoxicado el 28 de Febrero
de 1996 y tras experimentar vómitos, jaquecas y hemorragias, falleció
al día siguiente. La autopsia reveló alta concentración
de PFC en la sangre y tejidos del menor fallecido. El PFC es uno de los
pesticidas que está incorporado en la llamada “docena sucia” por
los especialistas en el tema.
El uso de pesticidas (especialmente PFC) es masivo
en la industria forestal de todas las regiones con actividad maderera.
En ellas se han manifestado decenas de casos de intoxicaciones de trabajadores
forestales con pesticidas y últimamente se ha iniciado la investigación
sobre malformaciones congénitas en recién nacidos hijos de
trabajadores expuestos a estos agroquímicos.(3)
AGROTOXICOS PARA EL TERCER MUNDO
Alrededor del 30 por ciento de los plaguicidas comercializados
en los países en desarrollo ‘’ por un valor comercial que se calcula
en 900 millones de dólares al año’’ incumple las normas internacionales
de calidad. Esto representa una grave amenaza a la salud de los seres humanos
y al ambiente, como han declarado la Organización de las Naciones
Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
Hay que distinguir entre los tratamientos orgánicos,
aplicados como defensa y para fortalecer las plantas, de lo que los agrónomos
conscientes han denominado con el término agrotóxicos que
designa a los biocidas de la industria agroquímica. Con el término
genérico "pesticida" o "plaguicida" se engloba a insecticidas, herbicidas
y fungicidas empleados sobre todo en la agricultura, pero también
en el ámbito de la sanidad pública, como por ejemplo, los
insecticidas contra los insectos que provocan la malaria.
En el 2000, el mercado mundial de plaguicidas ha
alcanzado los 32.000 millones de dólares, y la cuota correspondiente
a los países en desarrollo ha sido de 3.000 millones de dólares.
Entre otros motivos, la baja calidad de los plaguicidas se debe a una producción
defectuosa y a una selección inadecuada de las sustancias químicas;
en algunos casos, la concentración del ingrediente activo está
fuera de los límites de tolerancia aceptados. La etiqueta, que es
a menudo la única fuente de información que tiene el consumidor
sobre el producto, no suele facilitar datos correctos sobre el ingrediente
activo, el empleo, la fecha de fabricación, y la manera de utilizar
con seguridad la sustancia química. Tanto la FAO como la OMS han
invitado a los gobiernos y a las organizaciones internacionales a adoptar
unas recomendaciones sobre calidad de los plaguicidas que los países
tendrían que hacer jurídicamente obligatorias. Esas normas
de FAO y OMS resultan especialmente importantes para países que
carecen de infraestructuras de control adecuadas. Todas las industrias
de plaguicidas, entre ellas las de genéricos, deberían que
pasar esos controles de calidad.
La 'plaga de los pesticidas tóxicos', como subraya
Mohamed Larbi en Le Monde Diplomatique, es un fenómeno que puede
tener efectos devastadores. Grandes multinacionales de químicos
continúan vertiendo en los países del Sur, decenas de miles
de toneladas de pesticidas cuyo uso está prohibido en los países
occidentales.
Las transferencias de pesticidas a países africanos,
por ejemplo, representan el 80% de las importaciones de productos agroquímicos
en el continente. Gran parte de ellos, acaban ocasionando serios problemas
con la acumulación de miles de toneladas de pesticidas excedentes.
Es el caso de Sudán, Marruecos, Benin y Guinea Bissau entre otros
países, que no saben cómo deshacerse de ciertos 'regalos'
envenenados. Eliminar los excedentes por incineración supone riesgos
de emanaciones gaseosas y residuos de combustión, además
de atraer hacia las incineradoras del Sur a los traficantes de residuos
tóxicos, dado el alto precio que supone ese almacenamiento en el
Norte.
