La Comisión Política del PCPV en sus reuniones de 20 de Septiembre y 
15 de Noviembre pasados, ha realizado un amplio debate sobre la 
situación en Esquerra Unida del País Valencià, en cumplimiento de la 
resolución aprobada en nuestro VII Congreso que mandataba a la 
dirección del partido abordar esta situación.

El presente documento de conclusiones y programa de trabajo, tiene 
como objetivo, su discusión en los Comités Comarcales y en las 
Agrupaciones para la aportación de propuestas, así como una reunión 
posterior del Comité Nacional, a celebrar el 8 de Febrero 97, que fije 
una posición homogénea del partido en nuestro trabajo en EUPV.

Conviene para el desarrollo de este debate recordar algunos de los 
contenidos de los documentos aprobados en el VII Congreso del PCPV. 
Así en lo referente a las relaciones PCPV/EUPV, se ponen de manifiesto 
algunas de las condiciones de esas relaciones. Estas se concretan en 
la defensa de los valores emancipadores y éticos de la izquierda, 
pretendiendo que estos sean hegemónicos en la sociedad. De igual 
forma, planteamos nuestro compromiso para impulsar a EUPV como 
Movimiento Político y Social, dotándole de formas de organización 
democráticas que conjuguen el respeto a su pluralidad interna, a la 
igualdad en el derecho al voto de todas y todos sus integrantes, y en 
donde queden desterradas viejas fórmulas de hacer y entender la 
política.

Igualmente se evidencia en nuestros documentos el compromiso 
inequívoco del Partido con el proyecto político de Izquierda Unida, de 
Esquerra Unida, así como la obligación de los y las comunistas a 
participar del mismo, y se plantea la necesidad de profundizar en la 
reflexión sobre su papel en EUPV, y de como relacionarse con ella. Al 
mismo tiempo considera necesario actuar más como partido en los 
Movimientos Sociales y en EUPV, elaborando propuestas a todos los 
niveles. Para ello considera imprescindible la participación activa y 
la colaboración de las y los militantes del partido. Todo ello sin 
renunciar a que cuando EUPV se inhiba de propuestas de actuación 
social que el Partido considere especialmente importantes, este pueda 
actuar directamente en los foros oportunos con el fin de desarrollar 
esas propuestas.

Precisamente en esa línea se planteó el plan de trabajo que presentó 
la Secretaría de Relaciones Políticas y Unitarias, a la Permanente, a 
la Comisión Política y al Comité Nacional del PCPV, del pasado 12 de 
Octubre.

En los propios documentos del VII Congreso se define nuestra relación 
con EUPV como problemática. ¿Porqué se producen estas difíciles 
relaciones que tantas incomprensiones han causado entre la militancia 
del Partido?.

En algunos casos la militancia no comprendió el paso de Coalición de 
Partidos, tanto en Izquierda Unida como en Esquerra Unida, a 
Movimiento Político y Social, y no digamos ya la polémica que se 
generó en torno al debate sobre la desaparición del PCE y la 
conversión de EUPV, previa su legalización como partido. Además tal 
vez sea adecuado pensar que los principales elementos que llevan a 
militantes a no integrarse en EUPV, y si lo están a no participar 
excesivamente, hay que buscarlos en las prácticas organizativas de 
EUPV.

No es que pretendamos decir que estas sean las únicas causas, ya que 
este fenómeno está bastante generalizado en las organizaciones 
políticas. Existen por tanto causas externas de carácter socio-
político que condicionan las relaciones de la militancia con sus 
organizaciones políticas. Pero como ya indicamos, a estas se suman en 
EUPV, las dinámicas propias. La suma de ambas hacen que el objetivo de 
ser un Movimiento Político y Social, está hoy por hoy en el papel. La 
conclusión es que EUPV, tiene una militancia poco activa en la que 
influye la desmotivación y la falta de iniciativas políticas. Parece 
lógico entender que difícilmente se puede estar motivado en una 
organización en la que se vulnera la democracia interna desde la 
propia dirección, y que parece que lo que más le preocupa es oponerse 
abierta y públicamente a buena parte de los acuerdos tomados por la 
Dirección Federal de IU, e intentar reducir al PCPV a la mínima 
expresión.

Así las cosas, lo que sería imposible es que la militancia del 
Partido, fuera insensible a todo ello. Evidentemente no lo es, de ahí 
que sean numerosos los problemas y las incompresiones de los 
militantes, existiendo una falta de confianza en el proyecto y una 
actitud de hostilidad hacia la Dirección de EUPV. Esta situación 
genera numerosas dificultades para el desarrollo del trabajo del 
Partido en el seno de EUPV, debilita el desarrollo de los temas 
políticos e impide el fortalecimiento del proyecto que nosotros 
defendemos en lo fundamental, no potenciando políticas alternativas 
hacia la sociedad.

