Índice:

Reunión de Quito

El ALCA y la crisis de destino

Las caravanas, más que una minga de palabras

Segunda Convención Nacional contra el ALCA

Reunión de Quito
2 de agosto de 2002

Diversos colectivos, redes y organizaciones, reunidos en Quito en preparación para las movilizaciones frente a la Reunión Ministerial del ALCA en noviembre próximo;

queremos hacerles llegar un saludo solidario a los compañeros y compañeras en Guayaquil, quienes se encuentran manifestando su rechazo a la política de muerte que promueven los gobernantes de la mayoría de nuestros países latinoamericanos.

A pesar de que no podemos acompañarles en las calles de su ciudad; en Quito, La Paz, Lima, Bogotá y muchas ciudades más, nos disponemos a movilizarnos en contra de dicha cumbre de presidentes y además estamos construyendo alternativas frente a este sistema de dominación y explotación.

Nosotros sabemos que la “integración” que promueven estos “señores” de dinero no es nada más ni nada menos que la continuación de la colonización y el saqueo total de nuestros pueblos, de nuestros recursos naturales y nuestro patrimonio cultural. Por medio de las privatizaciones, buscan legitimar el despojo de todo nuestro patrimonio: el agua, las empresas eléctricas, la salud y la educación, hasta Machu Pichu y otros símbolos y lugares importantes de nuestra identidad. 

La implementación cada vez más absoluta de este modelo político y económico ha ocasionado la pérdida de nuestra autonomía al punto de hacernos dependientes de las semillas del Monsanto, del agua vendida por Coca-Cola, y de las nuevas tecnologías, imposibles sin el robo de nuestros recursos primarios. De esta manera, nos privan no solamente de nuestros derechos más básicos sino de cualquier posibilidad de una soberanía alimentaria o la de definir las políticas para el bienestar de nuestros pueblos.

Esta “integración”, la “integración” de intereses vendepatrias, no es posible sin otro componente importante: la militarización, la criminalización y la represión. Para poder implementar el ALCA, recurren al control y vigilancia de nuestras vidas, estableciendo bases militares a lo largo de nuestro continente. En Ecuador, Colombia, Bolivia, Brasil, Guatemala, El Salvador, Aruba, Puerto Rico y Costa Rica, están violando nuestra soberanía latinoamericana con ocupaciones militares -nueva cara de la colonización- cuyo propósito es silenciar nuestras voces de protesta, así escondiendo sus verdaderas intenciones. Los nombres pueden cambiar –Plan Puebla, Panamá, Plan Colombia, Iniciativa Regional Andina o Plan Dignidad– pero todos enmascaran un mismo proyecto de genocidio: el ALCA.

Asimismo, en diversas formas vivimos una creciente criminalización de la protesta y los movimientos sociales. Con cámaras de vigilancia en las ciudades, nuevas leyes de seguridad nacional y mayores controles de migración, cada vez más excluyen la posibilidad de manifestar nuestro rechazo. Frente a esta inconformidad, sólo responden con cárceles y balas.

Esta situación se manifiesta aún más descaradamente en Colombia. No podemos dejar de mencionar la extrema situación que vive este pueblo. Con el ascenso del presidente electo Álvaro Uribe al poder y la creciente intromisión norteamericana en el país, para Colombia se avecina una intensificación nunca vista del conflicto, con más desplazamientos forzados, más masacres, y más represión estatal de todos los movimientos sociales del país. En lugar de apostar por una vía política y dialogada, los Estados Unidos y la élite colombiana han optado por el camino más sangriento, no para dar término a la guerra sino para mantener sus intereses dentro del modelo neoliberal.

El efecto de estas políticas se siente a lo largo de la región andino-amazónica, en donde la implementación del Plan Colombia y la Iniciativa Regional Andina han provocado mayores niveles de militarización de nuestras fronteras, un ambiente de hostigamiento hacia los colombianos que están forzados a huir desplazados de sus lugares de origen, y crecientes niveles de represión bajo las dictámenes de los Estados Unidos en su “lucha anti-terrorista”. Todo esto está impactando lo poco que queda de nuestras soberanías, como esta demostrado con las bases militares, y para el caso ecuatoriano la base militar estadounidense de Manta.

Frente a esta situación declaramos nuestra rabia y nuestra oposición frontal. No estamos dispuestos a seguir aceptando tanta injusticia, tanto despojo ni tanta sangre inocente derramada. Declaramos nuestra resistencia.

