Al cumplirse el séptimo aniversario de la recuperación del Poder Popular por el pueblo venezolano, Plataforma Bolivariana organizamos dos actos conmemorativos del acontecimiento y un taller sobre el Proceso Bolivariano, en los que contamos con la colaboración de Fernando Soto Rojas, dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), que se trasladó a Madrid desde Venezuela gracias al apoyo prestado por CVG Internacional y la Fundación Mariscal de Ayacucho.

Fernando Soto Rojas es histórico dirigente que desde la juventud viene militando tanto en frentes políticos como militares, primero contra la dictadura de Pérez Jiménez, articulado en la Junta Patriótica; posteriormente, cuando el gobierno derechista de Betancourt ilegalizó a los partidos de izquierda en los años 60, incorporado a la lucha armada en el Frente Guerrillero Ezequiel Zamora. Ha seguido cursos de táctica guerrillera en Cuba y en 1977 se incorporó a la Resistencia Palestina. En la década de lucha armada en Venezuela, cuando el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR) decidió abandonarla, fundó junto con otros luchadores que no estaban de acuerdo con esa decisión, la Organización de Revolucionarios, cuya estructura legal era la Liga Socialista, de la que fue secretario general, hoy disuelta tras la integración de sus militantes al PSUV. Ha sido subjefe del Comando Maisanta (colectivos de base que llevaron el peso de la campaña a favor de Chávez durante el referéndum revocatorio de 2004) en el Estado Mérida y miembro de la Comisión Presidencial Preparatoria del PSUV. Actualmente forma parte del Foro Constitución y Paz, así como de organizaciones internacionales, como el Foro de Sao Paulo, el Foro Social Panamazónico. Es director de la Escuela de Gobierno Jorge Rodríguez (escuela de formación ideológica del PSUV) y formador del Frente Francisco de Miranda.

Acto público central

Se desarrolló el jueves 16 de abril en el espacio La Tercera, situado en la calle Gonzalo de Córdoba 22, contando con la asistencia de numeroso público.

Fue presentado y moderado por Carolina Carrillo, integrante de la Junta Directiva de Asociación de Solidaridad Bolivariana, e intervinieron en la mesa de debate Alfredo Toro Hardy, Embajador de la República Bolivariana de Venezuela; Manuel Monereo, analista político especializado en América Latina e investigador del Centro de Estudios Políticos y Sociales y Fernando Soto Rojas.

Antes de iniciarse la mesa de debate proyectamos, como estreno en Madrid, el documental Rebelión Radio Bemba (boca), de 25 minutos de duración, producido por Venezolana de Televisión y realizado por David Segarra y la Cooperativa Altermedia, en el que participan dirigentes de base y representantes de los medios alternativos y comunitarios venezolanos, dando testimonio de las acciones populares que abortaron el golpe de estado.

Acto público en la Facultad de Filosofía

El miércoles 22 de abril, en la Facultad de Filosofía de la Universidad Complutense de Madrid, desarrollamos el segundo de los actos, destinado al público universitario.

El acto fue presentado por Bernardo LLamas, estudiante de la UCM y miembro de Plataforma Bolivariana, y por Giniveth Soto Quintana, estudiante venezolana en la UCM y miembro del Frente Bolivariano de Estudiantes Fundayacucho. La intervención central corrió a cargo de Fernando Soto Rojas.

Taller sobre el Proceso Bolivariano

El Viernes 24 de abril, en el espacio La Tercera, Fernando Soto Rojas impartió un taller de cuatro horas de duración sobre el Proceso Bolivariano.

Consistió en una explicación de la historia y situación política actual de Venezuela, enmarcándola en la crisis del capital y las exigencias de la coyuntura política mundial, para documentar la transición política hacia el socialismo bolivariano y exponer los  dos debates teóricos que están planteados: el problema del Estado y la concepción del Partido. Abordó, entre otros, el surgimiento de los partidos políticos modernos en Venezuela y las causas de su descomposición, la transición de la estructura clásica del estado hacia el Poder Popular y las Comunas y los principios fundamentales del PSUV.

El taller contó con la asistencia de un buen número de venezolanos y venezolanas, además de las personas que habitualmente acuden a nuestros actos.