En estos aspectos existe una total coincidencia tras el debate llevado 
a cabo en la Comisión Política del PCPV, más allá de la 
caracterización que hagamos del futuro del PDNE y de la mayoría que 
conforma junto a la Corriente Nacionalista (Esquerra i País)
la mayoría de la dirección en EUPV elegida en la Vª Asamblea de 
Noviembre de 1995.

En cualquier caso los consideramos como contrincantes políticos en 
nuestro trabajo en EUPV. Contrincantes, no solo en el terreno 
organizativo, sino también en el de la lucha por la hegemonía, 
entendida esta como la capacidad de influencia y penetración de 
nuestros planteamientos políticos dentro y fuera de EUPV. Dificilmente 
podrá haber hegemonía ideológica si la organización mediante la que se 
pretende transmitir el mensaje o parte del mensaje político, se 
muestra dividida, confusa y con contradicciones. Así pues, con 
independencia de la actitud de futuro de esta mayoría, coincidimos en 
que conseguir la hegemonía y su plasmación en una mayoría de izquierda 
consecuente en el proceso de la Vª Asamblea Federal de Izquierda Unida 
de finales de 1997, es una tarea capital para el Partido, por tanto 
debemos establecer cuales son los elementos sobre los que vamos a 
desarrollar el trabajo y las posiciones del PCPV. Todos coincidimos en 
que sean cuales sean los objetivos del PDNE y la Corriente 
Nacionalista “Esquerra i País”, la dirección política de éstos en EUPV 
tiene a la organización sumida en una crisis interna derivada de la 
falta de respeto a las normas democráticas, y del contínuo 
enfrentamiento con la política y la dirección Federal, con lo que el 
resultado es la paralización política de EUPV como proyecto 
ilusionante de la izquierda transformadora.

Es fundamental que los objetivos del partido se sitúen con nitidez, 
mejorando aspectos del pasado para ganar posiciones en EUPV, que nos 
permitan avanzar en relación tanto en las políticas a impulsar desde 
EUPV como en las cuestiones organizativas, es decir ganar la mayoría 
en EUPV. Conseguir este objetivo pasa por hacer respetar las normas 
democráticas de funcionamiento. Este ha de ser uno de los ejes 
fundamentales, y sobre el que debemos oponernos tajantemente a 
actuaciones arbitrarias y parciales, como las llevadas a cabo hasta 
ahora por la Dirección de EUPV. Además, debemos impulsar propuestas 
políticas en todos los ámbitos, desarrollar un amplio debate en las 
bases de todos los temas de interés y llevar allí nuestras opiniones, 
actuando no sólo como impulsores del debate de toda la militancia, 
sino también del conjunto de la acción política. Para ello es 
fundamental el funcionamiento orgánico del Partido, que ha de pasar a 
la ofensiva, ilusionar a toda la militancia y al conjunto de la 
adscripción de EUPV, no sólo porque se trate del proyecto estratégico 
del Partido, sino porque de permitir con nuestra pasividad que avancen 
posiciones como las del PDNE estaríamos contribuyendo a que se pusiera 
en peligro la existencia del proyecto político de Izquierda Unida, 
pero lo anterior será posible centrando el trabajo del Partido en los 
movimientos sociales y el movimiento obrero, única vía para hacer 
avanzar las posiciones de izquierda alternativa dentro y fuera de 
EUPV, tal como se concreta más adelante.


Estos objetivos exigen en lo concreto:


1.-) Desplegar nuestra actividad política en EUPV. Desde las áreas que 
dirigimos a nivel de País y desde los Consejos Políticos con mayoría 
de izquierda consecuente planteando iniciativas que visualicen de 
forma clara nuestro proyecto, sin supeditarlo a la mayoría actual del 
País Valencià, en tanto intente frenar estas iniciativas que 
sustancian los objetivos de EUPV; ejemplos: pacto de pensiones, 
construcción europea.....

A nivel de País y en aquellos Consejos Políticos donde estamos en 
minoría, nuestra actitud debe ser la de realizar un seguimiento de la 
actuación política y de las prácticas organizativas de la mayoría, 
proponiendo a la vez iniciativas y dándoles cobertura informativa 
hacia el interior de la organización y hacia el conjunto de la 
sociedad.

El trabajo de despliegue de nuestra actividad política en EUPV pasa 
por realizar un seguimiento de la política federal de Izquierda Unida, 
adoptando las medidas necesarias para que el conjunto de campañas y 
actividades políticas se desarrollen en el País Valenciano, 
apareciendo a la vez ante el resto de fuerzas políticas y sociales 
como los impulsores y defensores del proyecto de Esquerra Unida, 
plasmación en el País Valenciano del Proyecto de Izquierda Unida.