Nuestras políticas, de diversas identidades, tendencias y realidades, se articulan en defensa de la vida y la justicia social, se articulan a favor de una verdadera integración basada en la solidaridad, el respeto, la igualdad y el fin del sistema de privilegios y explotación. Como demuestran las protestas populares en Argentina, Paraguay, Bolivia, Perú, y otros países, lejos de vivir el fin de la historia como pretenden los que promueven el modelo neoliberal; estamos dentro de un proceso reivindicativo y propositivo que nos llevará a nuestra segunda liberación, en donde los intereses ajenos, de un grupo reducido de familias y multinacionales, ya no dictarán nuestras vidas, ya no controlarán nuestros recursos ni nuestros derechos.

Decimos que ni el ALCA, ni los planes militares diseñados para implementarlo, podrán acabar con una resistencia que se ha construido y se sigue construyendo durante más de 500 años. Hoy en día asistimos no sólo a la globalización del capital sino también a la globalización de la resistencia y la esperanza. Ya no sólo es Coca–Cola quien está en todos los rincones del mundo sino también nuestra confrontación cada vez más articulada y fortalecida.

Nos sumamos a todos aquellos que han salido a manifestar su dignidad y su rechazo en las calles de Guayaquil, con el animo de fortalecer el proceso nosotros también nos movilizaremos el día de mañana. Hacemos un llamado para que juntos nos movilicemos contra el ALCA desde el 28 de Octubre hasta el 1 de Noviembre; a que participemos todas y todos en el Anillo de la Diversidad en Quito y con movilizaciones paralelas en nuestros diferentes países.

¡¡¡ NO AL ALCA !!!
¡¡¡ NO MAS BASES MILITARES GRINGAS EN AMÉRICA LATINA !!!
¡¡¡ VIVAN LOS QUE LUCHAN !!!
¡¡¡ OTRO MUNDO SÍ ES POSIBLE !!!

Colectivos presentes:

MIUT-Colombia, periódico El Salmón Urbano, Convergencia Democrática, La Rezurda, RADAK, Comuna Universitaria, Arte y Resistencia.

volver al índice

Segunda Convención Nacional contra el ALCA
Campaña Nacional contra el ALCA. 20 de septiembre de 2002

En el marco de la Campaña Nacional contra el ALCA (Área de Libre Comercio para las Américas), se realizó, en la ciudad de Cuenca, durante los días 13 y 14 de septiembre de 2002, la Segunda Convención Nacional contra el ALCA, con la participación de delegados/as de organizaciones indígenas, campesinas, sindicales, de estudiantes, de jóvenes, de mujeres, de derechos humanos, de artesanos/as, ecologistas, comunidades eclesiales, medios de comunicación alternativa, entre otras.

El punto central de esta Convención fue acordar y delinear actividades con miras a las Jornadas de Resistencia Continental, a desarrollarse a fines de Octubre, en Quito, con motivo del Encuentro Ministerial del ALCA, que se llevará a cabo en la misma ciudad.

Durante los dos días que duró el evento, se formaron mesas de trabajo sobre los siguientes temas:

1) Agricultura, seguridad alimentaria y economías campesinas,

2) Empleo y derechos laborales,

3) Mujeres y ALCA,

4) Medio Ambiente y rol de las transnacionales,

5) ALCA y Deuda Externa

6) Derechos Humanos y ALCA,

7) Educación.

Dentro de los principales acuerdos se estableció rechazar los procesos de negociaciones que se están llevando a cabo alrededor de la implantación del ALCA en nuestro país y América Latina; además, se resolvió llevar a cabo una Consulta Nacional para que el pueblo ecuatoriano se pronuncie si el gobierno debe continuar o no en tales negociaciones. Las mesas de trabajo coincidieron en señalar que el ALCA es un proyecto que responde a los intereses económicos y estratégicos de los Estados Unidos y de las empresas transnacionales, como respuesta a la crisis del capitalismo, que traerá consigo la pérdida de la soberanía, la profundización del modelo neoliberal y la subordinación de los derechos humanos y del interés público a los intereses económicos hegemónicos. En tanto tal, se acotó, es un proyecto que va de la mano de las políticas impuestas por el FMI, BM, BID, que promueven el pago de la deuda externa -deuda ilegítima que América Latina ya ha pagado-, haciendo caso omiso del pago de la deuda social.

En suma, al ALCA se lo caracterizó como un proyecto neo colonial de los Estados Unidos, pues no propone la integración sino la anexión de los países del continente, que estratégicamente se complementa, como dos caras de una misma moneda, con un componente militarista, que en la región se presenta como Plan Colombia e Iniciativa Regional Andina.

Con el propósito de sumar fuerzas para frenar al ALCA, la Convención acordó profundizar la resistencia basada en la unidad en la diversidad, teniendo como ejes la consulta popular, la oposición al modelo neoliberal, el rechazo tanto a las políticas del FMI, BM, BID y al pago de la ilegítima deuda externa, como a los planes guerreristas del gobierno Bush, en la región y en el mundo.

