¡Libre cultivo de la hoja de coca! ¡Libertad para los presos políticos! 

      
                 Por Celia Hart, Una Deuda con Haydee


Teresa Villasante M./ Mariátegui
 10/10/08


Compañeros, compañeras:

No conocía a Celia Hart Santa María, aunque en algunas actividades políticas o culturales a mis oídos llegaban expresiones sobre ella unas veces aceptables otras desagradables...pensaba que extraño como puedes ser así si es hija de personas relevantes de esta revolución?

Un buen día dentro de un grupo de amistades alguien nos presento, trate de ver en su rostro el parecido a la compañera Haydee y note que ella también escudriñaba el mío. Esa tarde estuve observando sus intervenciones y opiniones, realmente no halle lo que expresaban aquellas gentes que no tuvieron el valor de profundizar en su conocimiento, pues Celia era precisa, elocuente, razonable. A través del tiempo amplié mas en su personalidad, así fui descubriendo otras facetas de su activa vida. Sentía como un deber hacerlo, pues hacia mucho tiempo quise conversar con su madre, sus múltiples actividades impidió este encuentro. Encuentro que me era necesario.

Celia era de una clara inteligencia y vitalidad tal, que me parecía no podía estar sin polemizar, cualquier lugar era una tribuna para la defensa de la Revolución, de su revolución como decía y decía que esta llego para quedarse.

La Revolución no era estática, era Permanente. Ese amor de Celia por la Revolución y su líder comandante Fidel Castro Ruz le daba a Celia una luz de combatividad, de ética revolucionaria en cualquier lugar dentro o fuera del país. Así con pasión revolucionaria Celia defendía sus ideales sin eludir diferencias, así de frente sin tapujos, con esa franqueza incuestionable, que quizás a algunos les chocara o se sintieran pequeños o se revolvieran en sus propios demonios.

Les diré algo que hizo la admirase mas: su sentido de la camaradería , amistad. Era tan cabal en estos sentimientos que no dudo un solo instante al ofrecerme su herramienta mas preciada, que amaba tanto: su computadora, al enterarse que tenia dificultades con la mía.
Esa generosidad propia de una verdadera amistad, no tenía precio. Era así, rápida, directa, lista al sacrificio.

Recuerdo una vez en el Memorial Salvador Allende, habia una actividad política en honor a un grupo de brasileños. Al concluir esta, Celia se presenta al grupo diciendo: Soy Celia Hart Santa Maria, soy marxista, leninista y trostkera-trostkera porque diferia del sectarismo de algunos grupos trostkistas- Esa alusion tan directa hizo que los compañeros y compañeras se agolparan a su alrededor haciendole multiples preguntas...asi era ella una verdad sin tapujos.

Y los 5 siempre estaban presentes, en cualquier tribuna explicaba lo injusto de sus encierros. Celia fue en mi modesta opinión, un simbolo en la defensa de los 5 en cualquier país que tuvo la alegría de acogerla. LLego a identificarlos como su Moncada, el Moncada que hacía falta en nuestros paises, también decía que la Solidaridad Mundial sería tan grande que la presencia de ellos en EE.UU. sería insostenible.

En honor a ella multiplicaremos acciones para hacer realidad ese sueño de muchos !Que los 5 regresen,ya!

Es mi pequeño homenaje a esa gran mujer que fue Celia Hart Santa Maria, sólo en algunas facetas de su fecunda vida .

!Celia viviras en la memoria de todo revolucionario!


 

 

 

 

 

 

 

                                                            Mariátegui. La revista de las ideas.