En este escenario político tenemos que prestar especial atención a los 
temas de “federalidad” entre IU y EUPV, tanto en sus aspectos 
organizativos como políticos e institucionales.


2.) Poner en funcionamiento al conjunto del Partido. Tal como 
aprobamos en el VII Congreso, reactivar el partido en todas sus 
funciones y mejorar su organicidad, es la mejor aportación que podemos 
hacer para desbordar políticamente la situación actual de EUPV.

Está demostrado por la experiencia y los datos, que aquellas Comarcas 
que funcionan de forma regular, son las que aportan mayores 
iniciativas hacia EUPV. Incrementar la actividad partidaria, dirigir 
al conjunto de la militancia a conseguir la hegemonia en EUPV, está 
íntimamente ligado a las propuestas que el Partido desarrolle hacia el 
conjunto de la sociedad. Nuestro trabajo en los movimientos sociales y 
en el movimiento obrero, es la palanca que nos puede permitir avanzar 
en nuestro proyecto de Esquerra Unida. No se trata, de descuidar 
aspectos formales y organizativos en el seno de EUPV, pero sí de 
constatar que sólo con la ampliación de la base social, generando 
iniciativas políticas se conseguirá en lo fundamental desbloquear el 
proceso de construcción y consolidación de nuestro proyecto de 
izquierdas, que actualmente caracterizamos como de “estancamiento” en 
EUPV.

En este apartado, también consideramos que es función del partido 
establecer una política de alianzas clara con los diferentes partidos 
y corrientes organizados en EUPV. (PASOC e “independientes); que en 
principio conformamos un proyecto y una listas en las Vª Asamblea de 
EUPV. Debemos intentar en la medida de lo posible reconducir las 
relaciones con el espacio rojo-verde-violeta. Con relación al PDNE y 
la Corriente “Esquerra i País” debemos tener en cuenta las diferencias 
existentes entre ambas organizaciones, estableciendo los contactos que 
nos permitan, mejorar cuanto menos la situación interna de EUPV. Así 
mismo debemos impulsar nuestras relaciones con Nacionalistes de 
Esquerra, ya incorporados a EUPV, y con los Verdes, con quienes se 
conformó la Coalición Electoral de 1995, sin encerrarnos en el marco 
viciado de las relaciones mayoría/minoría en la dirección de EUPV.

Por último, en este punto también debemos proseguir y ampliar nuestro 
marco de relaciones y contactos con otras fuerzas sociales y políticas 
situadas en el campo de la izquierda real y transformadora, tratando 
de implicarlas a diferentes niveles en las líneas de trabajo que 
desarrollamos en EUPV.


3.) Mantener la relación federal entre Esquerra Unida e Izquierda 
Unida. Un aspecto que exige un tratamiento específico, y que de hecho 
suscitó un amplio debate en la Comisión Política, no únicamente por el 
futuro más o menos incierto en función de todas las variables 
políticas que hoy se mueven en el “campo de la izquierda como 
definición sociológica”, sino por el actual presente y el conocido 
pasado, es la actuación arbitraria que en materia de prácticas 
organizativas se lleva a cabo desde la dirección de Esquerra Unida.

Situaciones como la de Quart, que vivimos actualmente y tantas otras 
que se han producido en el pasado, ponen a Esquerra Unida en el límite 
de su relación federal con Izquierda Unida, acercándose de forma 
preocupante al borde del precipicio de la ruptura. 

Al tiempo que nos preparamos frente a cualquier eventualidad debemos 
ser los principales defensores del protocolo de Federalidad aprobado y 
acordado de forma unánime entre EUPV e IU en Diciembre de 1992, y ello 
con especial contundencia en la perspectiva de la Vª Asamblea de 
Izquierda Unida.

A la vez hacer respetar hasta sus últimas consecuencias las normas 
democráticas de las que nos dotamos en EUPV tiene que ser otro 
componente de nuestro trabajo. Los elementos de respeto a la 
federalidad y a las normas democráticas de funcionamiento son por un 
lado un factor de diferenciación entre nuestra actividad política y la 
de la actual mayoría de EUPV, y por otro son la mayor garantía que 
ayuda a ejemplificar nuestro modelo de construcción del proyecto de 
una Izquierda Unida plural, alternativa y que funciona como Movimiento 
Político y Social con todos sus componentes ideológicos en su seno. En 
este campo no debe quedar ninguna duda.

Finalmente, la Comisión Política del PCPV entiende que es necesario 
conseguir que todos los Comités Comarcales y todas las Agrupaciones 
del Partido discutan esta realidad y esta propuesta de tareas 
adaptándolas a la situación local y comarcal, impulsándolas de forma 
orgánica desde el Area de Organización y en especial desde la 
Secretaría de Relaciones Políticas y Unitarias.


Valencia, 5 de Diciembre de 1996