¡Libre cultivo de la hoja de coca! ¡Libertad para los presos políticos! 

      
                   Perú: ¿Resistencia de los nativos? ¡Pasemos a la Ofensiva!

                           

        Foto: Aidesep

Tankar Rau-Rau Amaru (*) / Mariátegui
 25/08/08


Ganó la razón. Perdió la locura. Alan García quiso entregar a los extranjeros -como si fuera su chacra- las tierras de las comunidades campesinas, que en otro tiempo se llamaban ayllus.

El Congreso de la "República" aprobó el proyecto de ley 2440 que deroga los decretos 1015 y 1073, después del paro que comenzó en la selva y amenazó con incendiar todo el país. Pero faltan derogar otros decretos: 1064, 994, 1081, 1090.

Es la primera vez que las comunidades campesinas se unen para hacer frente a la política entreguista y antipatriota de Alan García, Alejandro Toledo, Alberto Fujimori, Fernando Belaúnde y otros.

Resistencia
Hasta ahora nosotros los verdaderos dueños de este territorio al que llaman Perú hemos venido resistiendo. Hubo resistencia cultural en los últimos 500 años, y tal parece que seguimos vivos. Hubo resistencia militar, con miles de muertos de por medio, y sobrevivimos. Hubo resistencia económica, y todavía quedan algunos capitales nuestros. Hubo resistencia política: nos tomaron en cuenta para cargos secundarios (de adorno) pero nunca nos dejaron tomar decisiones. Hubo resistencia religiosa, y nuestros dioses no han muerto en las sierras y en los bosques. Nuestras lenguas se reaniman y dan sus primeros pasos.

A la Ofensiva
Pero ya basta de resistencias. Nuestros ancestros optaron por la resistencia porque no tuvieron las herramientas necesarias para pasar a la ofensiva y tomar el control del territorio que les pertenecía. Este territorio fue nuestro, es nuestro. Compartámoslo con quienes practiquen la solidaridad y justicia social. Compartámoslo con quienes, a pesar de haber venido de otros países, decidieron quedarse aquí, para hacer patria. Pero saquemos de aquí a quienes, con apetito voraz y en nombre de la libertad de mercado, han venido a robarnos, a quitarnos el pan. Pasemos a la ofensiva. Ofensiva cultural (propias universidades), militar (un ejército armado dentro y fuera de los cuarteles), económica (abramos nuestros propios bancos), política (fundemos partidos Kechwas, Ashánikas, Aymaras), resistencia mediática (abramos nuestros medios de comunicación).

La derogatoria de las dos leyes es un paso importante para las comunidades campesinas. Nos organizaremos a nivel nacional para derogar las otras leyes que atentan contra nuestro territorio. Pero no sólo eso. La caída de este gobierno sería un pequeño paso, pero un paso muy importante para nuestro proyecto de recuperación total de nuestra Pachamama.


(*) Secretario Regional de Ideología del Movimiento de Integración Kechwa Apurímac (MINKA). (tankar2@hotmail.com)




 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

                                                            Mariátegui. La revista de las ideas.