Las organizaciones presentes resolvieron, además, convocar a la movilización y a la integración alternativa de los pueblos latinoamericanos, que suponga el respeto irrestricto de los derechos humanos y de nuestras identidades, por un mundo diferente.

En cuanto a las actividades, el encuentro de Cuenca determinó que las movilizaciones de octubre arrancarán el día 12, con la celebración del Grito Continental de los/as Excluidos/as, para luego encadenarse con las Jornadas de Resistencia Continental Contra el ALCA -del 27 de ese mismo mes hasta el 1ro de noviembre-, que tendrán a Quito como epicentro, con un programa que incluye el "Encuentro Continental: Otra América es Posible" (28-30 octubre) y la concentración de movilizaciones el día 31.

En los días previos a estas Jornadas, el país será escenario de una multiplicidad de eventos, tal el caso del Encuentro de las Mujeres de las Américas: Rumbo a Porto Alegre 2003 (Foro Social Mundial), que se realizará en Cuenca del 24 al 26 de octubre.

Con el sentido colectivo que tiene la Campaña Nacional Contra el ALCA, en la mesa principal de la Segunda Convención rotaron dirigentes/representantes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Sindicales Libres (CEOSL), Confederación Nacional Afiliados Seguro Social Campesino (CONFEUNASSC), Coordinadora Política de Mujeres Ecuatorianas (CPME), Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores (CEDOCUT), Frente Ecuatoriano de Derechos Humanos (FEDHU), Grito de los/as Excluidos/as Ecuador, Foro Social Mundial-Ecuador, Red de Mujeres Transformando la Economía (REMTE) Ecuador, Comité Universitario Contra el ALCA, Acción Ecológica, como también el padre Eduardo Delgado.

¡ SÍ A LA VIDA, NO AL ALCA !
OTRA AMÉRICA ES POSIBLE

volver al índice

Las caravanas, más que una minga de palabras
CONFEUNASSC-CNC. 17 de agosto de 2002

Los hombres y mujeres del campo organizados en la Confederación Nacional del Seguro Campesino "CONFEUNASSC-CNC", iniciamos las caravanas de la diversidad en contra del ALCA.

El 20 de julio arranco la primera caravana en las provincias del Sur del país, (Azuay, Loja, El Oro).  La primera caravana desarrolló siete cabildos de trabajo (espacios de decisión comunitaria), en las que participaron más de 200 compañer@s. La caravana recorrió 7 cantones de los poblados rurales lejanos a las capitales de provincia.

Pese a las dificultades de carácter económico, se contó con el entusiasmo y apoyo de la población, en la caravana participaron como facilitadores lideres y ligerezas así como compañer@s (economistas, abogados, teatreros populares, fotógrafos, camarógrafos, etc), el objetivo de llegar con un mensaje sobre la problemática del ALCA, los impactos en la soberanía alimentaría, en la cultura y en la soberanía de los pueblos, así como ser un espacio de convocatoria a las jornadas de lucha contra el ALCA se cumplieron.

Fruto de esta primera jornada de la caravana se logro articular una propuesta inicial de movilizar durante los días de acción a 15 mil campesin@s y acompañar a la caravana del Sur en la marcha hacia Quito, con el fin de participar en el anillo de la diversidad (cerco a la cumbre ministerial). Se conformo un equipo local de multiplicadores de la información, de la resistencia y que hoy se encuentran capacitando y convocando por medio de asambleas a los demás comuneros. Ha habido eventos convocados por los multiplicadores en las que han estado presentes más de 400 campesinos, informándose sobre el ALCA.

Como fue el objetivo inicial, las caravanas de la diversidad, nos están permitiendo consolidar una propuesta de discusión y movilización social permanente. Es a través de las caravanas regionales que se viene trabajando las propuestas en contra del ALCA. Hoy, quizá es la primera vez que se convoca a la movilización desde las comunidades, y se discute sobre otras formas de integración.

El recorrido nos ha permitido llegar a cientos de compañer@s principalmente del sector rural, de los cuales un 60%son compañeras mujeres (Población que en talleres, charlas, foros centralizados se llega en porcentajes mínimos).

Para que la información que llega a las comunidades sea comprensible y tenga un efecto multiplicador se ha trabajado metodológicamente en base a la realidad campesina. Nuestras caravanas nacen de la experiencia de trabajo realizado en el tema de salud al interior de nuestra organización y hoy se enriquecen permanentemente en la recreación de la experiencia. Los recursos de educación popular (acción, reflexión, acción), como el teatro, el socio drama, los malabares, la música y la charla; son elementos que nos permiten articular la movilización.