Los cargamentos han sido de bromuro de metilo, un fumigante
peligroso, o de viejos productos no degradables, como el DDT, el lindano,
la dieldrina o el HCH, prohibidos en los países del Norte desde
hace décadas. Desde EEUU se han expedido en los últimos años,
productos tan tóxicos como el mirex, el clordano o el heptaclor
a países como Guatemala, Brasil ,Sri Lanka y Colombia. Algunos de
los productos son mutágenos, carcinógenos y teratógenos,
que suelen asociarse con el cáncer y la esterilidad. Por no hablar
del benlate o benomyl al que se le atribuye el caso de anoftalmia de un
niño que nació en 1990 sin ojos por haber estado la madre
expuesta al fungicida. En junio de 1996 un tribunal de Miami condeno a
la Multinacional DuPont a pagar una indemnización de cuatro millones
de dólares a la madre del bebe afectado de anoftalmia(4).
En 1982 Naciones Unidas adoptó una lista de pesticidas
prohibidos o retirados, pero no prohibió el uso ni la fabricación.
Los países del Sur, que utilizan apenas el 20% de la producción
mundial, registran el 99% de las muertes provocadas por esas sustancias,
pues aunque en el Norte también se usan, es en el Sur donde carecen
de equipos y personal apropiados, y no existen suficientes medidas de protección
al consumidor, al trabajador del campo y al medio ambiente.
Se hace necesario, pues, no solo vigilar la exportación
de productos tóxicos del Norte hacia el Sur, sino cuestionar la
lógica que apoya el uso de tales productos y promover métodos
alternativos para reducir o eliminar su uso. Una agricultura sostenible
pasa por la eliminación de los agrotóxicos. Parece tarea
complicada, cuando son las 20 multinacionales que controlan el 94% de este
mercado quienes deberían dar marcha atrás. La búsqueda
del beneficio y la preservación del secreto de fabricación
pesan en muchas ocasiones más que la salud de las personas, las
generaciones que vienen y el futuro del planeta(5).
LAS TRES OPCIONES QUE OFRECE EL SISTEMA
En definitiva, como lo fue mostrado antes, la bondad
del capitalismo no tiene limites, tanto así que el sistema les ofrece
tres opciones para las personas que trabajan con pesticidas. Las opciones
son las siguientes:
1.- Trabajar con las mismas condiciones inhumas tomando
la opción de no tener hijos para que ellos no sufran las consecuencias,
pues los hijos de estos trabajadores son desafortunadamente los mas perjudicados
2.- Trabajar y querer formar una familia con hijos, sabiendo
que tendrán que sufrir con las mas crueles de las consecuencias
hasta e final de sus días.
3.- Sencillamente no trabajar en la sociedad esclavista en la
cual se ven inmersos.
En el caso de que los trabajadores estén
por la opción 1 ó 2 lo único que pueden hacer es organizarse,
formando sindicatos para obtener mejores condiciones de trabajo, eso implica
mejores sueldos, trato digno del capataz hacia los trabajadores, en fin,
todas las necesidades básicas que requiere un ser humano para vivir
dentro de su ambiente laboral.
Pero la opción que en rigor se debe
tomar es la 3, lo digo porque la labor que hacen los trabajadores
con pesticidas en realidad la tienen que hacer los Ingenieros Agrónomos,
pues ellos están capacitados para crear sistemas de riego a gran
escala , cosa que los sistemas hagan todo el trabajo. Se debería
hacer así, pero los empresarios para abaratar costos no invierten
en estos sistemas, pues le sale mas barato que seres humanos hagan este
inhumano trabajo. El punto principal es que este trabajo no debe ser hecho
por personas sino por sistemas de riego, sencillamente debe ser así
por una cosas de integridad humana . Pero, si no trabajan en esto, ¿
entonces en que ?. El sistema no les da más opciones de las que
mencione.
Esta es ‘‘ La Espada y la Pared’’ a la cual
me refiero.
Bibliografía:
1)- Mi Empresa Rural ‘’Agro informativo v región ‘’ http://www.indap.cl/indapquinta/sipre/inf43/informativo43.htm#content_tecno
2)- Memoria Encuentro –Taller Mujer y Globalizacion –
Santiago de Chile, octubre 1999
3)- Diario ‘’La Tercera’’ de Chile, 29 junio 1997
4)- Diario ‘‘La Cuarta’’ de Chile, 9 de junio 1996
5)- Centro de Colaboraciones Solidarios
