SIEMPRE FIELES A LA CITA |
Quizá porque se repite el uno de mayo siempre. La apatía nos tentó Pedro la vencimos siempre mis compañeros y yo.
Pues son firmes los principios que nuestros ideales basan y no dejamos rendijas que los desánimos pasan
Y no es ninguna proeza muertos de todos nosotros Infinito es el precio que os cobraron a vosotros
De nosotros os quitaron y por nosotros moristeis Fuertes eran vuestros credos limpios nos los transmitisteis
Descansad amigos muertos que nosotros moriremos Pero si existe otro mundo también os recordaremos
Porque pusisteis las bases para construir naciones con gentes en libertad y limpias de dictadores
Si las gentes venideras os ignoran y os olvidan Que no revindiquen nada que no hablen que no digan
Todos los que aquí estamos sufrimos pensando en ello El tobogán del consumo les hace olvidar aquello
Nosotros queridos muertos con vuestro amparo y apoyo haremos lo que podamos para que no llenen más hoyos
Que no hagan argamasa “pa” levantar monolitos y no haya simas llenas y cada muerto en su sitio
Pero quiero yo deciros en nombre de los presentes que jamás he visto rojos con una fe tan potente
Pues después de 60 años o quizá 64 Todavía estáis presentes los doce meses del año
Pues además de no hastiarnos Esperamos este día como esperan los hambrientos su pan tierno cada día
Y venimos con respeto con carió y devoción venimos por ideales y
absoluta admiración
Pues sois todos nuestros muertos amigos y familiares y habéis dado un giro al mundo a pesar de los pesares
Y si ahora se confunden Progres y conservadores Nosotros los distinguimos aunque vengan sin colores
La democracia empezó a forjarse en vuestra fosa y os costo la vida a todos pero hicisteis bien las cosas
Y porque el precio fue inmenso y disteis vuestra sangre roja dejaremos el testigo y el que venga que lo coja.
Ahora os decimos adiós o hasta luego si queréis porque en nuestros corazones nunca jamás moriréis
Vuestra sangre derramasteis Precio de nuestra libertad Rojos fuisteis con orgullo y rojos fuisteis de verdad
Y si os olvida la historia nosotros lo arreglaremos pues en el mismísimo cielo vuestras
glorias contaremos
Miguel Hernández Sánchez |