Creemos que las caravanas son un medio de profundización de la propuesta campesina sobre la construcción de alternativas y de resistencia en base a la solidaridad, equidad, reciprocidad, interculturalidad e identidad campesina. El proceso caravanas nos permite construir alternativas a la problemática social, política, económica de la población rural, entonces las comunidades hablan de fortalecer su seguro social campesino, defender nuestra soberanía alimentaria, trabajar la propuesta de un banco de semillas nativas, que nos permita cuidar nuestra cultura alimentaria, cuidar de nuestro patrimonio genético, luchar por el acceso a la tierra, defender el medioambiente, la biodiversidad y el agua.

Las caravanas, pretender ir más allá de la dirigencia campesina, intentan llegar a la base, a la comunidad, intentar que los técnicos populares y los dirigentes trabajen la propuesta desde abajo, intentan ese acercamiento humano que en estos tiempos de globalización se están perdiendo.

La movilización de octubre va a reflejar la unidad en la diversidad, va a juntar las voces de los miles de indios, campesinos y sectores populares excluidos del modelo económico y político actual. Es por eso que durante la caravana, los mismos campesinos son aquellos que dan entrevistas para las radios alternativas, en las que plantean los problemas concretos de las comunidades, como los efectos de la apertura mercantilista de productos enlatados, transgénicos que amenazan a la forma de vida campesina.

Las provincias del Sur, son afectadas por la creciente migración hacia el extranjero, la desolación de pueblos y caseríos es mas evidente hoy que hace 10 años, fruto de la implementación del modelo neoliberal capitalista.

Las caravanas son una invitación, una convocatoria a no quedarse tranquilo, a hablar, a gritar, a proponer , son una invitación concreta a movilizarse, es un llamado a la acción y solidaridad global, es un llamado a globalizar la esperanza.

A inicios de Septiembre iniciaremos las caravanas de la sierra norte y la costa, esperamos contar con el esfuerzo  generoso y solidario de los pueblos hermanos.

ssc-cnc@campesinos-fmlgt-org.ec

volver al índice

El ALCA y la crisis de destino
Ricardo Gebrim*. 15 de agosto de 2002

Cuando los representantes de las trece colonias de América del Norte se reunieron por primera vez para rechazar las nuevas propuestas aduaneras de la metrópoli, jamás imaginaron las consecuencias de este acto. Al final del Siglo XVIII, Inglaterra era la nación más poderosa del mundo, dotada de una armada invencible y nadie osaba desafiarla.

En aquel momento, hubo una encrucijada histórica. La decisión de aquella generación definió el destino de los Estados Unidos de América.

Este no fue un episodio aislado. La historia está repleta de situaciones como esta. Cada período de crisis profunda proporcionó un nuevo arreglo del orden mundial antiguas colonias emergieron como naciones poderosas e imperios invencibles retrocedieron a situaciones coloniales. Son momentos de riesgos y posibilidades.

No es cualquier crisis la que genera tales posibilidades. Nos queda por saber si la actual crisis, que apenas comienza a instalarse, cuestionará nuestro destino.

La estrategia de los Estados Unidos para nuestro continente impone la construcción del ALCA. Se trata de la expansión y radicalización del Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA). En la práctica, el ALCA posibilitará la total desregulación de las economías latinoamericanas y, consecuentemente, la anulación del papel de los estados nacionales.

Si el ALCA se viabiliza, ¿cuál será el destino del Brasil?  Podemos afirmar con seguridad que nuestra economía estará definitivamente orientada a un centro económico matriz, estaremos desprovistos de moneda propia, sin una política económica autónoma y sometidos a centros externos de decisión jurídica. En otras palabras, nos encuadraremos en la definición clásica de una colonia.

¿Nación o colonia? Caio Prado Junior nos enseñó que todo pueblo tiene su evolución, vista a la distancia, un cierto "sentido" histórico. En nuestro caso, nacemos colonia y nuestro sentido de futuro ha sido dado por la capacidad de transformar aquella "no-nación" original en una nación.

Por lo tanto, estamos delante de una crisis de destino. De nuestra capacidad de impedir el ALCA en los próximos años dependerá el papel que ocuparemos en un nuevo período histórico.

Ese es nuestro gran desafío: construir un poderoso movimiento de masas que inviabilice el ALCA. No será una campaña fácil. Tendremos que concientizar, movilizar, y organizar millares de luchadores populares en los próximos años.

El Plebiscito Nacional es apenas el comienzo. Será el gran instrumento pedagógico para que el pueblo se inserte en el centro del debate. Todo militante podrá montar una urna y recoger votos.

Todos podrán participar. Será una oportunidad impar para despertar la conciencia antiimperialista, organizar a los luchadores populares y debatir con el pueblo la necesidad de construir una alternativa.

La lucha contra el ALCA exigirá paciencia y osadía, mas posibilitará la más importante victoria del pueblo brasileño: nuestra segunda y definitiva independencia.

* Ricardo Gebrim es integrante de la Coordinación Nacional del Movimiento Consulta Popular.

volver al índice