La recuperación del Poder Popular en Venezuela
Los sucesos del 11 al 14 de abril de 2002

En diciembre de 1998 Hugo Chávez Frías gana las elecciones presidenciales con el 56,2% de los votos. Tras ser investido como presidente de Venezuela (febrero 1999), propone la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente que redacte un nuevo texto sobre el que fundar la V República. Aprobada la propuesta en abril, mediante referéndum popular, la Asamblea se instala y elabora la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que será sometida a refrendo popular el 15 de diciembre de 1999 siendo aprobada.

En abril de ese mismo año el Presidente Chávez solicitó al Congreso Nacional la habilitación para gobernar mediante decreto-ley, a fin de enfrentar la desastrosa situación económica del país. Obtenido el permiso del Legislativo promulga 44 Decretos con Fuerza de Ley,  que serían contestados por la oposición, especialmente los relativos a Seguridad Social, Hidrocarburos, Turismo, Pesca, Tierras, Registros Notariales y Zonas Costeras.

Simultáneamente, Chávez inicia una política exterior incómoda tanto para los intereses de la oligarquía venezolana  como de los Estados Unidos: Se ofrece al entonces Presidente Pastrana para mediar en el conflicto colombiano y es nombrado por éste facilitador en las negociaciones de paz (mayo 1999). En julio plantea en la cumbre del CARICOM extender las facilidades petroleras a los países miembros, incluida Cuba. Con este país suscribe un convenio petrolero (febrero 2000) y un convenio integral de salud (enero 2001) y en agosto se instala la 2ª Comisión de Cooperación entre Cuba y Venezuela. Además, el Gobierno Venezolano se posiciona en contra de la guerra de Iraq y la política antiterrorista de Washington.

Aprobada la Constitución Bolivariana, son convocadas elecciones para legitimar los cargos de elección popular conforme al nuevo texto. Los partidarios del Proceso Bolivariano pasan a controlar la Asamblea y la gran mayoría de los Estados y Municipios. El Presidente Chávez es legitimado con el 59,8% de los sufragios (julio 2000).

Utilizando como excusa la destitución de la cúpula dirigente de la empresa venezolana de petróleo (PDVSA), la asociación patronal  FEDECÁMARAS y la corrupta Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) convocan en abril de 2002 una huelga general con la intención de forzar la salida del Presidente Chávez. El 11 de abril la huelga se convirtió en disturbios y una manifestación a favor de la meritocracia, que debía concluir ante la sede de PDVSA, fue desviada hacia el palacio presidencial de Miraflores, en cuyo entorno se habían concentrado los defensores del Proceso. Francotiradores opositores dispararon contra sus propios manifestantes, al tiempo que la Policía Metropolitana bajo el mando del Alcalde Mayor, el golpista Peña, disparaba contra la población que defendía los accesos a Miraflores. Los medios de comunicación manipularon las imágenes, atribuyendo las muertes ocasionadas por los golpistas a los defensores de Puente Llaguno. Las imágenes difundidas a todo el mundo, sirvieron de excusa para que un grupo de generales desconocieran el gobierno constitucional del Presidente Chávez, ocuparan el palacio presidencial y lo arrestaran. Se difundió la falsa noticia de que el Presidente había dimitido y Carmona, presidente de la patronal, asumió la presidencia de la República, ordenando la disolución de la Asamblea Nacional,  el Tribunal Supremo, el Consejo Nacional Electoral, la remoción del Fiscal General, el Contralor de la República y el Defensor del Pueblo, así como el apresamiento de ministros y demás autoridades legítimas. Se ordenó la clausura de Venezolana de Televisión: El golpe de estado se había consumado.

Durante esos días de protestas populares y represión policial, la población sólo recibió información fehaciente e independiente a través de los medios comunitarios y alternativos, que salieron a la calle con sus modestos equipos para cubrir la información que los medios golpistas ocultaban. La población se expresó y comunicó a través de teléfonos móviles, internet, pintadas, cacerolazos y motoristas, organizándose para recuperar la televisora pública, cercar el palacio presidencial e impedir la toma de posesión del nuevo gobierno y sitiar los principales cuarteles, obligando a los mandos a tomar partido por el gobierno legítimo.  Paracaidistas de la base de Maracay volaron hacia  la isla de La Orchila para liberar al Presidente Chávez, donde había sido recluido.

En la noche del 13 al 14 de abril, a menos de 48 horas del golpe, el Presidente Chávez regresaba a Miraflores y reasumía la primera magistratura. El Poder Popular había sido recuperado.